Así remasteriza Julien Dossena el legado de Paco Rabanne
El diseñador francés explica en exclusiva las claves de su versión (menos literal y más aplaudida) de la leyenda de Paco Rabanne.
La inspiración de la última colección de Paco Rabanne: «Esta colección gira en torno al concepto de viaje interior. Imaginen una mujer. Puede vivir en París. Y a la vez viajar con la mente. O abrir el armario y encontrar las memorias de unas vacaciones o un fin de semana en la campiña. Recuerdos de un viaje a la India, a Ibiza o, por qué no, al sur de Francia. La idea es jugar con todos esos elementos».
Una astucia para construir el look de la próxima p-v 2019: «Mezclar los souvenirs de una vida con los básicos del guardarropa. Un ejemplo: una cazadora ...
La inspiración de la última colección de Paco Rabanne: «Esta colección gira en torno al concepto de viaje interior. Imaginen una mujer. Puede vivir en París. Y a la vez viajar con la mente. O abrir el armario y encontrar las memorias de unas vacaciones o un fin de semana en la campiña. Recuerdos de un viaje a la India, a Ibiza o, por qué no, al sur de Francia. La idea es jugar con todos esos elementos».
Una astucia para construir el look de la próxima p-v 2019: «Mezclar los souvenirs de una vida con los básicos del guardarropa. Un ejemplo: una cazadora perfecto de cuero con un sari y, debajo, una camiseta diminuta. Esa es la silueta que me gusta. El objetivo es proponer formas distintas de combinar este tipo de prendas».
Las referencias del ‘moodboard’ de Julien Dossena: «Nada es literal. Las referencias se difuminan en un collage con imágenes de estilos y épocas distintas. Son ideas de aquí y de allí. A simple vista podría parecer que algunos de los diseños bebe del vestuario tradicional de la India, pero no es así. En realidad, está inspirado en un fular de los años 20, una década marcada por la fascinación por las civilizaciones de Oriente. A principios del siglo XX, Europa incorporó muchísimos elementos de culturas asiáticas al vocabulario estético de Occidente. Para esbozar esta colección no he tomado como referencia una cultura o un país concretos. Es más bien, un espíritu de bohemia global».
La malla metálica de la marca da forma ahora a estampados florales, se enriquece con cristales y crea superposiciones sutiles. La herencia y la leyenda de Paco siguen ahí, pero con una mirada contemporánea, más libre. ¿Cuáles son límites para interpretar el legado? «Es una visión menos literal, pero a la vez, si miras los archivos de la casa, comprobarás que Paco Rabanne siempre buscó inspiración en otras culturas y civilizaciones. Algunos de sus primeros vestidos recrean la estética de las joyas masái. Otros diseños beben de los bordados marroquíes. Es algo que se percibe en sus patrones. El viaje siempre estuvo presente en su universo».
¿Qué más dicen los archivos de Paco más allá de los estereotipos asociados a la era espacial de los 60? «Otro vínculo es la idea de un viaje místico. La existencia de fuerzas espirituales. De ahí la idea de incorporar medallas de oro de distintas religiones en esta colección. En determinados momentos de la historia en Occidente se ha promovido esa búsqueda de una espiritualidad. Sucedió por ejemplo en los 70».
¿En quién piensa? «Observo a mis amigas. Una viaja a la India para asistir a un retiro de joya; otra a Ibiza; otra a Normandía. Se trata de mezclar todos esos elementos de la vida real».
Paco Rabanne siempre ha sido sinónimo de modernidad. ¿Qué es moderno hoy? «Resulta muy difícil describir que es modernidad, pero todos intentamos encapsular ese concepto. Esta vez, me pareció moderno proponer una colección con cierto aire vintage. Como en los 70».
¿Cuál es, en su opinión, la silueta del siglo XXI? «No lo sé. Para mí, más que una silueta, este siglo habla de individuos. Es una mezcla personal. Podría ser un juego de superposiciones. No lo sé. Prefiero imaginar un abanico más amplio de posibilidades. Liberar a la gente de cualquier restricción».
¿Qué compra el consumidor real? «De todo. Y eso es lo más maravilloso, como negocio y como marca. En Paco Rabanne funciona muy bien la serie bodyline, sobre todo entre el público más joven. Ropa interior, tops cortos, ropa deportiva… Pero a la vez también hay un público que compra piezas de malla metálica más cercanas a la costura, que son más refinadas y también más caras. Cuando diseño productos, imagino un fondo de armario: un vestido ligero y fácil que puedes llevar de noche y de día; unos buenos jeans; una gabardina… La ligereza es clave».
Le gusta la ciencia ficción. Imagine… ¿Cómo vestiremos dentro de 40 años? «Quién sabe. Tal vez como en el siglo XX. La moda viene y va. Es un replanteamiento continuo. Después del posmodernismo siempre ha sido así. No hay una idea predeterminada del futuro. Vivimos el presente. Lo construimos día a día sin pensar de algún modo en ese mañana».