La importancia de las palabras

No solo es lo que se dice, sino cómo se dice. Yo quiero aportar estas humildes palabras para no quedarme quieto. Sé lo que son las etiquetas y el daño que estas pueden hacer y que constituyen otro muro, otro corsé, que también hay que derribar y poder soltar. Con la pandemia, nos hemos acostumbrado a escuchar, leer e incluso utilizar palabras que antes no formaban parte de nuestro lenguaje cotidiano: los “rebrotes”, las “segundas olas”, la “nueva normalidad” son conceptos que ya hemos interiorizado y que conviven con otros que ya antes se nos habían hecho muy presentes: crisis, economía, cierr...

No solo es lo que se dice, sino cómo se dice. Yo quiero aportar estas humildes palabras para no quedarme quieto. Sé lo que son las etiquetas y el daño que estas pueden hacer y que constituyen otro muro, otro corsé, que también hay que derribar y poder soltar. Con la pandemia, nos hemos acostumbrado a escuchar, leer e incluso utilizar palabras que antes no formaban parte de nuestro lenguaje cotidiano: los “rebrotes”, las “segundas olas”, la “nueva normalidad” son conceptos que ya hemos interiorizado y que conviven con otros que ya antes se nos habían hecho muy presentes: crisis, economía, cierre de empresas… Las palabras no son inocuas y no es lo mismo utilizar unas que otras. Confío en que quienes tienen responsabilidades públicas sean capaces de encontrar las palabras justas y adecuadas para transmitir hechos con verdad y transparencia, la crítica cabe y es legítima, pero no así el insulto y la mentira para defender posturas.

Francisco Goya Santesteban. Sarriguren (Navarra)