Anna Castillo: «Las ficciones de ahora hablan sobre el abuso, la violación o los límites del poder»
Con cuatro proyectos pendientes de estreno, la ganadora de un Goya reflexiona sobre los cambios que atraviesa una industria en la que ha mutado de intérprete prometedora a uno de los rostros más reconocibles y solicitados.
Anna Castillo apenas reconoce la industria en la que dio sus primeros pasos siendo una adolescente. “Nos estamos atreviendo a contar cosas que antes no. Las ficciones de ahora hablan sobre el abuso, la violación o los límites del poder. Y no solo ha cambiado lo que se cuenta, sino también cómo”, expone. A sus 27 años, esta barcelonesa que ganó el Goya a mejor actriz revelación en 2017 por El olivo, de Icíar Bollaín, achaca en buena parte esa transformación al aterrizaje de las plataformas digitales. “Ya no hay barreras entre cine y televisión porque la calidad es muy alta en todas par...
Anna Castillo apenas reconoce la industria en la que dio sus primeros pasos siendo una adolescente. “Nos estamos atreviendo a contar cosas que antes no. Las ficciones de ahora hablan sobre el abuso, la violación o los límites del poder. Y no solo ha cambiado lo que se cuenta, sino también cómo”, expone. A sus 27 años, esta barcelonesa que ganó el Goya a mejor actriz revelación en 2017 por El olivo, de Icíar Bollaín, achaca en buena parte esa transformación al aterrizaje de las plataformas digitales. “Ya no hay barreras entre cine y televisión porque la calidad es muy alta en todas partes”.
Para ella nunca las hubo. Actriz prolífica donde las haya, no solo salta de la comedia al drama con una naturalidad y frescura que ya ha convertido en seña de la casa, sino que lo mismo congrega a la familia en una sobremesa televisiva incombustible (Amar es para siempre) que llena el patio de butacas cantando y bailando (La llamada) o erigiéndose en la musa de los realizadores más prometedores del panorama cinematográfico nacional, como Celia Rico Clavellino o David Martín de los Santos. Y también ha sabido apoyarse en esas plataformas (Arde Madrid o Paquita Salas) para mutar de intérprete prometedora a uno de los rostros más reconocibles y solicitados.
Con cuatro proyectos pendientes de estreno, su futuro se presupone tan agitado como el del resto del sector. “Tengo la sensación de que van a pasar muchas cosas. Hemos aprendido que detrás de la cámara hay comportamientos que no se pueden perpetuar y me gustaría que siguiéramos avanzando. Que hubiera igualdad de oportunidades para mujeres cineastas, guionistas, productoras…”, reclama. A nivel particular, planea poner su granito de arena: “Me gustaría probar a dirigir. Aún no sé que contaré, pero hay algo en mí que quiero compartir desde un lugar más personal”.
* Estilista: Beatriz Moreno de la Cova. Maquillaje y Peluquería: Carmen de Juan (Another Agency) para Chanel y Shu Uemura. Asistente de fotografía: Sergio Gosalbez. Asistentes de estilismo: Diego Serna.
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