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Del altercado aéreo de Melendi a la borrachera de Paulina Rubio: cuando las ‘celebrities’ pierden los papeles

Recopilamos algunos de los escándalos más mediáticos protagonizados por estrellas de la música, el cine o el deporte.

Kanye West – Elegir solo uno de los múltiples y sonados colapsos de un artista que actualmente mantiene su candidatura a presidente de los Estados Unidos, y que se ha calificado a sí mismo como una reencarnación de Moisés, se antoja harto complicado. Pero quizá el primer y más polémico ladrillo de su excéntrico muro de lamentaciones se puso en septiembre de 2009, durante los premios MTV Video Music Awards, cuando se mostró como un abusón adolescente al irrumpir en la gran noche de una joven Taylor Swift para alegar que el premio al mejor vídeo se lo merecía más su amiga Beyoncé. ¿Por qué lo hizo? Según West, fue una “orden directa de Dios”.Getty (Getty Images)
Britney Spears – Estas fotos se convirtieron, como desgrana Javier Caballero en este artículo de S Moda, en las más caras de la historia jamás vendidas por un paparazzi. Medio millón de dólares se embolsó el fotógrafo que captó el momento en el que la cantante, en el momento más complicado de su vida profesional y personal por la disputa de la custodia de sus hijos, decidió raparse la cabeza en una peluquería. Pocos días después llegaría el ataque a los paparazzis con un paraguas verde que se convertiría en un meme instantáneo. “Si Britney Spears superó 2017, nosotros podemos superar cualquier cosa”, dice el eslogan motivacional nacido de aquel episodio.Cordon Press
Tom Cruise – “Mi año de saltar peligrosamente”. Con este título, en referencia a la mítica película ochentera protagonizada por Mel Gibson y Sigourney Weaver, calificó Tom Cruise su indescriptible performance en el show de Oprah Winfrey en 2005. Con motivo de la campaña de promoción de La guerra de los mundos, el actor aprovechó su visita al formato para proclamar su amor por Katie Holmes como si hubiera ganado una medalla olímpica: agarrando a la presentadora, arrodillándose de la emoción y saltando sobre el sofá. Su exaltación fue tan comentada que incluso fue parodiada en la película Scary Movie 4.
Miguel Bosé – Bill y Melinda Gates, la superpolio mortal, la Organización Mundial de la Salud, microchips y nanobots, Twitter, el 5G o la Alianza para la Vacunación. Estas fueron algunas de las claves del discurso conspiranoico practicado en Twitter por el cantante para denunciar que el coronavirus es solo una excusa para controlar a la población mundial. Bosé desactivó después sus cuentas de Twitter, Facebook e Instagram alegando que coartaban su libertad de expresión.Twitter
Joaquin Phoenix – “Lamento mucho que Joaquin Phoenix no haya podido estar con nosotros esta noche”. Así despedía David Letterman al actor en su visita al late night en 2009, cuando mostró un aspecto desaliñado y una actitud esquiva, desconcertada y casi narcótica ante las preguntas del presentador. Su postura, que llegó a concitar la preocupación de la opinión pública respecto asu salud mental, no era más que un teatrillo para el fallido documental I’m still here, que pretendía mostrar su caída a los infiernos de Hollywood. El mismo Phoenix se disculpó ante Letterman un año después.Getty (CBS via Getty Images)
Michael Jackson – Febrero de 2002. A las puertas del hotel de lujo berlinés Adlon, cientos de fans y periodistas se agolpan para cazar algún movimiento del Rey del Pop. En una de las imágenes más controvertidas de este siglo, Jackson no solo sale al balcón a saludar sino que decide, cual Rafiki con Simba en El Rey León, presentar en sociedad a su hijo recién nacido Blanket, asomando al bebé por encima de la barandilla de la forma más imprudente posible.Getty (Getty Images)
Christian Bale – Hasta 37 insultos en solo cuatro minutos de furia desplegó el actor británico en el rodaje de la película Terminator Salvation en 2009. La bronca, dirigida a un director de fotografía que había osado distraerle durante el transcurso de una escena, fue grabada y difundida a través de Internet y empañó gravemente la imagen pública de quien era por entonces nada menos que el mismísimo Bruce Wayne, Batman.Getty (Getty Images for Turner)
Charlie Sheen – Aunque su pérdida de papeles se extendía ya durante varios años, Sheen tocó suelo en los primeros meses de 2011. El que por entonces era el actor mejor pagado de la televisión estadounidense, hasta un millón y medio de euros por cada capítulo de la sitcom Dos hombres y medio, acabó siendo despedido por la cadena debido a las acusaciones de maltrato a su esposa de por aquel entonces, fiestas con actrices porno, la destrucción de una habitación de hotel y continuos problemas con las drogas. El intérprete lleva más de cinco años defenestrado de Hollywood.Getty (Getty Images)
