El arte de admirar el poder sexual de Leonardo DiCaprio

Leonardo DiCaprio podrá ser un actor sin Oscar (lo ha perdido 5 veces en los últimos 21 años) pero, sin duda, es la envidia del corral mediático. O como se explicaba ayer en el New York Daily News, Leo DiCaprio es un "héroe". Han pasado más de 15 años desde que la prensa revelase las hazañas del Pussy Posse (la pandilla del ejem, ya saben), una suerte de séquito...

Leonardo DiCaprio podrá ser un actor sin Oscar (lo ha perdido 5 veces en los últimos 21 años) pero, sin duda, es la envidia del corral mediático. O como se explicaba ayer en el New York Daily News, Leo DiCaprio es un "héroe". Han pasado más de 15 años desde que la prensa revelase las hazañas del Pussy Posse (la pandilla del ejem, ya saben), una suerte de séquito liderado por el protagonista de Titanic y otros hombres de la industria como Harmony Korine o Tobey Maguire en los que fiesteaban sin límites, se iban sin dejar propina y arramblaban con toda mujer presente en el local de turno. Casi dos décadas después, y con muchos de los implicados retirados de la vida nocturna, DiCaprio sigue en racha. El actor se ha dejado caer por las fiestas de la Miami Art Basel y, según avanzaba el Daily News ayer, su poderío sexual se certificó cuando abandonó la fiesta de Bullet Magazine acompañado de 20 mujeres. Básicamente, todas las que estaban en la zona VIP. "Se fue con 20 tías. Leo y 20 tías. Él es mi héroe", contó uno de los asistentes al rotativo. "Estaba rodeado de modelos. El tío de los Jonas Brothers (Joe, que acompañaba a DiCaprio en la fiesta) parecía asustado, como si se fuese a ahogar entre tanta mujer. Su cara era un poema". 

En apenas unas horas, la hazaña de DiCaprio tiene más de ocho millones de entradas en Google. No ha habido revista de cotilleo que no se haya hecho eco de la fiebre del domingo noche del actor que mejor baila en Coachella. En ninguna se cuestiona su actitud en el tono moralista con el que estas publicaciones suelen actuar. Todo es un Win-Win. Para Leo, que sigue siendo el King of the world al que estamos acostumbrados, y para ellas, que se van con el hombre de la fiesta.

En mayo de 2013, navegando a su manera por el sur de Francia.

Gtres

Pero, y si fuese una actriz la que se fuese con 20 tíos de un local, ¿la cobertura mediática sería la misma? O pongámoslo mejor todavía, ¿y si los medios hubiesen hecho una cobertura del fiestón de DiCaprio imaginando que él fuese una mujer? Jessica Goldstein, desde Think Progress, lo ha hecho. "¿Cómo se cura un corazón roto? Leonardo DiCaprio piensa que 20 extrañas pueden reemplazar a aquella que se marchó. El actor, que vive en un continuo ahora-sí-ahora-no con su novia Toni Garrn, festejó anoche su soledad en South Beach. En un acto desesperado por llamar la atención, Leo abandonó el local y se llevó con él a toda mujer presente en sala VIP. Los testigos describieron una mirada de pánico en los ojos de Leo mientras buscaba en una habitación llena de modelos a la única que no estaba allí". Con mucha ironía y con frases como "ninguna mujer te va a respetar si te tiras a medio catálogo de Victoria's Secret" o "numerosas fuentes aseguran que Leo nunca ha superado a su amor verdadero: 'Gisele quería una familia pero él no estaba preparado, así que ella se marchó", Goldstein ha dado en el clavo al evidenciar en clave humorística el doble estándar para juzgar el comportamiento sexual de hombres y mujeres.

Basta con hacer un poco de memoria y traer a colación toda la narrativa de tristeza absoluta y desamparo que ha acompañado a Jennifer Aniston desde que se divorció de Brad Pitt. Jennifer Aniston, la eterna abadonada (y embarazada). Jennifer Aniston, la infeliz (incluso cuando se rumorea su compromiso con Justin Theroux). O como cuando se culpabilizó y criticó la conducta de Jennifer Lawrence y compañía cuando ellas habían sido las víctimas del hackeo y filtración de imágenes privadas. Hace unos días, las mismas fuentes que ahora alaban a DiCaprio, acusaban a Reese Witherspoon (ganadora de un Oscar y posible candidata a otro en 2015 por su papel en Wild) de tener serios problemas con la bebida porque un paparazzi la había cazado bebiendo no una, sino ¡dos! copas de vino ¡antes del mediodía!

Puede que Wolfie tenga al mejor publicista del mundo y sea la excepción que confirma la regla, pero en el mundo del famoseo está Leo, ese incombustible machote que sabe disfrutar de la vida, y luego están ellas, esas almas atormentadas con comportamiento errático e incapaces de recuperarse tras un ruptura.

DiCaprio, durante su estancia en Miami y pocas horas antes de su hazaña.

CORDON PRESS