2023, el año en que las joyas de plata destronaron al oro amarillo
Más barato y según los expertos en tendencias con un acabado mucho más moderno, el hermano humilde del oro triunfa en marcas grandes y pequeñas.
Existe una regla básica (no escrita) en el manual de uso de la joyería que dice que nunca se deben mezclar los materiales de base: es decir, que oro y plata deben ir por separado creando un estilismo completo en ese color, y no combinados ni mezclados. Jackie Kennedy, por ejemplo, combinaba sus brazaletes, anillos y collares en los mismos tonos y gemas allá por los cincuenta, y lo mismo hacía Cher en las alfombras rojas con sus enormes joyas en los setenta y ochenta. Apostar por un solo material, principalmente el oro, ha sido durante mucho tiempo una constante. Sin embargo, después de unos añ...
Existe una regla básica (no escrita) en el manual de uso de la joyería que dice que nunca se deben mezclar los materiales de base: es decir, que oro y plata deben ir por separado creando un estilismo completo en ese color, y no combinados ni mezclados. Jackie Kennedy, por ejemplo, combinaba sus brazaletes, anillos y collares en los mismos tonos y gemas allá por los cincuenta, y lo mismo hacía Cher en las alfombras rojas con sus enormes joyas en los setenta y ochenta. Apostar por un solo material, principalmente el oro, ha sido durante mucho tiempo una constante. Sin embargo, después de unos años en que el oro amarillo no ha tenido rival en joyas, 2023 parece ser el año que puso en cuestión (y en valor) la plata y todas sus combinaciones con otros metales.
La tendencia es evidente visto el uso de firmas y diseñadores. La tonalidad plata es un tema recurrente en la moda, desde la ropa de las colecciones de primavera de Gucci, Versace y Chanel hasta la joyería de Alexander McQueen, con llamativos anillos plateados. Exactamente igual sucede en la temporada de otoño-invierno: piedras plateadas adornaban los guantes de tul negro en el desfile de Rodarte, y cinturones en este tono, colocados en la cadera, remataban los estilismos de Dion Lee, quien también colocó anillos y ojales plateados. En esta misma temporada los pendientes colgantes de plata ondulados ocuparon un lugar central para Laquan Smith y Ulla Johnson propuso en pasarela una serie de anillos plata. Más aún: Bottega Veneta, la firma italiana que abandera los accesorios superventas de los últimos años, ha lanzado unos aretes enormes de plata que ya ha llevado una celebridad con tanta visibilidad como Kylie Jenner. Las pulseras de plata también han aparecido en los desfiles de Prabal Gurung y Tory Burch. 2023 también marca el 50 aniversario del icónico brazalete Bone Cuff de Tiffany’s, que cumple años con una reedición en distintos materiales, incluidos cuatro modelos en plata.
Toda esta fascinación por los brillos plateados ha causado revuelo en las redes sociales, especialmente los anillos de plata: su “social buzz” -el ruido en redes sociales- aumentó un 314% a comienzos de este año, según la edición estadounidense de Marie Claire.
En una conversación de la estilista más famosa de Hollywood, Rachel Zoe, con la fundadora de Mounser, Amanda Assad Mounser, que publica la primera en su página de estilo de vida, la diseñadora dice que el minimalismo modernista, el año 2000 y la escena “rave” de principios de 2000, y los movimientos de la moda gótica alimentan la tendencia centrada en la plata. «Los movimientos más tranquilos como el modernismo han creado una nueva visión de la vestimenta minimalista, eliminando el color de las joyas para hacerlas más tenues en nombre de la racionalización y centrándose en la forma escultórica», dice la diseñadora. Assad Mounser también conecta el atractivo actual de la plata con la fuerte nostalgia adolescente a la vanguardia de la moda, abarcando las tendencias de joyería arraigadas en las primeras experiencias de muchas personas con el lujo.
