Al menos 113 muertos al caer al mar un avión en la costa de Benin

Al menos 113 personas murieron ayer al precipitarse contra el mar un avión Boeing 727 con capacidad para 140 pasajeros que acababa de despegar del aeropuerto internacional de Cotonú, capital económica de Benin, según ha informado hoy el ministro de Exteriores del país, Rogatien Biaou.

Según el ministro, en un principio se habían rescatado a 24 supervivientes -incluido el piloto-, dos de los cuales han fallecido a causa de sus heridas. El resto han quedado ingresados en el hospital Hubert Maga de Cotonú, algunos de ellos con heridas muy graves. Igualmente, ha informado de que 161 persona...

Al menos 113 personas murieron ayer al precipitarse contra el mar un avión Boeing 727 con capacidad para 140 pasajeros que acababa de despegar del aeropuerto internacional de Cotonú, capital económica de Benin, según ha informado hoy el ministro de Exteriores del país, Rogatien Biaou.

Según el ministro, en un principio se habían rescatado a 24 supervivientes -incluido el piloto-, dos de los cuales han fallecido a causa de sus heridas. El resto han quedado ingresados en el hospital Hubert Maga de Cotonú, algunos de ellos con heridas muy graves. Igualmente, ha informado de que 161 personas, incluyendo a los 10 tripulantes, se encontraban a bordo del aparato en el momento del accidente.

El siniestro tuvo lugar a primeras horas de la tarde de ayer. En el momento de despegar, el avión chocó con un edificio situado al final de la pista del aeropuerto, antes de explotar y caer al mar. El avión, un Boeing de la compañía UTA fletado por una empresa privada libanesa, llevaba principalmente pasajeros de origen libanés, que volvían a su país para pasar las fiestas. El aparato viajaba procedente de Conakry (Guinea) con destino a Beirut, con una escala prevista en Dubai (Emiratos Arabes Unidos).

Siempre según la radio, dificultades mecánicas en el tren de aterrizaje en el momento del despegue han podido ser el origen del siniestro. El presidente beninés, Mathieu Kereku, y varios ministros del gobierno se trasladaron al lugar, al igual que muchos curiosos. Además, como consecuencia de la tragedia, el aeropuerto de Cotonú, en las orillas del golfo de Guinea, se cerró al tráfico aéreo.