Blanca Suárez: «Mi vida es impredecible, como el mar»
La actriz crea para el labial súperventas Rouge G de Guerlain una carcasa de edición limitada inspirada en el arte japonés y el océano.
A Blanca Suárez la conocemos como actriz, gracias a sus éxitos en producciones como Perdiendo el norte o Las chicas del cable. El pasado mayo, nos descolocó con su participación en la canción Luna Llena de Álvaro Tessa. Sí, Blanca también sabe cantar. Ahora vuelve a sorprendernos, con una faceta inesperada: también diseña. «Siempre me ha gustado inventar y crear, las manualidades… Incluso estudié dibujo un tiempo», cuenta la intérprete a S Moda. «Dice mi madre que de pequeña me preguntó qué quería...
A Blanca Suárez la conocemos como actriz, gracias a sus éxitos en producciones como Perdiendo el norte o Las chicas del cable. El pasado mayo, nos descolocó con su participación en la canción Luna Llena de Álvaro Tessa. Sí, Blanca también sabe cantar. Ahora vuelve a sorprendernos, con una faceta inesperada: también diseña. «Siempre me ha gustado inventar y crear, las manualidades… Incluso estudié dibujo un tiempo», cuenta la intérprete a S Moda. «Dice mi madre que de pequeña me preguntó qué quería ser de mayor. Yo apenas sabía hablar, pero me asegura que adivinó que le respondí pintora».
Su aptitud la demuestra con una carcasa de edición limitada que ha creado para el labial Rouge G de Guerlain. Cuando se reeditó el año pasado, el pintalabios se convirtió rápidamente en carne de Instagram, inundando los feed de influencers, profesionales y espacios multimarca. ¿El secreto para triunfar? Su abanico de carcasas, vendidas por separado, que permitía a la usuaria elegir la que más se adaptase a su gusto, con diferentes colores y formas, todas con un espejo incorporado para retocar los labios en cualquier momento y lugar con total seguridad.
Avalado por su éxito en España, la casa francesa ha querido ir un paso más lejos y ofrecer a sus fans esta edición especial. La propuesta, al principio, abrumó a la actriz. «El hecho de que todo tenga que pasar y aprobarse por París me hacía pensar que me tirarían por el camino. Pero gustó y funcionó». Blanca, que ha trabajado durante 11 meses en el proyecto, confiesa que desde la firma no le dieron ninguna pauta. «Es lo peor que pueden hacer, tuvimos que ir acotando las ideas, ser realistas con los medios que teníamos, porque yo quería hacer cosas muy locas». Al final, después de decenas de bocetos y pruebas y error, llegaron a la carcasa Nami, ola en japonés. Ya a la venta hasta agotar existencias, evoca esas olas del nombre con sus líneas finas y color azul celeste.
La idea de inspirarse en Japón la propuso desde el principio Blanca, enamorada de la cultura y la filosofía de vida del país. «Todo nace desde la naturaleza y de unas creencias muy enfocadas en la energía. Es tan antigua y rica que tienen los sentidos más disparados que otras». El diseño nipón sirvió como guía para la obra, con la que buscaba el movimiento. «Me llaman la atención las formas, porque transmiten, inexplicablemente, muchísimo movimiento, una fuerza constante e incesante. Con eso en mente, dudaba entre dibujar olas o humo».
El agua se impuso al fuego, y con La gran ola de Kanagawa de Katsushika Hokusai como referencia, Blanca se puso manos a la obra. La razón: quería algo no solo atractivo, sino que tuviese una historia detrás. «El mar es evocador, me relaja mucho y recurro a él para desconectar, prefiero ir a la costa que a la montaña», nos confía la actriz. «Con solo escucharlo, mirarlo y olerlo, renueva mis energías. Su constante movimiento, además, es un reflejo lo que vivo desde hace años. Todo va y viene, nunca sé qué va a pasar dentro de un minuto o mañana, imagina en un año. Mi vida es impredecible, como el mar».
En el calendario de Blanca, pese a lo imprevisible de su trabajo, sí que hay algunos eventos marcados. Entre ellos, el estreno durante el segundo semestre de 2020 de la película El verano que vivimos, de Carlos Sedes (El club de los incomprendidos, Velvet). «Contada en dos tiempos, los años 90 y 1958, sigue la investigación de una periodista que tira del hilo de una historia de amor y traiciones». También el rodaje de la sexta temporada de Las chicas del cable, de la que aún no se ha estrenado la quinta. «Estamos empezando con pruebas de pelucas y vestuario», desvela.
En el futuro, pese a su apretada agenda, no descarta volver a diseñar. Y si puede ser de nuevo con Guerlain, mejor. «Me encantaría que accedieran a hacer algo más atrevido».