¿Será 2017 el año de los chokers para hombres?
Las gargantillas masculinas abundan en la pasarela, Asos las comercializa a gran escala y hasta Harry Styles las luce en una portada. ¿Tendencia o moda pasajera?
Parece que todo lo que predice Alexa Chung no siempre va a misa. Casi un año después de que el icono británico declarase que “los chokers estaban muertos”, no solo no han desaparecido del armario femenino sino que empiezan a adentrarse –peligrosamente– en el masculino. El choker, que para los no iniciados cabe puntualizar que no es otra cosa que una ...
Parece que todo lo que predice Alexa Chung no siempre va a misa. Casi un año después de que el icono británico declarase que “los chokers estaban muertos”, no solo no han desaparecido del armario femenino sino que empiezan a adentrarse –peligrosamente– en el masculino. El choker, que para los no iniciados cabe puntualizar que no es otra cosa que una gargantilla pegada al cuello, ha sido el accesorio por excelencia en el año que acaba de terminar. Característicos de los noventa, firmas, celebrities e influencers volvieron a ponerlos de actualidad hasta convertirlos en plaga. Y parece que ahora le ha llegado el turno a ellos. Los chokers para hombres pretenden ser elemento imprescindible de la moda masculina durante 2017.
Estrellas del rock como Prince y Lenny Kravitz los han lucido durante décadas como una de sus señas de identidad, pero al ciudadano de a pie probablemente jamás se le haya pasado por la cabeza probar suerte con una gargantilla metalizada, de piel, cuero o terciopelo. Hasta que llegaron los diseñadores y sus propuestas para confirmar lo contrario. En las colecciones primavera-verano 2017, firmas como Louis Vuitton o Gucci se empeñaron en demostrar que el choker en su definición más estricta también era cosa de hombres. Otros como 3.1 Phillip Lim o Andrea Pompilio prefirieron adornar el cuello masculino con la clásica bandana. La confirmación de la propuesta no solo llega en las semanas de la moda que se están celebrando estos días (en la de Londres los maniquíes de Bobby Abley lucían collares bien ajustados al cuello) sino con la comercialización de diferentes modelos por parte de Asos.
El gigante del comercio electrónico ha incluido recientemente toda una variedad de chokers en su sección de accesorios para chico: de terciopelo negro, de colores, más anchos o más finos… las posibilidades son tantas como para tomarse en serio su propuesta. Tanto es así que su comercialización ha desatado una fuerte polémica en redes sociales (muchos de los seguidores de la firma critican la idea y otros la aplauden) y ha dividido a la prensa especializada entre los acérrimos defensores y quienes previenen a sus lectores antes de que se convierta en una moda real. Dejando a un lado el buen o mal gusto, el debate se inmiscuye también en asuntos más delicados como la identidad de género (aquí muchos siguen sin superar la falda ochentera de Miguel Bosé) o toda la estrategia de marketing detrás de vender un collar como masculino cuando podría considerarse un elemento unisex.
Probablemente la tendencia no será masiva en las calles, pero cuando cadenas como Asos democratizan las propuestas de la pasarela, hay que plantearse la pregunta: ¿Conseguirá el choker calar en los estilismos masculinos este 2017? De momento, si Gigi Hadid era una de las fieles seguidoras del choker, la estrella del pop Harry Styles es su homólogo masculino y ya ha protagonizado dos portadas para la revista Another Man tirando del accesorio. También el presentador norteamericano Matt Leuer ha sorprendido a todo el país al dejarse ver en directo con uno. Leuer, una suerte de Ana Rosa Quintana y presentador de uno de los programas matinales más seguidos, se desbotonó la pasada semana el cuello de la camisa para mostrar a todos los espectadores su gargantilla. “Los he llevado durante años”, aseguró, con cierto tono de sorna, después de hacerse eco del lanzamiento de chokers para hombres en la web de Asos.
Si tendencias impracticables como las camisetas crop top masculinas siguen volviendo temporada tras temporada (ídolos del deporte en la juventud americana como Russell Westbrook o Zeke Elliot los visten siempre), probablemente el choker siga intentándolo estas semanas de desfiles y las que están por venir. Otra cosa será ver esas tiras anchas de terciopelo en los hombres del mundo real aunque, como casi todo, puede solucionarse apostando por versiones discretas en el momento adecuado. Al fin y al cabo Ryan Atwood (Benjamin McKenzie) no se separó del suyo en The O.C. y a nadie le resultó extraño. Claro que aquello eran los 2.000 y no es necesario que vuelvan. Eso también va por vosotros, pantalones de campana.