Así eran y así son las chicas Almodóvar

El estreno de su película número 20, Julieta, es la excusa para charlar con mujeres que han sentado cátedra en el lenguaje estético del director manchego. Un universo que ellas mismas revisitan con recuerdos a todo color

VERÓNICA FORQUÉ
Kika en ‘Kika’ (1993)

Lo reconocía el propio Almodóvar: «Cinematográficamente hablando, Kika es una película ambiciosa y fallida. Desconcertó que arrancase como una comedia disparatada y terminase como un thriller tenebroso. Pero hasta ese momento nadie había desarrollado tan brillantemente mis ideas como Gaultier». Su protagonista, Verónica Forqué, ganó un Goya por su interpretación. «Kika es exuberante, habla todo el rato, y los vestidos de Jean Paul Gaultier estaban llenos de flores para que eso se notara», recu...

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VERÓNICA FORQUÉ
Kika en ‘Kika’ (1993)

Lo reconocía el propio Almodóvar: «Cinematográficamente hablando, Kika es una película ambiciosa y fallida. Desconcertó que arrancase como una comedia disparatada y terminase como un thriller tenebroso. Pero hasta ese momento nadie había desarrollado tan brillantemente mis ideas como Gaultier». Su protagonista, Verónica Forqué, ganó un Goya por su interpretación. «Kika es exuberante, habla todo el rato, y los vestidos de Jean Paul Gaultier estaban llenos de flores para que eso se notara», recuerda. Aquellos diseños se crearon en París, pero no vio al diseñador hasta el estreno del filme. La actual directora de vestuario de Pedro Almodóvar, Sonia Grande, recuerda aquel trabajo como «una locura tropical». Forqué descubrió entonces lo importante de un buen calzado: «En ese rodaje me subí a unas cuñas y no me he vuelto a bajar. Kika también las seguiría usando». Verónica Forqué ha vuelto al cine en 2016 con la comedia ‘Tenemos que hablar’.

‘Hansel y Gretel (tienen armas)’ es el último de los cuentos publicados hasta ahora.NRA

MARÍA BARRANCO
Candela en ‘Mujeres al borde de un ataque de nervios’ (1988)

«Este reportaje es para hundirme en vez de para lucirme, ¿no?», pregunta durante esta sesión de fotos María mientras recuerda a aquella Candela que rodó hace casi 30 años. «Yo tenía la misma cara dentro y fuera del rodaje, porque estaba atacada por la oportunidad que suponía. Pedro me pidió que le perdiera el respeto, porque si no aquello no iba a ningún lado. Y me relajé. Mi personaje era para Victoria Abril, una dobladora. Pero al hacerlo yo pasó a ser modelo y de Málaga». Entre risas, recuerda que su Candela llevaba en principio unos botines de diseño, pero se dieron cuenta de que no podrían salirse de su pie en la escena en la que se tira de la azotea, «así que la única opción fue un zapatón tres números por encima del mío. Y fue mítico». Tanto como aquellos pendientes de cafetera que la actriz guarda en su casa enmarcados. Sonia Grande tiene claro que en esa película «había intención de mezclar prendas almodovarianas con otras más al uso, y eso la hizo sorprendente. Eran primordiales los complementos y el sentido del color, casi más que los vestidos. Pedro no rodaría esa cinta hoy, está en una época en la que le interesan otras cosas». Y Almodóvar le da la razón, al menos a lo primero: «Había exceso de tacón y falda tubo», ha comentado. María Barranco acaba de terminar la gira de ‘La Legionaria’, de Fernando Quiñones, que estrenará próximamente en Madrid.

María Barranco en su papel de Candela. Foto: D.R.
María Barranco lleva vestido de U DE ALDOLFO DOMINGUEZ. Foto: Félix Valiente.