Lo cierto es que el hermano sencillo del oro es también un material apegado a la nostalgia: lo que estuvo de moda hace 20 y 30 años vuelve a estarlo ahora. Y esto puede ser la clave para que la plata pase de ser un capricho del diseño a un material que defina el momento actual: estas nuevas piezas crean una conexión renovada con el pasado, lo que hará que continuaremos llevándolas en el futuro.
Así lo ve Rosa Copado, fotógrafa de moda y belleza, directora creativa y licenciada en Bellas Artes en la especialidad Artes Plásticas e Imagen. “Recuerdo que cuando era pequeña había un mito impuesto que decía que si mezclabas plata y oro, daba mala suerte: ‘oro y plata, mala pata’. El oro tuvo un exclusivo éxito durante años porque era símbolo de riqueza y estatus, pero ahora la joyería se está transformando y es un lenguaje con el que nos expresamos de otro modo. El ‘boom’ con la plata es porque realzas el atractivo aportando mucha luz y modernidad a tu ‘look’. Aporta un aire refrescante con efecto bohemio y glamuroso que no tiene el oro, aunque me fascina la mezcla de ambos”, cuenta a SModa. Por eso, cuando desde la marca española Ariane Jewels le contactaron para proponerle diseñar su propia cápsula de joyas, lo tuvo muy claro: “Mi apuesta era todo a la plata”. En la colección hay earcuffs, anillos, brazaletes, piercings y collares tanto de plata, como de oro amarillo y plata, con precios que van de los 65 a los 195 euros. “Estoy muy influenciada por el arte y la música, mis grandes pasiones, y por supuesto, por mi propia experiencia. Todas las piezas tienen su propio significado. Por ejemplo, el anillo Bárbara fue nombrado así en honor a dos mujeres icónicas que me inspiran: la escultora Barbara Hepworth y la estilista Bárbara Martelo. Lenny Kravitz fue mi ‘crush’ en la adolescencia y siempre iba cargado de accesorios de plata. Era mi icono y marcó mucho mi estilo, de ahí el nombre del colgante Lenny. Las formas de Brancussi y muchos otros músicos y artistas tuvieron una fuerte influencia en mí”, explica Copado.
En el contexto de un nuevo minimalismo, heredado de ese “lujo silencioso” que a estas alturas hemos oído hasta la saciedad, el brillo efecto espejo de la plata brinda una sensación sencilla que ahora se ve moderna y relevante, y personifica una sensibilidad “cool” emergente que está empezando a calar en marcas, diseñadores y compradores. Missoma, una marca de joyería favorita de celebridades como Olivia Palermo o Sienna Miller, hecha a mano, de origen responsable, con materiales reciclados y diseñada en sus estudios en Notting Hill (Londres), acaba de lanzar una colección especial de plata con su colaboradora desde hace un tiempo, la “influencer” Lucy Williams. Otra firma que saltó de favorita de estilistas a recurso para nombres tan conocidos como Greta Gerwig o Jennifer Lawrence, la española afincada en Londres Monica Vinader, ha visto cómo las ventas de sus piezas de plata han experimentado un aumento del 26% según datos de la británica Harper’s Bazaar.
Entre las firmas de lujo también se palpa esta nueva fascinación: en Net-à-Porter, el templo online de las compras de lujo, la plata y sus acabados están ganando terreno. Es más, la primera de las “tendencias clave que hay que conocer en 2023” es, según este gigante de las compras, la aparición estelar de la plata en joyería: “¿Puedes mezclar plata y oro? Absolutamente. De hecho, las piezas de dos tonos de algunos de los nombres más importantes de la joyería fina están alcanzando un estatus de culto. Los diseñadores están creando joyas contemporáneas que mezclan y combinan sin esfuerzo sus metales”, destacan. Entre su selección, ponen el foco sobre la firma italiana Buccellati, que juega a mezclar los dos materiales en piezas única; la emergente Spinelli Kilcollin (que ha conseguido un hueco en esta tienda gracias a un anillo superventas, el Galaxy, que combina oro y plata; o, la diseñadora Bea Bongiasca, que vende piezas un tanto «kitsch» con la plata como punto de partida (ya las llevan Dua Lipa, Miley Cyrus, Bella Hadid y Chiara Ferragni). Otro dato curioso es que una de las joyas más caras que tiene a la venta este portal se trata de un collar diseñado por una nueva marca llamada Maor que combina oro y plata: su precio es de 27.350 euros.
