Cathy Horyn, la mujer desterrada de los desfiles

“Óscar de la Renta parece más un perrito cliente que una eminencia de la moda estadounidense”. Ésta es exactamente la frase con la que Cathy Horyn, crítica de moda del New York Times, desató el pasado mes de septiembre una guerra abierta que ahora ha salpicado incluso a Hedi Slimane y que en Nueva York se saldó con el calificativo “hamburguesa pasada de tres días” por parte de De la Renta.

El director creativo de Saint Lauren ...

“Óscar de la Renta parece más un perrito cliente que una eminencia de la moda estadounidense”. Ésta es exactamente la frase con la que Cathy Horyn, crítica de moda del New York Times, desató el pasado mes de septiembre una guerra abierta que ahora ha salpicado incluso a Hedi Slimane y que en Nueva York se saldó con el calificativo “hamburguesa pasada de tres días” por parte de De la Renta.

El director creativo de Saint Lauren utilizó su cuenta de Twitter (supera los 25.000 seguidores) para escribir lo que él denomina como “mi propio Times” y en el que define a la periodista como una persona que “hace `bullyin´en el patio del colegio” y sentencia: “Por lo que a mí respecta nunca conseguirá un asiento en Saint Laurent, aunque puede que consiga un 2 por 1 en Dior. Debería alegrarse. No me molestan las críticas, siempre y cuando provengan de un crítico de moda y no de un publicista encubierto” (la crítica a la colección de Raf Simons resultó ser más que favorable: “Dior, Balenciaga, Givenchy, Céline y Lanvin están teniendo una temporada muy buena”). Y como broche final a su escrito, el diseñador aprovecha para hacer publicidad de la nueva web de Saint Laurent (perdió el Yves hace unos meses por un antojo del creador) y anima a todo el que lo lea a visitar el renovado site.

Pero el motivo de este repentino ataque no es otro que la crítica publicada por Horyn sobre el debut de Slimane al frente de la maison francesa: “Las prendas parecen de una persona que ha estado desconectado de la moda durante unos años”. Y aunque Horyn siempre ha sido bastante guerrera (ha criticado desde el trabajo de Anna Wintour hasta la talla de Christina Hendricks) sí es cierto que la relación de la prensa con las firmas que desfilan en las semanas de la moda internacionales está cambiando notablemente. Parece que los halagos gratuitos ya no existe y los grandes popes de la prensa (Suzy Menkes o Colin McDowell) comienzan a mirar con lupa a los protagonistas de los atelier. ¿Llegará a España esta tendencia?