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Dime qué edad tienes y te diré qué crema debes comprarte: hablan los dermatólogos

El órgano más grande del cuerpo cambia con el paso del tiempo. Cada momento requiere un cuidado diferente. Tres expertos nos lo explican.

07 oct 2019 - 01:59CEST

Aunque la calidad de la piel depende de muchos factores, como la genética, el cutis suele presentar necesidades similares en diferentes rangos de edad. Tres dermatólogos nos guían por las más comunes. A partir de los 20 "En este grupo etario, con el colágeno a reventar, sin manchas, sin arrugas y con la turgencia plena, lo único que necesitamos es agua, sueño y protección solar". Así de tajante se muestra el doctor Leo Cerrud, con clínica homónima en Madrid. En el caso de presentar algún problema, este se suele relacionar con el acné o sus cicatrices. Para estos casos, la doctora Elia Roó, miembro de la Academia Española de Dermatología y Venereología, recomienda limpiar con los llamados jabones sin jabón o con aguas micelares. "Deben evitar las lociones hidratantes o las toallitas limpiadoras que contienen más aceites". Sus hidratantes deben ser también oil-free, y necesitan aplicarse protección solar con factor 30 o 50 libre de grasa. "Por la noche, lo ideal es utilizar fórmulas en gel o emulsiones ligeras que contengan alfahidroxiácidos, ácido salicílico o ácido retinoico para regular la producción de grasa y controlar el acné y las cicatrices". En caso de querer un boost de luminosidad, las clínicas ofrecen tratamientos con efecto flash que mejoran la piel gracias a vitaminas, ácido hialurónico u oligoelementos, como Luminosity del doctor Cerrud (150 € la sesión). Para los granos y sus secuelas, lo mejor son los peelings superficiales de alfahidroxiácidos (glicólico) o de ácido salicílico, la terapia fotolumínica y el láser.

A partir de los 30 A esta edad, se empieza a perder luminosidad y aparecen las primeras arrugas de expresión alrededor de los ojos. Para que la piel recupere su tono, Roó recomienda la aplicación de antioxidantes. “Especialmente la vitamina C, los péptidos y poli-hidroxiácidos. Pueden aplicarse en forma de crema, emulsión o gel, según el tipo de piel”. Si se desean resultados más potentes, los sérums y ampollas poseen una mayor concentración de activos. “Si se opta por ellos, se pueden combinar luego con una crema con ácido hialurónico”, añade Roó. La doctora Paloma Borregón, también de la AEDV, apuesta también por comenzar a incluir el retinol en la rutina nocturna. Y, por supuesto, fotoprotección de 30 para arriba (que no repetiremos, pero los expertos la consideran la mejor crema antiedad y se debe aplicar todos los días a cualquier edad). En cabina, se mantendrían los mismos tratamientos que en la franja de edad anterior. Borregón, para quien no quiera arrugas, considera el bótox como opción.

A partir de los 40 En este momento, como bien señala la doctora Roó, se acentúan las arrugas de expresión, especialmente alrededor de los ojos (las llamadas “patas de gallo”), las arrugas del entrecejo y las de la frente. “Debemos subir la concentración de retinol (hasta el 1%) o aplicarlo cada noche sin falta”, advierte Borregón. A los activos mencionados antes, se añadirían otros como el ácido telúrico, la niacinamida o el dexpantenol. En consulta, la toxina botulínica se perfila como el mejor aliado contra las arrugas, y los rellenos de ácido hialurónico e hidroxiapatita cálcica revierten la pérdida de volumen. Roó incluye “luz pulsada intensa para unificar el tono y radiofrecuencia para prevenir la flacidez”.

A partir de los 50 Las hormonas entran en juego en cuanto a la salud de la piel se refiere. “Con la menopausia, se producen cambios profundos en la piel debido a la atrofia de la epidermis, la dermis y la hipodermis, que se traducen en una disminución del grosor, un incremento en el número y profundidad de las arrugas, mayor sequedad, flacidez y aparición de manchas”, destaca Roó. A todos los activos anteriores (humectantes y emolientes con polifenoles, antioxidantes, péptidos), que se deben utilizar a diario e incluso buscar cremas con mayor dosis de los mismos, se pueden añadir sustancias despigmentantes en caso de manchas: arbutina, ácido Kójico… En cabina, como antes, peelings superficiales, bótox, ácido hialurónico, luz pulsada, láser o hilos tensores, siempre en función de las necesidades particulares.

A partir de los 60 “Hay que seguir con las mismas rutinas e intentar usar el retinol potente todas las noches”, considera Paloma Borregón. A los 70, la piel se vuelve más quebradiza, un proceso que comienza tras la menopausia. Borregón lo explica: “Se hacen heridas y hematomas por la fragilidad, así que debemos cuidar especialmente nuestra piel con cremas muy hidratantes a diario”. Si nunca han pasado por cabina, ésta será la mejor manera de revertir los signos de la edad. “Con la medicina estética llegamos a sitios donde la cosmética no llega”, aclara el doctor Cerrud. “Eso sí, es imperativo individualizar cada piel para personalizar cada tratamiento”.