¿Sufres rozaduras en los muslos? Hemos encontrado y probado la solución

Caminar «es vivir el cuerpo», como dice el antropólogo francés David Le Breton, y no hay mayor invitación para hacerlo que el verano. La fricción que se produce al andar, sin embargo, puede convertir ese idílico paseo estival en un infierno personal. No se trata de una cuestión de piel sensible o, como se ha creído durante mucho tiempo, un problema de obesidad. Los cambios de temperatura, la exposición al sol, nuestra propia fisionomía o los tejidos de nuestra ropa pueden provocar esas molestas rozaduras.

Las causas, quienes padecemos este molesto problema, las conocemos muy bien. Al igual que todos los posibles remedios para ponerle fin, o al menos, aliviarlo. ¿Vaselina y polvos de talco? Hecho. La sensación pegajosa no es algo que se olvide fácilmente. ¿Ligas especiales para evitar el roce de los muslos? Por supuesto, descansan al lado de un neceser repleto de cremas en todo tipo de formatos.

Porque encontrar el cosmético definitivo es una búsqueda incesante y agotadora. Así llegó a mis manos Skin Contact Spray de Smoovall. Desde la marca holandesa aseguran que es el resultado de probar todo tipo de soluciones, sin llegar a ninguna que les convenciera. «Así que desarrollamos el primer spray del mundo contra las rozaduras, de larga duración y sin complicaciones», apunta la nota que acompaña al producto. Punto positivo por empatía.

Lo primero que llama la atención de Skin Contact de Smoovall es su textura ligera y absorbente. Al aplicarlo, el producto se posa sobre el cuerpo como una agradable bruma. De hecho, tiene un aroma fresco y familiar, el mismo que asocias instintivamente a los días de verano. En cuestión de segundos desaparece, como una película invisible, dejando la piel totalmente suave y seca. Perfecto. Porque no queremos aumentar la humedad de la piel que, como señalan los dermatólogos, es precisamente una de las causas de la sensibilidad e irritación de la piel.

El ritual de aplicación es tan sencillo que es posible que nos surja la duda de si lo hemos hecho bien. Pero Smoovall viene incluso con manual de instrucciones: basta con agitar ligeramente el producto, vaporizarlo sobre esas zonas conflictivas que queremos proteger y en cuestión de segundos no quedará ni rastro. Gracias a su tecnología Dry & Active, Smoovall Skin Contact Spray está formulado a prueba de impacientes. No tengo ni que ensuciarme las manos. Frente a los remedios engorrosos y un tanto grasos del pasado, esta fórmula en spray no hay que extenderla. Tampoco tengo que esperar para vestirme y, no, tampoco deja manchas blancas o grasas en la ropa. Si el verano pide prendas ligeras y vaporosas, ¿por qué no le exigimos lo mismo a la cosmética?

La prueba de oro llegaría en uno de estos días de vacaciones que, sin saber cómo, se acaban complicando más que los de diario: de casa a la compra, de la playa a la terraza… ¿El veredicto? Ni roces, ni molestias, ni rojeces. Aunque la marca recomienda repetir la acción cada cuatro o cinco horas –el formato de Smoovall es perfecto para llevar siempre encima–, es fácil olvidarse totalmente del tema. Supongo que porque solo nos acordamos de algo cuando molesta.

Para comprobar personalmente los beneficios de Smoovall, en estos momentos solo está disponible online en su página web.