CÉLIAvalverde: «Hay talleres en España que se niegan a trabajar con diseñadores jóvenes»
Katy Perry lució uno de sus vestidos en su último videoclip y Kendall Jenner es fan de sus gafas. Charlamos con la madrileña, una de las creadoras españolas con mayor proyección internacional.
En los últimos segundos del videoclip Never Really Over, Katy Perry aparece con un vestido estampado con flores amarillas y blancas. Detrás del diseño está la misma creadora española responsable de las gafas que no se quitó Kendall Jenner el verano pasado, del vestido negro con el que Amaia actuó en los Goya y de otras tantas prendas lucidas por Dua Lipa, Pamela Anderson o Rosalía. Con solo 28 años, CÉLIAvalverde se ha convertido en una de las diseñadoras patrias ...
En los últimos segundos del videoclip Never Really Over, Katy Perry aparece con un vestido estampado con flores amarillas y blancas. Detrás del diseño está la misma creadora española responsable de las gafas que no se quitó Kendall Jenner el verano pasado, del vestido negro con el que Amaia actuó en los Goya y de otras tantas prendas lucidas por Dua Lipa, Pamela Anderson o Rosalía. Con solo 28 años, CÉLIAvalverde se ha convertido en una de las diseñadoras patrias con más proyección internacional. «Vendemos mucho más en Asia, Los Ángeles o París que en España», cuenta a S Moda recién llegada de la capital francesa, donde ha estado presentando su trabajo a compradores internacionales.
Valverde, que heredó la pasión por la moda de su madre, modista de profesión y la otra mitad de la firma, tiene claro que su cliente está fuera de nuestras fronteras. De ahí que haya decidido abandonar la fórmula tradicional de los desfiles en la semana de la moda de Madrid y prefiera centrar sus esfuerzos en dar a conocer su trabajo a través de una herramienta mucho más barata y democrática: Instagram. Fue precisamente en la red social donde la estilista de Katy Perry la contactó para pedirle una de sus creaciones. «En España si los consumidores no ven que gente internacional lleva la marca no consideran que merezca la pena comprar. Por eso cuando celebrities como Katy Perry se han puesto nuestros diseños, los pedidos han aumentado bastante». En concreto tiene cinco encargos del minivestido que llevó la cantante, cuatro de ellos provenientes de Andalucía. Una cifra modesta pero considerable teniendo en cuenta que no se trata de una pieza low cost sino de un vestido de 240 euros. «Lo mismo ocurrió cuando Kendall Jenner se puso nuestras gafas el verano pasado. Fue muy curioso porque en aquella ocasión no nos contactaron ni se trató de un préstamo. Una de sus asistentes compró el modelo, en los tres colores disponibles, en nuestra tienda online y alucinamos porque nos empezaron a entrar un montón de pedidos tras su aparición», explica la joven creadora.
A pesar de que Valverde ya ha presentado ocho colecciones desde que lanzara la marca en 2014, reconoce que no es fácil para un diseñador joven hacerse un hueco en el panorama de la moda. «Aquí me siento valorada por la prensa, pero fuera me conocen por todo lo que hago, no solo porque Kendall Jenner se puso mis gafas», confiesa. Ese ‘todo’ engloba los vestidos de tul que tanta atención le han reportado, las creaciones oversize que redefinen el concepto clásico de ‘sexy’ o los zapatos y accesorios que idea y realiza desde cero (algo poco frecuente en las firmas pequeñas, que suelen crear los complementos en colaboración con marcas especializadas). Defensora del Made in Spain, apuesta por fabricar en Madrid con la ayuda de su madre y de dos costureras externas, pero reconoce que algunas prendas como las camisetas básicas tiene que hacerlas en Turquía porque en nuestro país los costes de producción son desorbitados. «Me he encontrado con talleres y proveedores que directamente se niegan a trabajar con diseñadores jóvenes», asegura. La ayuda institucional, las subvenciones y el apoyo también son insuficientes, según dice, para impulsar el trabajo de creadores como ella.
Lo más reconocible de la firma, intrínseco a su ADN, son los vestidos de tul, que tanto triunfan en las pasarelas internacionales de la mano de firmas como Valentino, Molly Goddard o Giambattista Valli y que ella lleva haciendo desde el principio. «A veces cuando diseñas te imaginas tejidos muy fantasía que después son difíciles de encontrar en las tiendas. Entonces me di cuenta de que el tul siempre iba a estar disponible y que además era fácil de encontrar y barato. Por eso decidí a empezar a trabajar con él», detalla. Amaia eligió uno de esos delicados diseños para actuar en la pasada edición de los Goya e incluso ha recibido pedidos de chicos que quieren atreverse con ellos.
La inspiración africana también está presente en lo que hace. Su madre, natural de Guinea Ecuatorial, es la responsable de esas referencias, además de encarnar el 50% de la firma. «Trabajar con mi madre es fácil porque me entiende y sabe lo que quiero con un dibujo o una simple llamada, pero donde hay confianza ya sabes… algún gritito también nos damos», confiesa entre risas. Como hija de africana, la pregunta sobre la apropiación cultural, que tantos debates genera últimamente en la industria, se hace inevitable: «Me parece muy fuerte que se patenten conceptos que pertenecen a ciertas comunidades o países, como ocurrió con Isabel Marant y la blusa basada en los diseños tradicionales realizados por las mujeres indígenas mexicanas. Pero cuando simplemente se trata de una inspiración o de la compra de un tejido en un viaje, no me parece apropiación cultural. Cada uno tiene libertad para inspirarse en lo que quiera», opina.
Mientras sueña con ver a Rihanna, Bianca Jagger y Lauryn Hill con alguno de sus diseños, CÉLIAvalverde adelanta que presentará su próxima colección en septiembre. Por supuesto, sin desfiles y con las fotos del lookbook y las redes sociales como herramientas para llegar a todo el mundo. «Los likes y los seguidores no tienen nada que ver con el éxito personal, lo importante es que la gente te conozca y que todo lo que hagas esté en Instagram porque muchos clientes lo consultan más a la hora de comprar que la página web», termina la diseñadora.