Isabel Díaz Ayuso
Es asombrosa la ingenuidad que demuestra una y otra vez un amplio sector de los madrileños ante las reiteradas provocaciones de la presidenta de la Comunidad. Su impúdica referencia a las costumbres de los inmigrantes, su maltrato al personal sanitario y educativo, sus guiños a las fuerzas de seguridad, no dejan de ser cortinas de humo para desviar la atención sobre su ineptitud como gestora y los daños incalculables que provoca. Su talante trumpiano es solo el trampantojo tras el que se oculta un edificio en ruinas.
Juan Fernández Sánchez. Madrid...
Es asombrosa la ingenuidad que demuestra una y otra vez un amplio sector de los madrileños ante las reiteradas provocaciones de la presidenta de la Comunidad. Su impúdica referencia a las costumbres de los inmigrantes, su maltrato al personal sanitario y educativo, sus guiños a las fuerzas de seguridad, no dejan de ser cortinas de humo para desviar la atención sobre su ineptitud como gestora y los daños incalculables que provoca. Su talante trumpiano es solo el trampantojo tras el que se oculta un edificio en ruinas.
Juan Fernández Sánchez. Madrid