Zinedine Zidane – Por escenario y relevancia de su protagonista, el suyo es considerado el mayor colapso en la historia del deporte. Durante la final del Mundial 2006, el siempre impoluto futbolista francés se dejó llevar por sus instintos más primarios y propinó un cabezazo al defensa italiano Marco Materazzi, que le había insultado previamente. La agresión le costó a Zidane la expulsión y el campeonato, que terminó decantándose del lado transalpino. El francés pidió perdón, pero dijo “no arrepentirse” de lo sucedido.Getty (AFP via Getty Images)
Paulina Rubio – Errática, desaliñada, aturdida y demacrada. La intérprete de éxitos como Ni una sola palabra se convirtió en viral el pasado mes de abril por su intervención en la iniciativa solidaria One World Together At Home, que buscaba concienciar sobre la importancia del confinamiento. Las críticas se enseñaron de tal forma que Rubio incluso tildó el día como “uno de los peores de su vida”. Y no es la única diva latina en haberse mostrado más ‘eufórica’ de la cuenta en redes sociales: Thalía incluso monetizó su famoso ‘¿Me oyen, me escuchan?’.Getty (Getty Images)
Andrea Levy – Pocas veces una sesión de la Comisión de Cultura y Deporte del Ayuntamiento de Madrid ha acabado copando los titulares de la prensa nacional. Ocurrió el pasado 20 de octubre, después de que dos ediles –del PSOE y Más Madrid respectivamente– presentaran una queja formal al alcalde después de las descalificaciones vertidas por la concejala popular. “Me gusta el collar de arte precolombino que lleva. Lo único que le deseo es que no le haga un daño cervical por lo grande que es”, “¿Me va a decir el señor de Más Madrid cómo tengo que hacer mi intervención como delegada para defender a sus compañeros?” o “Usted dijo que me ponía cariñosa con un cantautor en el despacho” fueron algunas de las perlas de Levy que, en palabras de Martínez-Almeida, no estuvo a tono con el “debido decoro parlamentario”.Getty (WireImage)
Melendi – A veces un episodio traumático puede significar el principio de una transformación vital. Ese fue el caso del cantante asturiano en 2007, cuya actitud “agresiva y violenta” provocó un muy parodiado altercado en un avión con destino a México que se vio obligado a dar la vuelta. Una borrachera que, según declaró en El País, le cambió por completo: “Para mí aquello no fue negativo. A partir de entonces me cambió la vida, y empecé a pensar mucho más en hacia dónde quería ir y qué estaba haciendo mal”.Getty (Redferns)
Hugh Grant – “Un momento de locura”. Así denominó el actor británico el escándalo sexual que protagonizó en el verano de 1995 cuando fue detenido por la policía mientras una prostituta le practicaba una felación en pleno Sunset Boulevard de Los Ángeles. La detención supuso un batacazo tremendo a la imagen del intérprete, que acababa de llegar al estrellato internacional gracias a la comedia romántica Cuatro bodas y un funeral. Este no fue el último colapso de Grant: en 2007 confesó haber estado llorando durante tres semanas seguidas.
Amanda Bynes – La que fuera niña prodigio y estrella juvenil en películas como Un sueño para ella o Hairspray tuvo que ser ingresada a la fuerza en un hospital psiquiátrico en 2013, después de una serie de altercados (accidentes de tráfico, resistencia a la autoridad, destrozos en habitaciones de hoteles) que terminaron con la actriz provocando un pequeño incendio en un barrio californiano. Aunque no ha vuelto a ponerse delante de las cámaras, Bynes volvió a reaparecer en 2018 totalmente recuperada y sincerándose sobre el efecto devastador que las drogas tuvieron en ella. “Lo perdí todo”, manifestó.Getty (Getty Images)
César Vicente – “Los que vengan de after, por favor, que saluden”. Fueron tres vinos, según el propio actor conocido por películas como Dolor y gloria, los causantes de su polémico comportamiento en los premios 40 Music Awards en noviembre de 2019. Más allá de su aparente estado de embriaguez, siempre es buen momento para alabar el saber estar de su compañera en el escenario, Ester Expósito, que consiguió seguir adelante con la entrega de galardones a pesar de la ‘desorientación’ de Vicente.Los40
Maradona – El astro argentino tiene acostumbrados a sus seguidores a protagonizar de manera periódica episodios que ponen en jaque su imagen de leyenda del deporte. Uno de los más sonados tuvo lugar en el pasado Mundial de Rusia de 2018, durante el encuentro disputado entre Argentina y Nigeria, en el que exhibió un estado deplorable. Después de hacer la peineta a los aficionados durante el partido y mostrar una gesticulación digna de un exorcismo, Maradona tuvo que ser ayudado a abandonar las instalaciones porque era incapaz de mantenerse erguido.Getty (AFP via Getty Images)