Israel amenaza con deportar a Arafat si continúa poniendo trabas a la Hoja de Ruta
La Autoridad Palestina rechaza "la injerencia israelí" en sus asuntos internos
Israel ha anunciado que podría deportar o arrestar al presidente palestino, Yasir Arafat, si continúa dificultando los esfuerzos del primer ministro, Abu Mazen, para llevar a cabo el plan de paz para Oriente Próximo auspiciado por Estados Unidos, según ha declarado una fuente diplomática israelí.
"Israel ha comunicado a Washington que si Arafat continúa minando los esfuerzos de Abu Mazen, reconsideraremos su estatus", ha dicho la fuente, "y por status queremos decir inmunidad".
Por su parte, un consejero del presidente palestino, Ahmad Abdelrahman, ha rechazado esta "injerencia i...
Israel ha anunciado que podría deportar o arrestar al presidente palestino, Yasir Arafat, si continúa dificultando los esfuerzos del primer ministro, Abu Mazen, para llevar a cabo el plan de paz para Oriente Próximo auspiciado por Estados Unidos, según ha declarado una fuente diplomática israelí.
"Israel ha comunicado a Washington que si Arafat continúa minando los esfuerzos de Abu Mazen, reconsideraremos su estatus", ha dicho la fuente, "y por status queremos decir inmunidad".
Por su parte, un consejero del presidente palestino, Ahmad Abdelrahman, ha rechazado esta "injerencia israelí en los asuntos internos" palestinos, estimando que "tendrá repercusiones peligrosas para la paz en la región".
Abu Mazen es primer ministro desde principios de año, después de las presiones de Washington que acusó a Arafat de fomentar la violencia durante los 33 meses que ha durado la segunda Intifada. Reforzando esta postura, oficiales palestinos han declarado que Arafat está tratando de debilitar al primer ministro acusándole de ser demasiado débil con Israel a la hora de llevar a cabo los compromisos que ha adquirido para llevar al terreno las exigencias de la Hoja de Ruta.
Por otra parte, las tensiones continúan entre los 6.000 palestinos presos en las cárceles israelíes. Abu Mazen habló hoy por teléfono con el primer ministro británico, Tony Blair, para pedirle que presione a Israel para que libere a los prisioneros.