Annan abre la cumbre sobre racismo con críticas a Israel por los "daños" causados a los palestinos
La policía ha desplegado un importante dispositivo de seguridad, compuesto por unos 3.000 hombres
El secretario general de la ONU ha afirmado hoy en Durban que "la abominación" de la que fueron víctimas los judíos no puede excusar los "daños" causados a los palestinos.
"El pueblo judío ha sido víctima del antisemitismo en muchas partes del mundo, y en Europa ha sido el blanco del Holocausto, la última abominación", ha afirmado Annan durante su discurso de apertura, añadiendo que "este hecho no debe olvidarse nunca o minimizarse".
"Por ello, es comprensible que muchos judíos toleren mal cualquier acusación de racismo contra el Estado de Israel, todavía más cuando coinciden con...
El secretario general de la ONU ha afirmado hoy en Durban que "la abominación" de la que fueron víctimas los judíos no puede excusar los "daños" causados a los palestinos.
"El pueblo judío ha sido víctima del antisemitismo en muchas partes del mundo, y en Europa ha sido el blanco del Holocausto, la última abominación", ha afirmado Annan durante su discurso de apertura, añadiendo que "este hecho no debe olvidarse nunca o minimizarse".
"Por ello, es comprensible que muchos judíos toleren mal cualquier acusación de racismo contra el Estado de Israel, todavía más cuando coinciden con los ataques a ciegas y totalmente inaceptables contra civiles inocentes", prosiguio.
"Por eso mismo, no podemos esperar que los palestinos acepten eso como un razón para ignorar los daños que les han causado -desplazamiento, ocupación, bloqueo y en la actualidad ejecuciones extrajudiciales- sea cual sea el término por el que los describamos", añadió, desencadenando los aplausos entre los delegados de más de 150 países.
"Pero, queridos amigos, las acusaciones mutuas no son el objeto de esta conferencia. Nuestro principal objetivo debe ser mejorar el futuro de las víctimas", ha concluido.
Annan ha dicho además que había llegado el momento de poner fin a los desacuerdos y las confrontaciones y enviar una señal de esperanza a todos aquellos que en el mundo son víctimas del racismo. El secretario general ha subrayado que la conferencia ha abierto grandes esperanzas que "no debemos defraudar".
La conferencia, que estará marcada por la polémica sobre Oriente Próximo y la política de Israel así como por la cuestión del pago de reparaciones por la esclavitud, no contará con la presencia de una delegación de alto nivel estadounidense. Sin embargo, los que sí están presentes son el líder cubano, Fidel Castro, y el presidente de la Autoridad Palestina, Yasir Arafat.
La cumbre se enfocará en pasos prácticos para erradicar el racismo, incluidas medidas de prevención, educación y protección.
Por otro lado, más de 10.000 manifestantes de ONG recorrieron esta mañana sin incidentes las calles de Durban (Sudáfrica) hacia el centro de conferencias donde se inauguró hoy la conferencia de la ONU. La policía desplegó un importante dispositivo de seguridad, compuesto por unos 3.000 hombres, pero no se produjeron disturbios.
Los manifestantes denunciaron, sobre todo, la política israelí, y reclamaron que la esclavitud sea declarada crimen contra la humanidad y constituya objeto de indemnizaciones.
Reclamo palestino
El presidente de la Autoridad Palestina, Yasir Arafat, llegó ayer jueves por la noche a Durban y nada más llegar mantuvo una breve reunión con el secretario general de la ONU, Kofi Annan.
Los palestinos y algunos participantes árabes quieren que el sionismo sea equiparado al racismo o, como mínimo, que la política israelí en los territorios palestinos sea condenada.
El secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, decidió boicotear la conferencia y Estados Unidos envió una delegación de perfil bajo para intentar que se retire de los documentos preparatorios los párrafos considerados antiisraelíes.
Si lo lograse, los representantes estadounidenses podrían participar en la conferencia -que concluirá el próximo 7 de septiembre- y evitar así un boicot total de Washington. Canadá tomó la misma decisión y no enviará a su ministro de Asuntos Exteriores, John Manley.