EE UU advierte del deterioro de las relaciones con Pekín si no liberan a los tripulantes del avión espía
Diplomáticos estadounidenses se reúnen por cuarta vez con los 24 miembros del EP-3
Los tripulantes de un avión EP-3 de la Marina de Guerra, que aterrizó sin autorización en la isla de Hainan después de una colisión en vuelo con un avión caza chino, han tenido hoy nuevos contactos con funcionarios diplomáticos estadounidenses y todo parece indicar que la crisis tendrá que resolverse a través de negociaciones a alto nivel.
El agregado militar de Estados Unidos en China, Neal Sealock, ha sido autorizado a reunirse por cuarta vez con los tripulantes que podrían ser incluso juzgados como espías si prospera la propuesta de una investigación del Ejército y son hallados culp...
Los tripulantes de un avión EP-3 de la Marina de Guerra, que aterrizó sin autorización en la isla de Hainan después de una colisión en vuelo con un avión caza chino, han tenido hoy nuevos contactos con funcionarios diplomáticos estadounidenses y todo parece indicar que la crisis tendrá que resolverse a través de negociaciones a alto nivel.
El agregado militar de Estados Unidos en China, Neal Sealock, ha sido autorizado a reunirse por cuarta vez con los tripulantes que podrían ser incluso juzgados como espías si prospera la propuesta de una investigación del Ejército y son hallados culpables.
Sealock ha pedido también que los diplomáticos estadounidenses puedan reunirse con los militares varias veces al día, lo que hace prever un alargamiento de la crisis que, según Washington, "ya ha dañado las relaciones bilaterales".
Los tripulantes se encuentran bien y su estado de ánimo es bueno, según ha informado la cadena norteamericana CNN tras recalcar que, debido al estancamiento de las conversaciones, "lo más probable es que la crisis tenga que resolverse mediante negociaciones a alto nivel".
Poco antes de iniciarse esta reunión, los diplomáticos estadounidenses han mostrado su frustración por la fría respuesta de Pekín a las demandas de Washington .
El gobierno de China insiste en que Estados Unidos debe pedir perdón por el incidente, ya que el avión militar había incursionado dentro del espacio aéreo chino cuando una maniobra de su piloto provocó la colisión con uno de dos aviones F-8 que los vigilaban.
El gobierno de Bush ha repetido que lamenta la aparente pérdida de un piloto chino, pero sostiene que el EP-3 realizaba un vuelo de observación en espacio aéreo internacional, y que fue el avión chino -más liviano y veloz- el que embistió a la aeronave estadounidense.
Pekín por su parte insiste en que no habrá una solución a la crisis si Washington no pide "una disculpa formal" por lo sucedido, lo que exige, sin dar muestras de debilidad, la cúpula del Ejército chino.