México apela a la unidad de Norteamérica frente a los aranceles de Trump: “Es la única forma de competir con Asia”
Sheinbaum rechaza la imposición de tarifas del 25% al acero y aluminio y anuncia que solicitará una reunión con el secretario de Comercio y el representante comercial de Estados Unidos
“No estamos de acuerdo”. Así reaccionó el Gobierno de Claudia Sheinbaum a los aranceles anunciados esta semana por Donald Trump a las importaciones de acero y aluminio. La presidenta mexicana salió en defensa de la integración económica de Norteamérica y anunció que esperará a la ratificación del secretario de Comercio y el representante comercial estadounidenses para exponer que los gravámenes del 25% a los productos mexicanos “no tienen sentido”. “La única forma de competir con Asia es mantenernos juntos”, afirmó la mandataria, en su conferencia de prensa de este martes. “El presidente Trump tiene su estilo. Nosotros tenemos que establecer la mejor relación posible con Estados Unidos”, agregó.
“El tratado comercial que tenemos ha generado una integración que beneficia a Estados Unidos, nos beneficia a los tres países”, dijo Sheinbaum sobre el TMEC, el acuerdo que mantienen México, Estados Unidos y Canadá. El Gobierno mexicano hizo un llamado a la calma para mitigar los impactos de los aranceles impulsados por Trump y enfatizó que los de la siderurgia entrarán el vigor el próximo 12 de marzo, lo que da un margen a las autoridades mexicanas para negociar con la Casa Blanca. El argumento principal del país latinoamericano es que tiene un déficit con los productores estadounidenses en el comercio de acero y aluminio. “Es un argumento muy fuerte para decir que no tiene caso”, afirmó la presidenta para mantener la relación con su principal socio comercial. “Es un balazo en el pie”, aseguró el secretario de Economía, Marcelo Ebrard. “No se justifica esta tarifa, es una mala idea”, subrayó el funcionario.
El Gobierno mexicano hizo hincapié en el impacto negativo que puede tener la medida en la industria automotriz, símbolo de la integración comercial en la región y una de las cadenas productivas que se verían más afectadas. El país latinoamericano sostuvo que es el principal destino de las exportaciones siderúrgicas de Estados Unidos y aseguró que los aranceles no son sostenibles porque hay varios componentes que cruzan la frontera varias veces antes de llegar a los consumidores.
Sheinbaum descartó tomar medidas en represalia y su Administración se mostró confiada en alcanzar un acuerdo, tras el anuncio de Washington de impuestos al comercio mundial. “Hay que esperar, ir paso por paso, para qué nos adelantamos”, comentó la mandataria sobre la posible adopción de un “plan B”, aunque dejó abierta la posibilidad a responder con medidas previstas en el TMEC. La renegociación del tratado está prevista para mediados de 2026, pero las amenazas recurrentes de Trump han adelantado ese proceso en los hechos. La reunión que busca el Gobierno mexicano con las autoridades comerciales de Estados Unidos supondrá una primera toma de contacto entre ambos países.
Acompañada de su Gabinete de Seguridad, Sheinbaum presentó los avances en el combate al crimen organizado y la contención de la migración, las dos condiciones que impuso la Casa Blanca para diferir por un mes la imposición de aranceles a todas las importaciones mexicanas, la principal amenaza para la economía del país. México ha informado de más de 11.600 detenidos por delitos de alto impacto y la incautación de 102 toneladas de drogas desde que inició el actual Gobierno, el pasado 1 de octubre. “Enero de 2025 ha sido el más bajo en el número de homicidios de los últimos ocho años, al menos”, declaró la presidenta.
Omar García Harfuch, el zar de Seguridad, aseguró que las afectaciones económicas a los grupos criminales superan los 63.000 millones de pesos (más de 3.000 millones de dólares). Harfuch señaló que en las últimas dos semanas hubo más de 220 capturas en la frontera con Estados Unidos y se centró en los decomisos de precursores y drogas químicas, parte de los resultados que las autoridades mexicanas ponen sobre la mesa de negociaciones para evitar las tarifas de manera permanente, además de los 10.000 militares que ya ha movilizado en la frontera entre ambos países.
Trump se quejó en una entrevista con Fox News el pasado fin de semana de que “México no ha hecho lo suficiente” para mantener la pausa en la crisis arancelaria. La revisión está prevista para la primera semana de marzo, pero las presiones de Washington sobre sus vecinos son permanentes para frenar el tráfico de fentanilo y el cruce de inmigrantes indocumentados. Sheinbaum, sin embargo, ha apostado por la cautela y la “cabeza fría” para no entrar en el cruce de declaraciones con el republicano. “No tenemos por qué estar contestando a todas las declaraciones”, sentenció la presidenta. “Estamos listos”, dijo Ebrard sobre los distintos escenarios que las autoridades mexicanas han previsto ante la amenaza de una guerra comercial. “Vamos a perseverar y seguir adelante”, agregó el secretario de Economía.