Lo último de Chanel exprime dos de las banderas de la casa: los números y las camelias
La firma lanza Nº1, una línea que abarca todo el ritual de belleza y que se basa en las notables propiedades de la camelia roja.
La historia ya es leyenda: cuando hace un siglo a Gabrielle Chanel el perfumista Ernest Beaux le enseñó varias muestras de perfume, ella escogió la quinta; aquella creación, cargada de aldehídos, rosa y jazmín, acabó convirtiéndose en uno de los perfumes más famosos. “Presentaré mi colección de cinco vestidos el 5 de mayo. Por lo tanto, lo llamaremos como el número que lleva y el número cinco le traerá sue...
La historia ya es leyenda: cuando hace un siglo a Gabrielle Chanel el perfumista Ernest Beaux le enseñó varias muestras de perfume, ella escogió la quinta; aquella creación, cargada de aldehídos, rosa y jazmín, acabó convirtiéndose en uno de los perfumes más famosos. “Presentaré mi colección de cinco vestidos el 5 de mayo. Por lo tanto, lo llamaremos como el número que lleva y el número cinco le traerá suerte”, dicen que sentenció la supersticiosa creadora. Los números tuvieron mucha importancia para ella. El 19, día de su cumpleaños, bautizó a otro de sus aromas, así como el 31, el número de su taller en la célebre rue Cambon. Pero ni la creadora ni después la firma habían recurrido a un bombazo con las posibilidades del Nº1. Hasta ahora.
El lanzamiento es una línea completa que por primera vez incluye limpiador, loción, bruma, sérum, crema y contorno, pero también base de maquillaje, un bálsamo con color para labios y mejillas y una fragancia. Todos basan su formulación en las propiedades de la camelia, una flor insignia para la maison y fruto de sus investigaciones desde 1998. Aquel año la enseña abrió un laboratorio al suroeste de Francia, en el pueblo de Gaujacq, en el que cultiva 2.000 variedades de camelias para examinar sus propiedades.
Resistente pese a su apariencia delicada, esta flor invernal aún hoy intriga a los científicos, que buscan comprender por qué ni el frío ni el agua afectan a sus pétalos perfectos. El último hallazgo y base de Nº1 se ha descubierto en una camelia roja, El Zar, variedad de la Camellia japonica. En sus pétalos han encontrado una alta concentración de ácido protocatéquico, del que diversos estudios reportan su potencial actividad antioxidante. “Tras casi diez años de experimentos en colaboración con investigadores del departamento de biotecnología y envejecimiento de la Universidad de Recursos Naturales y Ciencias de la Vida de Viena”, explican desde la marca, “revelamos un mecanismo clave involucrado en la vitalidad celular, senescencia. Es un campo científico particularmente prometedor que proporciona perspectivas nunca antes vistas para abordar los signos del envejecimiento en la piel”. El daño causado tanto por factores externos como internos se acumula en las células y acelera la entrada de estas en senescencia, “dejan de dividirse, pero no son eliminadas y pueden representar hasta el 50% del total de células de la piel. Interrumpen el buen funcionamiento de otras células que sí están activas”. El extracto de camelia roja ha demostrado apoyar la vitalidad de la piel, para mantenerla saludable por un periodo de tiempo más prolongado.
La nueva gama, que se presenta en envases más sostenibles que nunca, ya está disponible en la página web de la marca y llegará a las tiendas el próximo 15 de enero.