Ir al contenido
Cartas al director

Cifras, letras y personas

Cada número es un nombre, y cada nombre una persona. Los datos, aunque anónimos, también son humanos. No podemos acostumbrarnos a normalizar aquello que, en otras circunstancias, supondría una aberración. Asumir el número de contagios y fallecidos diarios actuales como un equilibrio necesario para mantener la economía, no se antoja ni ético ni moral.

Todos sufrimos las crisis en mayor o menor medida, pero una vez pasada, puede existir la opción de superarla. Eso sí, siempre y cuando se cumpla una condición vital básica: estar vivo.

Ramón Puchades Rincón de Arellano. Valen...

Google te da acceso gratuito a esta noticia

Y a todo el contenido de EL PAÍS durante 30 días. Gratis, sin tarjeta.

Cada número es un nombre, y cada nombre una persona. Los datos, aunque anónimos, también son humanos. No podemos acostumbrarnos a normalizar aquello que, en otras circunstancias, supondría una aberración. Asumir el número de contagios y fallecidos diarios actuales como un equilibrio necesario para mantener la economía, no se antoja ni ético ni moral.

Todos sufrimos las crisis en mayor o menor medida, pero una vez pasada, puede existir la opción de superarla. Eso sí, siempre y cuando se cumpla una condición vital básica: estar vivo.

Ramón Puchades Rincón de Arellano. Valencia

Archivado En