Empujones y codazos en París para conseguir la colección de Isabel Marant para H&M
Actrices, modelos y un millar de invitados se dieron cita anoche en el Tennis Club de la capital francesa para ver en primicia (y comprar antes que nadie) la colección que la francesa ha diseñado para la firma sueca.
Son las 22.30 horas y más de un centenar de personas se agolpa impacientemente en el Tennis Club de París. Apiñados en una cola que se ha convertido en un tapón humano, el grupo hace caso omiso al desfile de famosas que hay sobre la alfombra negra a la entrada del edificio. Poco importa que January Jones, Audrey Tautou, Freida Pinto, Olga Kurylenko o Elena Perminova estén al otro lado del edificio. Aquí, a lo que se ha venido, es a comprar. A comprar en primicia y antes que nadie la ...
Son las 22.30 horas y más de un centenar de personas se agolpa impacientemente en el Tennis Club de París. Apiñados en una cola que se ha convertido en un tapón humano, el grupo hace caso omiso al desfile de famosas que hay sobre la alfombra negra a la entrada del edificio. Poco importa que January Jones, Audrey Tautou, Freida Pinto, Olga Kurylenko o Elena Perminova estén al otro lado del edificio. Aquí, a lo que se ha venido, es a comprar. A comprar en primicia y antes que nadie la colección cápsula que Isabel Marant, esa diseñadora que ha hecho suyo el nuevo chic parisino, ha diseñado en exclusiva para H&M. Abrigos de corte masculino, básicos a combinar con pantalones de lentejuelas, pitillos de cuero muy rockeros, lanas de corte 'boho' o calzado con flecos y tachuelas. Poder hacerse con el ADN de la francesa, con ese desaliño elegante y sin esfuerzo, a bajo precio es una tentación de la que pocos quieren escapar.
Después de
January Jones.
H&M
Atendida por unos pacientes y solicitados dependientes que no dejaban de rellenar huecos vacíos, la locura reinó en el primer turno de compra de la colección (sí, se establecieron hasta seis turnos de para evitar colapsos de compradores) y solo en la primera media hora se agotó el número 36 de unas botas con flecos de la colección que aspiran a convertirse en el nuevo calzado estrella de la francesa (sus deportivas con cuñas, además de agotarse, han sido fusiladas hasta la saciedad).
Mientras que alguna que otra modelo apilaba prendas para llevarse a caja sentada en el suelo, al otro lado de la nave, Grandmaster Flash se rodeó en el escenario de parte de la Sugarhill Gang (Wonder Mike y Master Gee) para entonar éxitos que marcaron al hip hop de los 80 y 90. Sonó el mítico White Lines, mucho Put your hands up para animar a los 1500 invitados y se recordó a Michael Jackson durante el show. Porque la nostalgia era el leit motiv de la espectacular fiesta que la cadena sueca montó en la capital francesa. Lejos de tirar por estrellas del rock actual, el eventó apostó por revisitar el pasado. Ambientada en medio de un boulevar parisino a escala real (había hasta tienda de golosinas y frutería para los asistentes), el recinto acogió una roller disco con barra de bar en el centro y bola de discoteca gigante.
La oda a la juventud que Marant ofreció en el Tennis Club se oficializó con el show de un grupo de modelos adolescentes, vestidos con la colección, que bailaron e interpretaron escenas de enredo del despertar sexual juvenil (por algo sonaba de fondo otro hit de los 80 franceses: la banda sonora de la película La Boum). Modelos que después se sumaron a Marant en la pista de baile. La diseñadora lo dio todo bailando. Los asistentes, comprando su colección.
Freida Pinto
H&M
Audrey Tautou
H&M
Olga Kurylenko, con vestido de la colección.
H&M
Un grupo de modelos adolescentes hizo oficial el lanzamiento de la colección, que llegará a las tiendas el próximo 14 de noviembre.
H&M