Si hablamos de alta joyería, esa que reúne piezas extravagantes llenas de gemas y a menudo en creaciones únicas hechas a mano, el punto de inflexión de la plata probablemente fue la colección Dior à Versailles de 2016, diseñada por Victoire de Castellane, directora creativa de joyería de Dior, que encontró en este metal una luz, un brillo y un envejecer que el oro por sí solo no consigue aportar.
“Una cosa que me encanta es que las piezas de plata reflejan el paso del tiempo, envejecen, y eso arrastra un discurso muy potente”, reflexiona Rosa Copado. En su colaboración para Ariane Jewels ha descubierto que “la plata es un material fácil para trabajar, bastante blando y noble”. “Pienso que la plata levanta nuestros ‘looks’ del día a día con sugerentes destellos de luz, y la gente que se resistía, o era más fiel al oro, se ha dado cuenta de que la plata, además de iluminar más nuestra cara, nos aparta un toque moderno, fresco, ‘rockero’ y sofisticado que el oro por sí solo no da”, añade.
Salvo excepciones muy artísticas (como el impresionante collar Vortice II del artista joyero británico John Moore que la galerista Elisabetta Cipriani expuso en la feria Pabellón de Arte y Diseño de Londres de 2022 con un precio de 25.000 libras (unos 29.000 euros), las piezas de plata son entre un 30 y un 40 por ciento menos costosas que su equivalente en oro. A fecha de hoy un gramo de plata cuesta hoy 0,686 euros frente a los 58 de uno de oro, lo que hace que este material sea tan interesante.
Esto nos siempre fue así: ha habido períodos en la historia en los que la plata se consideraba más preciosa que el oro. Fue a principios del siglo XX cuando el oro blanco y el platino se hicieron populares en joyería, con lo que la plata se volvió menos deseable. Según dice Carol Woolton, editora colaboradora de British Vogue y fundadora del podcast “If Jewels Could Talk”, en The New York Times, las opiniones sobre la plata comenzaron a cambiar en las décadas de 1960 y 1970 con el trabajo de diseñadoras como Vivianna Torun Bülow-Hübe para Georg Jensen y Elsa Peretti para Tiffany & Company. “Las joyas de Peretti enfatizaban las líneas puras de la plata, haciéndola irresistiblemente táctil con una calidad sensual que hoy luce deslumbrantemente moderna”.
En 2023 todos los manuales de estilo apuntan a recuperar la plata para conseguir un aspecto más moderno, y a mezclarla con oro y otros materiales. También es fácil de combinar, “literalmente con todo”, dice Rosa Copado. A ella particularmente le gusta mezclar muchos earcuffs, el anillo Elisa de su colección para Ariane Jewels y un «choker» o el colgante Lenny. “Depende del peinado, ‘makeup’ y el ‘look’, verás las joyas tan diferentes… Lo divertido es jugar y convertir un ‘look’ básico en algo sofisticado gracias a la plata y al brillo de las circonitas, o darle u punto moderno a un ‘look’ excesivamente formal”.
En lo que todos los expertos en tendencias parecen coincidir es en que la moda cambia y hoy es el momento de la plata: “La moda cambia y va de un lado a otro. Ahora toca la plata y mañana a saber qué… Aunque lo interesante no debe ser la tendencia sino que te veas favorecida con lo que llevas, que te sientas cómoda y represente tu estilo”, dice Copado. Quizá sea esa la clave.