Prisión para los “corresponsales” del ISIS detenidos en Barcelona
El juez Velasco considera a los dos hombres y a la mujer arrestados el sábado una célula para la captación de mujeres para la yihad
El juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco ha enviado este martes a prisión a los dos hombres y a la mujer detenidos por la Guardia Civil el pasado sábado en Barcelona y Granollers por sus supuestas actividades yihadistas. El magistrado les considera “corresponsales” de la red terrorista autodenominada Estado Islámico para la captación y adoctrinamiento de mujeres y su posterior envío a zonas de conflicto, según fuentes jurídicas. Todos ellos contaban con contactos en Siria. Los tres detenidos es...
El juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco ha enviado este martes a prisión a los dos hombres y a la mujer detenidos por la Guardia Civil el pasado sábado en Barcelona y Granollers por sus supuestas actividades yihadistas. El magistrado les considera “corresponsales” de la red terrorista autodenominada Estado Islámico para la captación y adoctrinamiento de mujeres y su posterior envío a zonas de conflicto, según fuentes jurídicas. Todos ellos contaban con contactos en Siria. Los tres detenidos están imputados por colaboración con la organización terrorista.
Los dos hombres arrestados por la Guardia Civil en un domicilio próximo a la Sagrada Familia de Barcelona trabajaban como cocineros. Uno de ellos ejercía en un restaurante judío de la capital catalana, según las mismas fuentes. Estos dos hombres se dedicaban a la difusión de contenidos y consignas yihadistas en las redes sociales, donde colgaban vídeos de combatientes, banderas del grupo terrorista y comentarios favorables a la incorporación a las filas del ISIS.
La mujer, arrestada en Granollers, pretendía entrar en Afganistán, país donde el Estado Islámico mantiene una lucha con los talibanes en zonas fuera del control gubernamental. Para ello, se iba a casar en los próximos días en Italia con un hombre árabe. La mujer, nacida en Cataluña y de padres marroquíes, había intentado en 2014 unirse al ISIS (por sus siglas en inglés). En diciembre de ese año viajó a Turquía con intención de entrar en Siria. Una expareja ya se había incorporado a las filas del Estado Islámico.
La chica formaba parte grupos en redes sociales abiertos en los que trataba de captar a otras mujeres para la yihad. Cuando detectaba a alguna favorable a la causa, las dirigía a foros cerrados, donde ambas entraban en una espiral de radicalización, según fuentes jurídicas.