No hay latido

“No hay latido” son tres duras palabras con las que el mundo se para y todo se derrumba: los planes, las ilusiones, un futuro que ya habíamos imaginado. La primera vez que me las dijeron fue hace dos años, pasado ya el primer trimestre de embarazo. La segunda, cinco meses después, justo en la fecha que debería haber nacido el bebé de la primera pérdida. Que estos pequeños corazones que habían palpitado con fuerza ya no lo hicieran me dejó un vacío imborrable. Pero sucede, y mucho más de lo que imaginamos: uno de cada cuatro embarazos no llega a término, así que es importante que normalicemos t...

“No hay latido” son tres duras palabras con las que el mundo se para y todo se derrumba: los planes, las ilusiones, un futuro que ya habíamos imaginado. La primera vez que me las dijeron fue hace dos años, pasado ya el primer trimestre de embarazo. La segunda, cinco meses después, justo en la fecha que debería haber nacido el bebé de la primera pérdida. Que estos pequeños corazones que habían palpitado con fuerza ya no lo hicieran me dejó un vacío imborrable. Pero sucede, y mucho más de lo que imaginamos: uno de cada cuatro embarazos no llega a término, así que es importante que normalicemos también esta realidad. Octubre es el mes para recordar a todos los bebés que estuvieron, pero no se quedaron. Ahora, con mi bebé arcoíris de tres meses en brazos, tengo las fuerzas para escribir sobre este tema tabú. Porque es necesario visibilizar el duelo gestacional y perinatal, que haya más profesionales que sepan acompañar en estas pérdidas y, sobre todo, que la sociedad reconozca este dolor con más respeto, atención y empatía.

Elisabet Anglada. Barcelona

Stop feminicidios

Otro día más viendo cómo una mujer ha muerto a manos de su marido, exmarido, novio o compañero. Me parece terrible lo que estas mujeres deben estar pasando antes del fatídico día, porque la mayoría, por no decir todas, sufre un verdadero calvario. Algunas veces se lo cuentan a sus familiares o personas más allegadas, en otras ocasiones callan por el miedo que sienten hacia sus agresores o incluso por vergüenza de lo que les está pasando. Creo que cada muerte es un fallo de nuestra sociedad, un fallo que de alguna manera tenemos que resolver. No puede haber más muertes, más hijos huérfanos que, además de padecer los malos tratos al igual que sus madres, tendrán que aprender a vivir sin ellas, conscientes de que han sido asesinadas por sus padres. ¿Puede haber algo más cruel?

María José Herrera. Badalona

‘Phubbing’

El phubbing es un término que si bien no se ha extendido en nuestro vocabulario está muy presente en nuestra sociedad: es el acto de ignorar a las personas que nos rodean, centrando toda nuestra atención en un móvil. Esta adicción a nuestros teléfonos está debilitando cada vez más las relaciones humanas y conduce a la pérdida de las conexiones reales entre personas. Creo que ya va siendo hora de reflexionar sobre el impacto que el phubbing llega a tener en nuestras relaciones personales y en nuestra sociedad en general. Si bien no podemos negar que la tecnología es una herramienta maravillosa, no debería ser un obstáculo para el contacto humano genuino.

Natalia Muñoz de Tena. Cornellà de Llobregat (Barcelona)

Solución al “conflicto”

Denominamos conflicto palestino israelí al hecho de que Israel se expanda progresivamente, colonizando territorio de Palestina, contraviniendo todas las resoluciones de la ONU y arrinconando a los palestinos en pequeñas zonas de su país. La solución del “conflicto” es muy sencilla: cumplir la legalidad internacional. Que Israel abandone los territorios ilegalmente ocupados, retrocediendo a las fronteras que le asignó la ONU en 1947, y que toda la comunidad internacional reconozca a los dos Estados. Defiendo la paz entre ambos pueblos, al tiempo que rechazo cualquier forma de violencia.

Juan Núñez-Cacho del Águila. Madrid