KITI MÁNVER
Madame Mylene en ‘Los abrazos rotos’ (2009)

Sonia Grande recuerda que para el vestuario de Los abrazos rotos se hicieron infinitas pruebas. «Había algo casi obsesivo en ir siempre a mejor. Recuerdo que Penélope y yo pasamos días encerradas en El Deseo probando ropa. Aquí comenzó la tercera de las etapas de Almodóvar: una primera, joven y underground; una segunda, a partir de Átame, más profesional y asentada por el éxito; y una tercera que empieza a verse en este filme. Podía hacer lo que diera la gana porque no tenía nada que demostrar. Eso es algo que solo me pasa con Pedro y con Woody Allen». Nada en los planos del director manchego está por casualidad, ni siquiera en los pocos segundos que el personaje de Kiti Mánver aparece en escena. «Sabe lo que quiere en cada fotograma», dice la actriz que ha participado en cinco de sus largos. «El look de mi personaje me recordaba el estilo de la Marbella de Gunilla von Bismarck, con aquellas señoras capaces de ponérselo todo. Hay que dejarse llevar por quien dirige, especialmente si es Pedro con su universo estético. De hecho, todo lo que llevaba en esta película me quedaba un poco estrecho…». Madame Mylene ha sido su última mujer Almodóvar. Tanto ella como Sonia Grande opinan que hoy en día Pedro la vestiría exactamente igual. Kiti Mánver trabaja en ‘Seis hermanas’, en La 1; está de gira con el musical ‘Iba en serio’ y comenzará a rodar ‘Las heridas del viento’, de Juan C. Rubio.

Kiti Mánver en su papel de Madame Mylene. Foto: D.R.
Kiti Mánver, americana y camisa de seda, ambas de ADOLFO DOMINGUEZ; pendientes y collar, todo de ALIBEY; y anillos de SUÁREZ. Foto: Félix Valiente.

ASSUMPTA SERNA
María Cardenal en ‘Matador’ (1986)

Treinta años han pasado desde el estreno de la película más extraña de la filmografía de Almodóvar, tal vez por ser la única que no produjo El Deseo y de la que hoy en día no tiene los derechos (los posee el productor Andrés Vicente Gómez). «Es un filme raro provocado por el empeño de usar una tauromaquia muy ochentera como telón de fondo. Noté por primera vez que la moda había llegado al mundo de Pedro», dice Sonia Grande. Su protagonista, Assumpta Serna, recuerda cómo Almodóvar agradecía la generosidad de sus actores en cada plano. «Entonces yo era más conocida que él, incluso presenté la película en París. Buscábamos en mi look constantemente a Charo López, a quien había ofrecido el filme pero lo rechazó. Y trabajamos con muchos diseñadores para construir un personaje hermético. Hace poco volví a ver la cinta en un festival de cine rumano y me llamó la atención lo bien que ha soportado el paso del tiempo, salvo por aquel vestuario tan ochentas. Hoy me imagino a Prada al frente de aquella locura», dice la actriz. Para Pedro, «el personaje de Assumpta es frío hasta que decide hablar, y su boca se convierte en un volcán en erupción. Siempre se intuyó en ella una gran capacidad de bucear en el fondo de lo prohibido». Assumpta Serna ha dirigido un documental para Sky Art de Reino Unido sobre el Ecce Homo de Borja y participa en un cuento de ficción sobre el mismo tema.

Assumpta Serna en su papel de María Cardenal. Foto: D.R.
Chaqueta de CLAUDE PIERLOT, camisa de BRUNELLO CUCINELLI y pendientes de PEPITA IS DEAD. Foto: Félix Valiente.

EMMA SUÁREZ
Julieta en ‘Julieta’ (2016)

Emma, la última musa de Pedro Almodóvar, interpreta a «una mujer herida todo el rato», cuenta. Para el vestuario, Sonia Grande trabajó con piezas exclusivas, en las que primaron el rojo y el negro. «La poética pesaba en el guión, mandaba una selección menos barroca y más simbólica que otras veces. Hay un acercamiento a lo sencillo. Bueno, a lo almodovarianamente sencillo», advierte Sonia, quien usó para Julieta desde la túnica de forte_forte con la que abre el filme hasta una bata con dibujo art déco de 1920 que compró en un anticuario de Londres. Suárez recuerda en particular las prendas holgadas: «Bastantes apreturas tiene ya Julieta en su vida». La actriz reconoce que el vestuario es un arma más para defender al personaje. En ese sentido, el color rojo fue un aliado, «porque en Julieta siempre hay pasión, de una forma u otra». ‘Julieta’ se estrena el próximo 8 de abril.

Emma Suárez en su papel de Julieta. Foto: D.R.
Túnica de PEPA SALAZAR. Foto: Félix Valiente.

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