Los 10 imprescindibles de la piel grasa
El exceso de sebo requiere cuidados y productos específicos. Los expertos nos explican qué cosméticos debemos elegir y cómo aplicarlos para combatir (con éxito) la piel grasa.
Poros dilatados, puntos negros, brillos y aspecto grasiento son algunos de los signos que manifiestan las pieles grasas. Existen diversas causas y factores que pueden provocar exceso de sebo en el rostro: desequilibrio hormonal, herencia genética, edad, clima, alimentación y estilo de vida, entre otros. Lo ideal para poner fin a este tipo de problema es desenmascarar la causa mediante un diagnóstico en profundidad y seguir un tratamiento específico.
A la hora de comprar cosméticos para este tipo de pieles, “es fundamental que no añadan más grasa. Un producto inadecuado puede ser muy per...
Poros dilatados, puntos negros, brillos y aspecto grasiento son algunos de los signos que manifiestan las pieles grasas. Existen diversas causas y factores que pueden provocar exceso de sebo en el rostro: desequilibrio hormonal, herencia genética, edad, clima, alimentación y estilo de vida, entre otros. Lo ideal para poner fin a este tipo de problema es desenmascarar la causa mediante un diagnóstico en profundidad y seguir un tratamiento específico.
A la hora de comprar cosméticos para este tipo de pieles, “es fundamental que no añadan más grasa. Un producto inadecuado puede ser muy perjudicial ya que además de empeorar el aspecto graso de forma inmediata, tapona los canales de salida de las glándulas sebáceas y empeora el problema de base”, explica la doctora Minia Campos, de la clínica Gonzalez y Campos y dermatóloga de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV).
Esta es nuestra lista de los mejores productos para esta tipología de piel:
1. Crema hidratante
Una vez derribado el mito de que las pieles grasas no necesitan hidratación es necesario elegir adecuadamente el producto hidratante para evitar que aporte más grasa. “Lo ideal es optar por cremas libres de aceites, sin embargo, el término oil free es difícil que se corresponda con la realidad ya que casi todas las cremas son emulsiones de aceite en agua o de agua en aceite. La excepción son las cremas de excipientes siliconados, que son recomendables. De igual modo, es importante elegir cremas que tengan menor proporción de aceite que de agua (lo que se denomina o/w)”, afirma la doctora Campos.
Una alternativa que funciona especialmente bien en este tipo de pieles son los sérums (concretamente los siliconados) o las ampollas. “Las pieles grasas no necesitan una hidratación constante. Basta con aplicar crema hidratante por la noche, que es cuando mejor se regenera la piel. Antes del maquillaje, lo más conveniente es utilizar un sérum regulador de la grasa”, explica la maquilladora profesional de Talents Naomi Gayoso.
‘Fluide Regulateur’ de Clarins y emulsión hidratante seborreguladora de Avène.
2. Limpieza
La limpieza es una de las rutinas más importantes para mantener la piel sana. Aunque nos desmaquillemos al final del día, es necesario volver a limpiarla en profundidad por la mañana para retirar el exceso de sebo que se produce durante la noche.
A la hora de elegir desmaquillante “queda prohibido el uso de bifásicos porque dejan una textura grasa. Respecto a las leches limpiadoras o los tónicos, a pesar de que existen algunos específicos, tampoco son lo más aconsejable”, comenta Gayoso. Tal y como explica la doctora Soledad Sáenz Guirado, especialista del Instituto Dermatológico de Granada y miembro de la Academia Española de Dermatología y Veneorología, las aguas micelares y los jabones con antiséptico, especialmente en pieles con tendencia acneica, son buenas opciones.
Gel limpiador de Kiehl’s, jabón en pastilla de Sebamed y agua micelar de La Roche-Posay.
3. Protector solar
No sirve con comprar cualquier fotoprotector indicado para el rostro ni mucho menos utilizar el del cuerpo. “Es muy importante elegir uno específico para evitar brillos y brotes acneicos”, explica la doctora Sáenz. Sin embargo, los protectores solares son un reto, ya que las moléculas fotoprotectoras son muy poco solubles en agua y necesitan un excipiente graso para poder disolverse. Hasta ahora, para poder disminuir el contenido de grasa era necesario disminuir el poder protector. En los últimos dos años ha habido un gran avance en las formulaciones, con los fotoprotectores de ‘toque seco’ y ‘fluidos’, que son mucho menos grasos.
Protector en gel ‘Dry Touch Color’ de Isdin y protección antribrillos ‘Anthelios XL’ de La Roche-Posay.
