Teñirse el pelo en casa: 7 pasos para que quede de peluquería
Ahora que el color rosa se quiere adueñar también de tu melena, te vendrá bien tener en cuenta estos trucos que nos han chivado los expertos.
Porque eres tan fiel seguidora de tendencias como para cambiar tu look siguiendo la última moda –esta temporada son los tonos tierra, teja, caramelo y vainilla– o porque ha llegado la peor y más dura parte del invierno y un cambio radical acabaría con un día a día monótono. Sea por la razón que sea, un nuevo color de pelo puede dar un giro divertido e inesperado a tu vida: «Estos cambios suponen una forma de romper con el pasado y sentirse renovadas, aportan un aire nuevo y dan seguridad a la hora de afrontar nuevas etapas y retos», cuenta Nadia Barrientos, directora del salón de belleza ...
Porque eres tan fiel seguidora de tendencias como para cambiar tu look siguiendo la última moda –esta temporada son los tonos tierra, teja, caramelo y vainilla– o porque ha llegado la peor y más dura parte del invierno y un cambio radical acabaría con un día a día monótono. Sea por la razón que sea, un nuevo color de pelo puede dar un giro divertido e inesperado a tu vida: «Estos cambios suponen una forma de romper con el pasado y sentirse renovadas, aportan un aire nuevo y dan seguridad a la hora de afrontar nuevas etapas y retos», cuenta Nadia Barrientos, directora del salón de belleza The Madroom. Y lo mejor es que hoy es más sencillo y asequible que nunca conseguirlo desde tu propia casa.
No nos malinterpretes: si lo que buscas es una melena sana y cuidada, bien teñida y, sobre todo, conseguir resultados profesionales sin correr riesgos, lo que debes hacer es acudir a un salón de belleza especializado y ponerte en manos de expertos que sepan tanto qué color te favorece como qué tipo de tinte o mechas necesitas. «Los productos de coloración de venta al público son muy genéricos y no aportan ese toque distintivo y personalizado que se consigue en la realización por un profesional», asegura Nadia. Sin embargo, ahora que estamos viviendo una auténtica revolución en el ámbito de la coloración capilar, las posibilidades se multiplican y, por tanto, las fórmulas y técnicas lo hacen también.
Hoy los tonos clásicos compiten con una enorme paleta cromática y llena de fantasía –las melenas rosas, violetas o multicolor, al estilo unicornio, son el último grito para las más atrevidas– que, muy probablemente, querrás probar de una forma esporádica y temporal. Así que sí: es el momento de aprovechar todos los avances estéticos y la alta tecnología en las fórmulas de coloración capilar, y atreverse a probar y “jugar” en casa. Pero siempre, siempre, siempre teniendo muy en cuenta estos 7 pasos fundamentales recomendados por los expertos:
1. Escoger el tipo de tinte
Repetimos: Si vas a hacerlo en casa y lo que quieres es probar nuevos colores y tendencias, los tintes semipermanentes y washout son tus aliados. Te servirán para cambiar el color de tu pelo durante solo unas semanas y se irán desvaneciendo con los lavados. «Si hay que realizar un cambio o arreglo de color es más fácil de eliminar o corregir para el profesional», explican en The Madroom. Una de las firmas punteras en este tipo de productos es L’Oréal Paris, que en la última temporada ha revolucionado el mercado de la coloración con su gama Colorista. Por un lado, cuentan con un wahsout, con textura de gel que dura entre dos y tres lavados y, por otro, con lo que llaman, literalmente, hair makeup. O sea, maquillaje para el cabello: se aplica en tan solo 10 minutos y se va en el primer lavado.
2. Elegir el tono adecuado
Lo primero que debes tener en cuenta si te decantas por los llamativos rosas o violetas de moda, es que tan solo funcionarán sobre cabellos rubios o previamente decolorados. Si tu caso es el segundo, lo mejor es que visites a un profesional antes de arriesgarte a estropear tu melena. Si tan solo quieres potenciar tu color, variar ligeramente tu tonalidad o crear unas favorecedoras mechas balayage u ombré, deberás elegir un color que sea, como máximo, dos tonos más claro u oscuro que el actual.
3. Antes de teñir, tener en cuenta:
– Que si lo que quieres es un cambio radical y vas a combinar el cambio de color con un buen corte, es mejor que lo hagas antes: ahorrarás en tinte y podrás crear el efecto deseado sobre la melena definitiva. Además, si tu cabello es natural y cortas mucho, aún podrás donarlo.
– Que lo ideal sería no haberte lavado el pelo en los dos días previos al proceso: así el tinte se fijará mejor e irritará menos tu cuero cabelludo.
– Que cuando el pelo está dañado, absorbe más y mejor el color: por eso siempre tus puntas tendrán un tono más fuerte y resistente, ya que son la parte del cabello que más sufre.
4. Cuando vayas a teñir, preparar:
– Toallas que puedan mancharse: tendrás que manipular objetos durante el proceso y necesitarás tenerlas a mano.
– Una camiseta que pueda estropearse: lo normal es que caigan restos de tinte sobre tus hombros… además, después tendrás que lavarte la cabeza y sacar la camiseta por el pelo recién tintado.
– Vaselina, para cubrir todo el contorno de tu cabello (también las orejas) y evitar que se coloreen.
– Guantes: mejor si son de cocina en lugar de los de plástico que vienen en las cajas de los tintes.
– Cronómetro: el tiempo de aplicación es importante.
– Brocha y recipiente para hacer la mezcla.
– Pinzas de pelo, para dividirlo en secciones a la hora de teñir.
5. Al teñir, comprobar:
– Que tienes a mano las instrucciones del tinte que hayas comprado. Síguelas al dedillo porque son fiables e indican tanto las precauciones que debes tomar como los tiempos necesarios para tu cabello o la forma de aplicar el tinte.
– Que es el tono que buscas: elige un mechón de la parte inferior de tu melena y aplica el tinte antes que en el resto del cabello. Sal a ver si te gusta el efecto bajo la luz natural antes de continuar.
– Que lo estás aplicando «intentando no manchar el cuero cabelludo», aconseja Nadia Barrientos.
– Que «masajeas bien para que no aparezcan diferentes tonalidades ni zonas sin teñir», advierten también desde The Madroom.
6. Lavar con agua fría
Al terminar, intenta en la medida de lo posible, lavarte la melena con agua tibia o fría. Su efecto sellará la cutícula y hará que el color se asiente y dure más.
7. Cuidar el pelo teñido
A partir de ahora, tu cabello exigirá un poco más de atención y cuidados. Utiliza champús y acondicionadores específicos para que el color no se transforme y aplica mascarilla una vez a la semana para hidratar. ¡Repite el proceso cuando sea necesario si el cambio te ha convencido!