Este accesorio de pelo hace que llevar mascarilla a diario sea mucho más cómodo

En un par de semanas la mascarilla se ha convertido en un elemento más del paisaje. Hemos aprendido mucho de ella en muy poco tiempo, desde que el pasado 21 de mayo fuera declarada elemento obligatorio en espacios cerrados de uso público y en la calle (cuando no sea posible mantener los dos metros de distancia): sobre las diferencias entre una higiénica y una quirúrgica, sobre cómo ponérselas o ...

En un par de semanas la mascarilla se ha convertido en un elemento más del paisaje. Hemos aprendido mucho de ella en muy poco tiempo, desde que el pasado 21 de mayo fuera declarada elemento obligatorio en espacios cerrados de uso público y en la calle (cuando no sea posible mantener los dos metros de distancia): sobre las diferencias entre una higiénica y una quirúrgica, sobre cómo ponérselas o cómo lavar los modelos reutilizables. También que necesariamente se convertirán en un accesorio más, al menos durante unos meses, en esta nueva realidad.

Sobre lo difícil que puede resultar llevarlas varias horas seguidas estamos asimilándolo sobre la marcha, a golpe de rozaduras. Al agobio y a la sensación de asfixia(incrementadas por las altas temperaturas) se suma la incomodidad que puede generar este elemento protector, especialmente detrás de las orejas. Un mal que se multiplica por dos para los sufridores usuarios de gafas y para los que tienen que utilizarla durante toda su jornada laboral. Por ello la red se está plagando de ideas y trucos sencillos para hacer que su uso sea más confortable. Uno de los más vistosos es el que ha compartido con sus 174.000 seguidores en Instagram la peluquera de Florida Olivia Smalley: “Truco de mascarilla. ¿Dolor de orejas? Coge un clip para sujetar por detrás la mascarilla. Y no menciono que queda muy mono”, escribe junto a un par de vídeos en los que demuestra cómo hacerlo. Ella utiliza una pinza de clip plagada de perlas que coloca sobre una trenza de raíz; así sostiene las gomas sin que estas se apoyen en las orejas. Una simple argucia que puede ayudar también a que la mascarilla se ajuste más a la cara.