Amaia Salamanca: «Lo cutre no es el pequeño Nicolás, sino los políticos que han robado millones»

Para no gustarle el protagonismo, se ha pasado casi toda su carrera copando papeles principales: Catalina en Sin tetas no hay paraíso, Letizia Ortiz en el telefilme sobre los actuales monarcas, Ángela en XP3D, Natalia en Fuga de cerebros… Ahora vive en un segundo plano. Amaia Salamanca interpreta a Bárbara, la mala de la serie Velvet (Antena 3). «Mi hija Olivia tiene meses. Así que es el momento ideal para hacer un papel secundario. Me relaja no ser el centro de atención», confiesa.

La madrileña (de 28 años), éxito seguro de las producciones españolas, sig...

Para no gustarle el protagonismo, se ha pasado casi toda su carrera copando papeles principales: Catalina en Sin tetas no hay paraíso, Letizia Ortiz en el telefilme sobre los actuales monarcas, Ángela en XP3D, Natalia en Fuga de cerebros… Ahora vive en un segundo plano. Amaia Salamanca interpreta a Bárbara, la mala de la serie Velvet (Antena 3). «Mi hija Olivia tiene meses. Así que es el momento ideal para hacer un papel secundario. Me relaja no ser el centro de atención», confiesa.

La madrileña (de 28 años), éxito seguro de las producciones españolas, sigue siendo una incógnita para las revistas del corazón. «No tengo redes sociales, no quiero informar sobre con quién estoy, dónde me encuentro o a dónde voy. Facebook e Instagram son herramientas poderosas en cuanto a promoción, pero roban intimidad. No compensan. Prefiero separar mi vida laboral de la personal», confiesa.

Ha llegado 10 minutos tarde a la sesión de fotos. «Suelo ser puntual, pero esta mañana no me ha dado tiempo ni a desayunar», admite mientras coloca en un plato dos pulgas del catering, saca el móvil y se dispone a hacerse un selfie. «Es para mi chico [el empresario Rosauro Varo]. Lo he dejado preocupado porque me he ido de casa sin comer».

Sortija de oro blanco con brillantes y rubí central de Chocrón.

Félix Valiente

A pesar de su reticencia a las plataformas sociales, no le hace ascos al móvil.

Lo uso lo imprescindible. Me molesta la adicción de la gente a los gadgets. A veces, cuando estoy con amigos, lo único que hacen es contestar mensajes. Y con respecto a Internet, es mucho mejor vivir en la ignorancia: estará lleno de fotos y comentarios sobre mí, pero ni me entero.

Eso, pese a su exposición. Es un rostro común en la tele; uno de sus papeles más comentados es el de la Reina. ¿Está a favor o en contra de la Monarquía?

Es un asunto espinoso… He coincidido con ellos y han sido atentos. Ella sobre todo; nunca hemos comentado mi interpretación.

Usted no habrá tenido que colarse en sus eventos como el pequeño Nicolás…

[Risas] No.

¿Qué opina sobre todo ese embrollo?

Se le ha dado demasiado bombo. Lo cutre no es que un chaval de 20 años estafe miles de euros a ricachones. Lo cutre es tener una clase política que ha robado millones de euros a los ciudadanos.

¿La maternidad ha cambiado su forma de pensar sobre estos asuntos?

Me ha obligado a poner más cabeza en todo, a ser mucho más razonable.

Suele apostar por la comodidad en la moda. Hoy viste jeans, camisa y botas de montaña.

En las series nos arreglan demasiado, por eso me gusta ir casual en mi día a día. Para los tacones ya está la ficción.

¿Le costó encontrar ropa de su estilo cuando estaba embarazada?

No compré casi nada. No me gusta el premamá que se vende en España, no es cool. Me las apañé con lo que tenía y me dejaban. No me arreglé casi, preferí quedarme en casa.

Pero no es muy casera. No es difícil coincidir con usted en un concierto.

No me aferro a un género, así que me es fácil sumarme a los planes de mis amigos. Tengo muchos y con gustos eclécticos.

Collar Tahití, con topacios y diamantes engastados en oro blanco, de Suárez.

Félix Valiente

Melómana y motera: recorrió la Ruta 66 en una Harley-Davidson.

En mi familia gustan las motos. Mi madre le regaló una a mi padre cuando él cumplió 50 años y yo le obsequié otra a mi hermano.

Otro destino que debe haberle marcado es Sri Lanka, donde ha rodado la campaña de Viaje a Ceylan, el aroma de Adolfo Domínguez.

Hacía años que soñaba con ir. Solo estuvimos una semana, pero fue una experiencia única. La gente era muy sonriente y se desvivía por ayudarnos.

¿Le gusta perfumarse?

El olfato es mi sentido favorito. Desde pequeña he ido coleccionando olores que ahora me retrotraen a mi infancia.

¿Sus aromas favoritos?

Las cremas solares, me recuerdan a las vacaciones. Y el asfalto mojado tras una tormenta de verano.

Hace deporte desde niña. Con 17 años, fue campeona de España júnior en 80 metros vallas.

Ahora voy al gimnasio y corro por el Retiro con el carrito de la niña. También me gusta jugar al fútbol y practicar surf de remo y jet-ski.

Tampoco le falta sabiduría cosmética, ¿algún truco?

Aplicarse crema con vitamina C por las mañanas, es un potente antioxidante. Y no saltarse ni el tónico ni el serum.