Cuando “mañana” cambia
Llevaba mucho tiempo posponiendo varias cosas. Tonterías. Al final, puedo hacerlo mañana o incluso pasado mañana, y si no, la semana que viene, pensaba. Hasta que un día, el “mañana” cambió. Mañana ya no podría hacer ninguna de las menudeces que llevaba semanas dejando pasar. La peluquera ya no abriría, tampoco lo haría la zapatería. El bar en el que pensaba tomar una caña con esa persona a la que llevaba meses sin ver por pura dejadez también había echado el cierre. A mí esta pandemia me va a dejar una enseñanza clara: nunca más dejes para mañana lo que puedas hacer hoy.
...
Llevaba mucho tiempo posponiendo varias cosas. Tonterías. Al final, puedo hacerlo mañana o incluso pasado mañana, y si no, la semana que viene, pensaba. Hasta que un día, el “mañana” cambió. Mañana ya no podría hacer ninguna de las menudeces que llevaba semanas dejando pasar. La peluquera ya no abriría, tampoco lo haría la zapatería. El bar en el que pensaba tomar una caña con esa persona a la que llevaba meses sin ver por pura dejadez también había echado el cierre. A mí esta pandemia me va a dejar una enseñanza clara: nunca más dejes para mañana lo que puedas hacer hoy.
Amelia Bargiela Llagaria. San Andrés del Rabanedo (León)