Jonan Wiergo sabe por qué comprar un colchón no debería quitarnos el sueño
El modelo e influencer es el protagonista de una nueva entrega de ‘Infiltrados’, la campaña de cámaras ocultas de IKEA, con la que quiere demostrarnos que el valor del diseño no depende de su precio
El colchón es la pieza más importante de la habitación, sobre el que depositamos todos nuestros sueños y nuestro descanso. Elegir el adecuado para nosotros –y pocas cosas hay más personales que esta decisión–, depende de muchos factores: el tamaño, la firmeza, el relleno, la comodidad... Un buen colchón debe respetar la curvatura natural de nuestra columna; por eso los expertos recomiendan probarlo antes de comprarlo y, sobre todo, no escatimar en gastos. Pero, más allá de la frase hecha, ¿el precio determina su valor?
Los mejores hoteles, como el Hyatt Regency de Madrid, saben que parte de su éxito está en una cama de la que no quieras salir. Aquí es donde citan al modelo Jonan Wiergo con el propósito de realizar una sesión de fotos para una prestigiosa y misteriosa firma de colchones. “Esto es un colchonaco. Híbrido, firme, hecho en material natural. Todo es algodón y fibra natural”, anuncia el director de la supuesta marca. Nada parece indicar lo contrario. El aspecto y, sobre todo, la comodidad que siente el influencer en cuanto lo prueba encaja con el aspecto lujoso de la suite. Solo cuando la sesión se pone intensa, cuando aparecen las cadenas de oro y los falsos billetes empiezan a sobrevolar la habitación, como en un videoclip de rap de los 90, empieza a sospechar de que algo raro está ocurriendo.
En realidad, Wiergo estaba siendo protagonista de una de las cámaras ocultas de IKEA. El gigante sueco está detrás de Infiltrados, una original campaña que reflexiona acerca del valor del diseño: ¿Por qué seguimos creyendo que lo bueno tiene que ser necesariamente caro? No es la primera vez que la marca confirma sus sospechas. Hace casi diez años, cansados de que los clientes ignoraran sus colchones a pesar de que algunos estaban entre los mejores del mercado, decidieron añadirle una cifra más. Con el cambio de precio, el “nuevo” modelo Fördomar –en sueco significa “prejuicio”–, valorado en 4.449 euros, disparó también el interés y los elogios.
ANNELAND es el verdadero nombre del colchón que prueba Wiergo, un diseño híbrido, de 24 centímetros de alto, elaborado con espuma viscoelástica, espuma de alta elasticidad y una capa de muelles embolsados que distribuyen el peso de forma uniforme. En otras palabras, un colchón firme y cómodo, con diez años de garantía, cuyo precio responde a la filosofía ‘value of money’ de IKEA: crear objetos democráticos que rentabilicen al máximo lo que pagas, aunando forma y función, calidad y precio. Porque comprar un colchón no debería quitarnos el sueño.