4. Exfoliante
Respecto a la exfoliación las opiniones son diversas. Mientras que unos expertos aconsejan utilizar cada dos o tres días una exfoliante facial suave, otros abogan por comenzar realizando una exfoliación semanal cuando se empiece un tratamiento contra el exceso de sebo e ir disminuyendo las sesiones a medida que mejore la situación de la piel. Al principio, deberá hacerse una vez a la semana, después cada quince días y, por último, podrá reducirse a una exfoliación mensual. En cualquier caso, es un paso fundamental para limpiar el cutis en profundidad y acabar con la suciedad que no se retira en la rutina de limpieza cotidiana.
Exfoliante ‘Dark Angels’ de Lush y ‘Dermo Purifyer’ de Eucerin.
5. Base de maquillaje
Los maquillajes más adecuados son los compactos porque no aportan tantos brillos. “A la hora de elegir uno es importante comprobar que sea ‘oil free’ y no comedogénico (es decir, que no obstruye los poros ni produce puntos negros)”, afirma la dermatóloga Saénz. Además, las expertas coinciden en la importancia de poner siempre polvos matificantes para sellar la base de maquillaje y eliminar el exceso de brillos gracias a su poder astringente.
‘Studio Fix Powder Plus Foundation’ de MAC y maquillaje compacto Couvrance de Avène.
6. Coloretes y sombras
Siempre conviene evitar las fórmulas grasas. Por tanto, es mejor prescindir tanto de los coloretes como de las sombras en crema y optar por los formatos en polvo.
7. Herramientas para aplicar el maquillaje
En este sentido, tener la piel grasa no influye en que sea mejor utilizar una brocha, una esponja o cualquier otra herramienta para aplicar el maquillaje. “Todo depende del efecto que se quiera lograr. Si se prefiere un acabado natural lo mejor es optar por una brocha mofeta. Sin embargo, es cierto que si la piel es muy grasa y absorbe muy rápido el producto puede ser preferible apostar por una esponja”, aconseja Gayoso.
En cualquier caso, lo más importante es una correcta limpieza de estos utensilios. Según explica la experta, deben lavarse siempre después de su uso para que no acumulen grasa, polvo o suciedad. Basta con ponerles un poco de jabón de manos y enjuagarlas bajo el grifo.
8. BB Cream
Según recoge la OCU, la formulación de la mayor parte de las BB Cream contiene distintos tipos de polvos a base de óxido de zinc, talco o silica. Este tipo de ingredientes son más adecuados para las pieles mixtas o grasas que para las secas. Aún así, es necesario apostar por las líneas específicas que diferentes marcas como Maybelline, Garnier o Vichy (entre otras) han lanzado al mercado pensando en las pieles grasas.
BB Cream de Garnier para pieles mixtas y grasas y ‘Dream Pure’ BB Cream de Maybelline.
9. Prebases
El primer o la prebase de maquillaje pueden tener diferentes funciones: aportar luminosidad, corregir el color de la piel, evitar la aparición de brillos… En el caso de la piel grasa, son interesantes especialmente estas últimas así como aquellas que ayudan a cerrar y camuflar los poros abiertos. Por ejemplo, thePOREfessional de Benefit o el serum corrector de poros de Clinique tienen esta función.
‘thePOREprofessional’ de Benefit y ‘Pore Refining Solutions’ de Clinique.
10. Otros cosméticos específicos
Existen productos especialmente creados para combatir la grasa en la piel. Por ejemplo, las toallitas o láminas antibrillos son una forma sencilla de ir retirando el exceso de grasa que va apareciendo a lo largo del día. Es recomendable pasarlas por el rostro para que absorban el sebo antes de utilizar polvos o realizar cualquier retoque en el maquillaje.
También la cosmética puede actuar desde el interior. Existen concentrados nutricionales que ayudan a regular las imperfecciones. Es el caso de ‘Imperfecciones D-tox’ de Innéov que favorece la regulación de los episodios de estrés internos del organismo y consigue reducir en más de un 40% los brillos, los poros dilatados y el tono apagado de la piel.
Toallitas antibrillos de Shisheido y concentrado nutricional ‘Imperfecciones D-Tox’ de Innéov.
Por último, es necesario aplicar correctamente todos estos productos. La doctora Campos recomienda seguir diferentes rutinas de cuidado según la época del año y el momento del día. “Durante el otoño y el invierno debe aplicarse por la mañana una limpiadora de piel grasa, una emulsión hidratante con protector solar 20-30 y opcionalmente maquillaje compacto y/o polvos matificantes. Por la noche, es necesario limpiar la piel y echar un gel o crema de tratamiento. En primavera y verano, debe utilizarse una limpiadora específica, una emulsión hidratante sin protección solar, un protector solar 30-50+ adecuado para piel grasa y opcionalmente el maquillaje. En este caso, la rutina nocturna sería la misma que otoño”, afirma la especialista.