¿Cambiar la Navidad?
La vida es un hecho agridulce. La Navidad de este año es un buen ejemplo: a la alegría de cumplir con un año más se une la tristeza de las restricciones y los estragos de la covid. Pero estas inusuales circunstancias tal vez sean una buena oportunidad para replantearnos ciertas dinámicas heredadas y muchas veces autoimpuestas, de tomar conciencia de la vorágine en la que entramos todos los años sin pararnos a pensar: reuniones forzadas, regalos forzosos, comidas y empachos, felicidad a la fuerza. Tal vez sea el momento de cambiar las Navidades.
Adolfo Sánchez Cuadrado. Granada...
La vida es un hecho agridulce. La Navidad de este año es un buen ejemplo: a la alegría de cumplir con un año más se une la tristeza de las restricciones y los estragos de la covid. Pero estas inusuales circunstancias tal vez sean una buena oportunidad para replantearnos ciertas dinámicas heredadas y muchas veces autoimpuestas, de tomar conciencia de la vorágine en la que entramos todos los años sin pararnos a pensar: reuniones forzadas, regalos forzosos, comidas y empachos, felicidad a la fuerza. Tal vez sea el momento de cambiar las Navidades.
Adolfo Sánchez Cuadrado. Granada