Llega el perfume ‘cowboy core’ que reivindica la sensualidad del cuero y del Lejano Oeste

Ya sea por nostalgia, pura rebeldía o justicia histórica, el imaginario western ha saltado de las áridas llanuras estadounidenses para protagonizar una auténtica revolución estética. Está en todas partes: la omnipresencia de bandanas y botas cowboy, la sofisticación del estampado pasley, el hipnótico movimiento de los flecos, la hegemonía del ante y el denim... “¡Hola, viejo amigo! Cambias tu nombre, pero no la forma de jugar”, canta Beyoncé al inicio de Cowboy Carter, el álbum que pone ritmo a este estimulante cowboy core que ha conquistado la temporada. También en el universo olfativo. Porque si hay un accesorio para sumarse a la tendencia sin caer en lo obvio ese es Eau d’Ombré Leather, el último perfume de Tom Ford Beauty.

La firma ha capturado la calidez y la sensualidad del Lejano Oeste en una fragancia unisex, salvajemente radiante. Inspirada en el amanecer del desierto, cuando el sol empieza a teñir el paisaje de tonalidades ambarinas, pero todavía conserva el frescor de la noche; la fragancia arranca de forma enérgica, con un trío de especias vigorizantes: jengibre, cilantro y cardamomo. Un toque cítrico y herbáceo que aviva las facetas terrosas del perfume y captura el vigor con el que los cowboys se enfrentan a una larga jornada de trabajo.

Porque el universo vaquero es muy físico, la recién nacida fragancia Eau d’Ombré Leather de Tom Ford Beauty se recrea en la sensualidad de la piel y la evocación táctil de las esencias. Por un lado, encontramos el cuero, uno de los tejidos fetiche de la firma. Late en el corazón de la fragancia, revelando su faceta provocadora y profunda, junto al toque picante del azafrán. Por otro, comparte protagonismo con la vainilla, obtenida por un largo proceso de cultivo y secado que potencia sus facetas aterciopeladas y luminosas. Un contraste contenido, que culmina en una vibrante estela de cedro, pachulí, sándalo, cipriol y haba tonka.

Envuelto en un elegante frasco de cuero que potencia su misterio y elegancia, Eau d’Ombré Leather de Tom Ford Beauty es un perfume sutil y persistente, que captura la vida libre y salvaje del Lejano Oeste. El aroma que personificarían iconos como John Wayne o Henry Fonda, hecho a medida de todos aquellos que toman las riendas de su propia vida.