Irán amenaza con atentados suicidas ante un posible ataque de EE UU
Un jefe de la Guardia Revolucionaria iraní dice que no dudarán en utilizar "tácticas de martirio"
Irán podría utilizar a terroristas suicidas de la fuerza paramilitar de Basij si es atacado, según ha afirmado hoy un comandante de la Guardia Revolucionaria, en declaraciones difundidas por la agencia RIA Novosti. "Si los enemigos cometen la grave estupidez de poner en práctica sus amenazas militares contra Irán, entonces utilizaremos tácticas de martirio", ha dicho Ali Fadavi, uno de los jefes de la Guardia Revolucionaria, cuerpo de élite del Ejército iraní.
"Cualquier miembro de Basij puede llevar a cabo una gran labor, como hizo el guerrero islamista suicida Fahmideh. La región del...
Irán podría utilizar a terroristas suicidas de la fuerza paramilitar de Basij si es atacado, según ha afirmado hoy un comandante de la Guardia Revolucionaria, en declaraciones difundidas por la agencia RIA Novosti. "Si los enemigos cometen la grave estupidez de poner en práctica sus amenazas militares contra Irán, entonces utilizaremos tácticas de martirio", ha dicho Ali Fadavi, uno de los jefes de la Guardia Revolucionaria, cuerpo de élite del Ejército iraní.
"Cualquier miembro de Basij puede llevar a cabo una gran labor, como hizo el guerrero islamista suicida Fahmideh. La región del Golfo Pérsico y el estrecho de Ormuz son de tal importancia estratégica que cualquier acción en la región llevará a consecuencias mayores", ha advertido el comandante.
Durante la guerra entre Irán e Irak (1980-1988), un niño iraní de 13 años, Hossein Fahmideh, voló un tanque iraquí en un ataque suicida. Fahmideh, considerado el primer terrorista suicida islamista, es un héroe en su país y tiene un monumento en la capital, Teherán. Fadavi ha explicado que Irán ganó suficiente experiencia en la guerra contra Irak "y uno de los secretos de nuestro éxito entonces fue la cultura del sacrificio".
Estas declaraciones se enmarcan en la serie de advertencias realizadas en los últimos días por oficiales de las Fuerzas Armadas iraníes contra un posible ataque estadounidense, después de que Estados Unidos impusiera nuevas sanciones al régimen iraní y de que el presidente George W. Bush insinuara que podría estallar la III Guerra Mundial si Teherán no abandona su programa nuclear.