Carolina de Mónaco presume de canas en la ceremonia más importante del principado
La princesa acudió a la celebración del Día Nacional de Mónaco con un regio traje de chaqueta negro, guantes, diadema y orgullosa melena con pinceladas blancas.
Las canas empiezan a dejar de ser un tabú para las mujeres, que cada vez más las lucen en público sin remordimientos. Lo que nadie esperaba era que el grupo de celebridades que más esté defendiendo esta opción fuera el de las royals: Máxima de Holanda, Mette-Marit de Noruega, la duquesa de Cambridge Kate Middleton o incluso la reina Letizia se han dejado ver con destellos plateados en el pelo. No es baladí que personalidades con tanta influencia tomen esta decisión: según recoge el Instit...
Las canas empiezan a dejar de ser un tabú para las mujeres, que cada vez más las lucen en público sin remordimientos. Lo que nadie esperaba era que el grupo de celebridades que más esté defendiendo esta opción fuera el de las royals: Máxima de Holanda, Mette-Marit de Noruega, la duquesa de Cambridge Kate Middleton o incluso la reina Letizia se han dejado ver con destellos plateados en el pelo. No es baladí que personalidades con tanta influencia tomen esta decisión: según recoge el Instituto Médico Dermatológico, seis de cada diez mujeres se tiñen las canas frente a uno de cada diez hombres. Con el pelo blanco la sociedad dictaminó que ellas envejecen y ellos se vuelven más atractivos.
La última en enfrentarse al estigma ha sido Carolina de Mónaco, de 63 años, que ha asistido a la celebración del Día Nacional de Mónaco con sus canas al aire. Con un sobrio traje de chaqueta negro de Chanel alta costura, guantes altos y mascarilla con los colores de la bandera del principado, la princesa ha sorprendido por su elección capilar: una coqueta diadema ancha y su melena natural, sin teñir.
Daba así un paso más para derribar el estereotipo. Un giro estético que viene de cambios más profundos, como explicaba a esta revista en abril Luciano Cañete, cofundador de los salones Corta Cabeza de Madrid: “La vuelta a la naturalidad en todo (pero también en la belleza, donde ahora no se tapa nada sino que se realza lo natural) ha dado un giro de tuerca a esta tendencia y en ese volver a los básicos la cana femenina es motivo de celebración”.