Europol pide la colaboración ciudadana para detener a los peores agresores sexuales de la UE

Cualquiera puede ser víctima de abusos sexuales, y en la UE se denuncia una de estas agresiones violentas cada dos minutos, según Europol, la Oficina Europea de Policía. Las víctimas son en su mayoría mujeres y niños, y la búsqueda de los delincuentes es difícil porque pueden cambiar de domicilio con frecuencia o viajar de un país a otro, pero también ocultarse en un barrio cualquiera como un vecino anónimo. El apoyo de la ciudadanía resulta esencial para detenerles, y Europol ...

Cualquiera puede ser víctima de abusos sexuales, y en la UE se denuncia una de estas agresiones violentas cada dos minutos, según Europol, la Oficina Europea de Policía. Las víctimas son en su mayoría mujeres y niños, y la búsqueda de los delincuentes es difícil porque pueden cambiar de domicilio con frecuencia o viajar de un país a otro, pero también ocultarse en un barrio cualquiera como un vecino anónimo. El apoyo de la ciudadanía resulta esencial para detenerles, y Europol ha publicado sus nombres e historiales en su página de web. Abierta este martes, la página ha recibido 120.000 visitas en sus primeras horas, un éxito de consultas que los expertos policiales esperan ver traducido en detenciones.

“Si reconoce a uno de los asaltantes sexuales, puede enviarnos información de forma anónima y contribuir a una Europa más segura”, reza la campaña. La lista de los 18 agresores sexuales permanecerá abierta durante cuatro semanas. Sus fotografías circularán también en las redes sociales. Una vez dentro de la página de Europol, las 18 primeras imágenes, enmarcadas en rojo, son las de estos delincuentes. Figura, por ejemplo, Mohammed Herzi, de nacionalidad tunecina, buscado por violación múltiple, secuestro y tráfico de personas. O Antonio Vladimir Vinueza Morales, ecuatoriano y perseguido por la violación de su hija cuando la niña tenía 10 años; Nesat Bego, de Albania, que asaltó a un niño menor de 11 años en Luxemburgo; el ruso Yuliy Sericov, consumidor de pornografía infantil que tenía 5.701 documentos de esta clase en su ordenador; el danés Frank Sayed Mohamed Sadegh Heskaer, que abusó sexualmente de menores; Luciano Scibilia, italiano, que abusó al menos de cinco niñas dándoles masajes supuestamente terapéuticos, o el búlgaro Plamen Ivanov Mitrev, que secuestró y violó a cuatro mujeres.

Todos se encuentran en situación de rebeldía, y la relación de sus nombres ha sido elaborada por cada uno de los 19 países que los buscan, entre otros España, Francia, Polonia, Rumanía, Letonia, Bulgaria o los Países Bajos, y remitida luego a Europol. “Sobre ellos pesa una orden europea de arresto, y de ahí que la respuesta ciudadana sea tan importante. Iniciamos campañas online con delitos diversos desde 2016, y de los 91 criminales detenidos desde entonces, 33 lo fueron gracias a la información aportada por la gente en Internet”, dice Claire Georges, portavoz de Europol, en conversación telefónica. La oficina policial se estrenó con una campaña que recreaba un calendario de adviento con los criminales más buscados, y abría a diario una ventana con los datos del sujeto en cuestión. “Seguimos en 2017 con una serie que simulaba postales de vacaciones y la misma idea, que se pudiera reconocer al buscado. En 2018 ideamos unas cartas como si fueran de la Copa del Mundo de Fútbol, con los datos de los delincuentes. La de las mujeres más buscadas de Europa llegó en 2019 bajo el lema ´el crimen no tiene género´, y todas han sido muy bien recibidas por el público”, añade.

Como la página de los 18 depredadores sexuales incluye, más abajo y sobre fondo blanco, las fotos de otros fugitivos con distintos historiales delictivos, la portavoz de Europol subraya que los ciudadanos también pueden llamarles si les identifican. “Nuestro objetivo es arrestar al mayor número posible de criminales”, explica. La información recabada llegará directamente a los investigadores de cada uno de los países que buscan al escapado. “Para cuando hayas terminado de leer esto, lo más probable es que ya se haya denunciado al menos un delito sexual violento en algún lugar de la Unión Europea”, asegura la campaña en su despedida.