Es un hecho: el traje en 2020 se llevará sin nada debajo
Kim Kardashian vende en su marca una cinta adhesiva para fijar el busto, la modelo Emily Ratajkowski agota sus nuevas americanas vistiéndolas a pecho descubierto y la alfombra roja se llena de esta forma de llevar el clásico dos piezas.
Googlear ‘cómo llevar un traje sin nada debajo’ no solo devuelve un buen surtido de celebrities vistiendo la tendencia, también varios tutoriales que enseñan los trucos para hacerlo sin sustos. Kim Kardashian, máximo exponente de la fiebre por dejar entrever el pecho bajo una chaqueta formal, incluso acaba de lanzar en la página web de su firma Skins una cinta adhesiva que ofrece sujeción y cobertura. El invento, que ella misma hace tiempo confesó util...
Googlear ‘cómo llevar un traje sin nada debajo’ no solo devuelve un buen surtido de celebrities vistiendo la tendencia, también varios tutoriales que enseñan los trucos para hacerlo sin sustos. Kim Kardashian, máximo exponente de la fiebre por dejar entrever el pecho bajo una chaqueta formal, incluso acaba de lanzar en la página web de su firma Skins una cinta adhesiva que ofrece sujeción y cobertura. El invento, que ella misma hace tiempo confesó utilizar para elevar el busto y evitar que se mueva, ya está agotado en los tres tonos disponibles. Con la promesa de no caerse con el sudor y aguantar hasta 12 horas, la reina de la telerrealidad incluso ha colgado un vídeo en el que detalla, paso a paso, cómo debe colocarse el adhesivo.
El truco interesa cada vez a más mujeres en la medida en que el número de celebrities que se atreven a vestir chaqueta sin nada debajo va en aumento. No es algo que no se haya hecho antes (Gwyneth Paltrow, por ejemplo, lució una de las versiones más extremas en 2013), pero cada vez gana más adeptas. Miley Cyrus, Lady Gaga, Amber Valletta, Zendaya o Kristen Stewart son algunos de los rostros que se han apuntado a la combinación en la alfombra roja. No solo es una forma de hacer más femenina una prenda que tradicionalmente perteneció al armario de ellos, sino una reivindicación del pecho capaz de escapar a la censura de Instagram. Y, por qué no, también es un truco efectivo para transformar cualquier traje en una versión más festiva y sensual; razón por la cual la versión abunda en los looks de firmas como Zara o Mango de cara a Navidad.
Si en los 80, con la ascensión de la mujer a cargos de poder, triunfó el power dressing; en los 90 arrasaron los conjuntos oversize y en los 2000 el chándal fue su sustituto, de cara a la década que está por comenzar parece que la chaqueta sin nada más marcará la pauta.
La moda es una nueva versión de aquel furor por marcar pezón que arrasó en 2017. Aunque ir sin sujetador tiene, sin lugar a dudas, connotaciones feministas y políticas, muchas de las celebrities que prescinden de él probablemente lo hagan por una mera cuestión estética. La propia Kendall Jenner lo dejó claro cuando lo definió como algo «cool y sexy». Para ella y otras modelos como Bella Hadid o Emily Ratajkowski pasar del sostén resulta una opción tan idónea para el día a día como ponerse unos vaqueros. Y al mismo tiempo se suben al carro de encumbrar el cuerpo femenino y despojarlo de las convenciones sociales que abogan por taparlo. Tras la muerte del ‘push up’ y la proliferación de los sujetadores triangulares de tejidos suaves que pasan del relleno, el siguiente paso es prescindir de él.
Precisamente Emily Ratajkowski no solo ha hecho viral el look ‘chaqueta sin sostén’ posando ante sus 24 millones de seguidores en Instagram cubierta solo por una americana, también ha logrado agotar la prenda en cuestión. Los trajes que luce son la última incorporación a su firma de moda Inamorata, que hasta ahora solo despachaba prendas de baño. Ella misma posa en el lookbook de la marca luciendo todos los conjuntos de blazer y falda de la misma manera: sin nada debajo. Su exuberante figura probablemente haya tenido mucho que ver en el éxito de ventas.
Además de en alfombras rojas, grandes cadenas y redes sociales, la combinación ha triunfado en las últimas semanas de la moda. Muchas asistentes a los desfiles han actualizado el ubicuo traje llevándolo sin nada debajo. Para ellas la clave está en elegir modelos ligeramente amplios, abrochar los botones (al contrario que algunas celebrities que han posado ‘a pecho descubierto’) y, a buen seguro, fijar el busto con algún tipo de invento adhesivo como el de Kim Kardashian. No es una tendencia fácil de lucir en el mundo real, pero es posible hacerlo, por ejemplo, de cara a las próximas fiestas navideñas, eligiendo americanas que no sean demasiado escotadas.
Teniendo en cuenta que la fiebre por los trajes para mujer ha ido en aumento los últimos meses y seguirá creciendo las próximas temporadas (la agencia de estudios de mercado Euromonitor estima que el mercado global de los conjuntos femeninos rozará los 23.600 millones de euros en 2022), parece que toca explorar todas sus posibilidades. De cara a la próxima temporada primavera-verano 2020 varias firmas como Givenchy o Saint Laurent también han subido a la pasarela esta opción. Ahora que Kim Kardashian podría acatar la imposición de su marido, Kanye West, de no vestir tan sexy, quizá deje de ser la mejor embajadora de la tendencia. Pero todo apunta a que no le faltarán sustitutas.