Emma Watson: «No me reconozco en las revistas»
De niña sabionda a rosa inglesa. La actriz rehúye de las extravagancias de la fama, pero esta se empeña en seguir sus pasos. Sofía Coppola pone esta vez la magia.
A sus 23 años y lejos de arruinar su carrera de niña prodigio, Watson estrena The Bling Ring, un estudio de Sofia Coppola sobre la obsesión de Hollywood con sus famosos. La actriz, nacida en París, cada vez pasa más tiempo en Estados Unidos con sus libros, su carrera de Filología inglesa y su novio, Will Adamowicz, del que prefiere no hablar públicamente mientras la prensa del corazón hace sonar campanas de boda.
¿Se siente más americana que europea?
Sigo en Estados Unidos porque estoy terminando mis estudios, pero no hay duda de que aquí la...
A sus 23 años y lejos de arruinar su carrera de niña prodigio, Watson estrena The Bling Ring, un estudio de Sofia Coppola sobre la obsesión de Hollywood con sus famosos. La actriz, nacida en París, cada vez pasa más tiempo en Estados Unidos con sus libros, su carrera de Filología inglesa y su novio, Will Adamowicz, del que prefiere no hablar públicamente mientras la prensa del corazón hace sonar campanas de boda.
¿Se siente más americana que europea?
Sigo en Estados Unidos porque estoy terminando mis estudios, pero no hay duda de que aquí la industria es más grande. También lo es mi libertad, porque no soy la chica de moda. Así que ya veremos lo que pasa cuando termine de estudiar. Y mientras, a tirar de maleta.
¿Se siente segura con sus cosas tras conocer los robos que se sucedieron en la verdadera historia de The Bling Ring?
Soy de las que viajo con la maleta candada. Lo mismo que mi casa. Tomo todo tipo de precauciones porque me pone los pelos de punta la cantidad de información que alguien puede tener de mí.
¿Existe algún objeto imprescindible en sus viajes? ¿Ese que le hace sentir como en casa?
Probablemente mi oso de peluche, Wilfred. Lo quiero muchísimo y realmente lamentaría mucho perderlo.
¿Qué es lo que más le sorprendió de Paris Hilton cuando les abrió su hogar para el rodaje?
La mandíbula se me cayó al suelo al ver la cantidad de zapatos que tiene. Un mundo aparte. Es imposible que se los ponga todos.
¿Cuál es su mayor extravagancia?
Me encantan los Hobnob, unas galletas británicas de chocolate. Y las velas perfumadas. Este rodaje fue divertido porque no tengo nada que ver con mi personaje y me tuve que transformar por completo: teñirme el pelo, ponerme extensiones, tatuajes, autobronceador, botas de peluche o tacones ridículamente altos. No hay nada de eso en mi armario.
¿Su estilo personal se parece más al que exhibe en las revistas de moda?
Depende, a veces no me reconozco. Y es de locos ver una foto tuya y no estar segura de si es tu retrato.
¿Qué es lo que le queda de Hermione de Harry Potter?
Tengo 23 años. Hace cuatro acabé la saga, una eternidad para mí. A veces se me olvida que hay una nueva generación que comienza a conocer ahora a los personajes de J. K. Rowling.
Pese a las criticas, ¿frecuenta las redes sociales?
No queda otra. Escribo cartas de puño y letra para dar las gracias. El resto son correos electrónicos, más rápidos. Y también tuiteo, pero para hablar de música y cine, no como algo personal.
Y gracias a sus tuits cobró vida propia su desmentido a cualquier posibilidad de interpretar a Anastasia Steele en 50 Sombras de Grey.
Me fascina que hubiera gente que pensara que realmente era un papel para mí.
La edad obviamente ayuda, pero ¿sigue algún régimen de belleza para el futuro?
Sí. Hago yoga. De hecho, me encanta. Practico danza y no soy de las mujeres a las que les gusta utilizar mucho maquillaje. Esos son mis secretos más saludables.
Además de estar enamorada.
Sí, además del color que pone en tus mejillas el amor. Pero no pienso hablar de ello.