Liftera: la tecnología de ultrasonido que está cambiando la idea que teníamos del ‘lifting’
HIFU de Liftera abre un nuevo capítulo en la medicina estética con un revolucionario tratamiento, indoloro y no invasivo, que estimula las funciones naturales de la piel y recupera su firmeza y elasticidad.
La ciencia también ha cambiado el mundo de la belleza, democratizando y simplificando tratamientos que antes eran sinónimo de complejas intervenciones quirúrgicas y postoperatorios. «Utilizando la tecnología de ultrasonido focalizado de alta intensidad podemos ayudar a mejorar la apariencia de la piel dañada, proporcionando un aspecto más juvenil y revitalizado», defiende el doctor Klain, experto en medicina estética y regenerativa, acerca de uno de los nuevos procedimientos lifting más innovadores y celebrados por los profesionales: HIFU de Liftera.
Desarrollado por la marca Asterasys, este dispositivo ha sido creado para combatir el envejecimiento cutáneo y recuperar la firmeza y elasticidad de la piel, de forma indolora y, sobre todo, natural. Porque Liftera, a diferencia de los tratamientos que simplemente tratan de corregir o suplir las carencias de la piel, lo que busca es potenciar sus funciones naturales. «La tecnología HIFU actúa calentando de manera controlada y precisa las capas más profundas de la piel con ondas ultrasonido de alta intensidad. Este proceso estimula la producción de colágeno y promueve la regeneración: reduciendo arrugas, mejorando la firmeza de la piel y otorgando un aspecto más joven y revitalizado», apunta el Dr. Klain, que recomienda utilizarlo tanto a nivel preventivo, en especial durante los meses del verano, como método regenerativo, después de las vacaciones de verano.
La razón es que el colágeno no es un simple ingrediente cosmético, sino el secreto de una piel joven y firme. Es lógico que la capacidad del cuerpo para sintetizarlo disminuya con la edad, sin embargo, la exposición solar puede incluso provocar que se descomponga más rápido, dificultando su reemplazo. «El daño solar causa el deterioro del colágeno y la elastina en la piel, lo que resulta en arrugas, flacidez y una textura irregular», puntualiza el experto, algo especialmente difícil de combatir cuando se trata del rostro y la particularidad de cada zona.
Es por esto que otro de los puntos fuertes de Liftera es su precisión. Cuenta con dos cabezales diferentes, un cartucho en línea y un lápiz de colágeno, patentado por la propia marca. «Permite un contacto mínimo con la superficie de la piel, lo que facilita la aplicación y la adaptabilidad a diferentes contornos y perfiles del rostro de cada paciente», explica la directora de Asterasys Iberia, Marilia Lima, que destaca la comodidad y efectividad del proceso como la razón de su popularidad.
Aunque se realiza en un consultorio médico, se trata de un tratamiento no invasivo y muy fácil de aplicar, sin anestesia, inyectables o dolorosas cirugías. Tampoco requiere de un proceso de recuperación: los cambios se empiezan a notar de forma inmediata –sin rojeces ni moratones–, aunque se irán revelando poco a poco, tras unas semanas. Porque Liftera, sobre todo, es el ejemplo de que la tecnología también puede ser un aliado para recuperar y prolongar la belleza natural de la piel.