El día que Agassi rompió todos sus trofeos en un ataque de celos por una escena de Brooke Shields en ‘Friends’
La actriz estadounidense cuenta en una entrevista en ‘The New Yorker’ cómo el tenista, su pareja en los años noventa, entró en cólera después de ver cómo le lamía los dedos a Matt LeBlanc en un cameo que realizó en la mítica serie
La actriz Brooke Shields (Nueva York, 57 años) no deja de dar titulares y revelar nuevos detalles de su vida en cada entrevista que concede, ahora que anda de promoción por el documental autobiográfico Pretty Baby, que se estrenará el próximo 3 de abril en la plataforma Hulu. La última revelación ha sido sobre su tormentosa relación con el tenista Andre Agassi (Las Vegas, 52 años) y cómo este sufrió un ataque de ira después de pres...
La actriz Brooke Shields (Nueva York, 57 años) no deja de dar titulares y revelar nuevos detalles de su vida en cada entrevista que concede, ahora que anda de promoción por el documental autobiográfico Pretty Baby, que se estrenará el próximo 3 de abril en la plataforma Hulu. La última revelación ha sido sobre su tormentosa relación con el tenista Andre Agassi (Las Vegas, 52 años) y cómo este sufrió un ataque de ira después de presenciar la escena que la intérprete protagonizaba junto a Matt Leblanc en un cameo en la mítica serie de los noventa Friends. En ese episodio de la segunda temporada, titulado El de después de la Superbowl, emitido en enero de 1996, la también modelo interpretaba a Erika, una fan acosadora de Joey Tribbiani, el personaje que encarnaba Leblanc. Ella debía lamerle los dedos en una de las escenas para mostrar cuán loca estaba por él. “Andre estaba entre el público apoyándome y salió de allí furioso”, ha explicado Shields en una entrevista publicada en la revista The New Yorker.
“Él me dijo: ‘Todo el mundo se está burlando de mí. Me has dejado en ridículo con ese comportamiento. A lo que yo le respondí: ‘¡Es una comedia! ¿Qué es lo que te pasa?”, explica la que fuera la jovencísima protagonista de El lago azul (1980). Aquella rabieta no acabó allí y, según cuenta Shields en la entrevista publicada el pasado domingo, el tenista volvió a casa lleno de ira y “destrozó todos sus trofeos”. Si bien a la estrella aquella reacción de su entonces novio le pilló por sorpresa, poco después descubrió que el deportista había estado abusando de la metanfetamina. “Más tarde me enteré de que por entonces era adicto a la metanfetamina, por lo que estoy segura de que aquel comportamiento irracional tuvo algo que ver con eso”, ha justificado. De hecho, fue el propio Agassi el que en su autobiografía de 2014, titulada Open, admitía el uso de metanfetamina en 1997, un año después de que saliera al aire el episodio de Friends.
En la escena que provocó aquella tormenta entre Agassi y Shields, Erika, el personaje que ella interpretaba, tenía una cita con Joey creyendo estar en todo momento con el doctor Drake Ramoray, de la serie Días de nuestra vida, de la que Joey era protagonista y del que ella estaba locamente enamorada. Durante la cena en el restaurante, Erika acababa lamiéndole las manos a Joey, el momento que hizo enfurecer al tenista, presente en todo momento durante la grabación. Sin embargo, como ahora explica Shields en esta misma entrevista con la revista neoyorquina, hasta el último momento no se decidió incluir la escena del lametón. “Lo habíamos hecho en el ensayo y dijeron: ‘Es demasiado loco. No lo hagas’. Pero pedí hacerlo. ‘Es tan divertido. Simplemente hace que esté aún más loca. Y es bonita, así que necesita estar realmente loca’. Y dijeron: ‘No, no’. Hicimos la primera toma y estuvo bien. Y luego, en la segunda toma, me gritaron: ‘¡Shields! ¡Hazlo de nuevo!’ De repente, el ambiente cambió y todos estos hombres con traje comenzaron a entrar al estudio. Al día siguiente, me preguntaron si quería hacer mi propio programa de televisión”, rememora. Tras aquel momento televisivo, a Brooke le ofrecieron protagonizar De repente, Susan, y casi acaba con su noviazgo con Agassi.
No es la primera vez que Shields reconoce que su relación con Agassi fue tóxica. La pareja comenzó a salir en 1993 para casarse en abril de 1997 y finalmente separarse en enero de 1999. “Al día siguiente de casarme ya sabía que me había equivocado”, aseguraba ella en sus memorias, tituladas There Was a Little Girl (2014). Según cuenta en ese mismo libro, tuvo un ataque de ansiedad nada más comenzar su luna de miel y se dio cuenta de que aquel matrimonio había sido un error: “Quería tener una boda porque quería juntar a toda la gente a la que quería. Quería a Andre, pero no estaba segura de desear la vida que llevábamos”.
El distanciamiento por sus respectivos trabajos y la confesión de Agassi de su adicción a las metanfetaminas desde 1993 —el mismo año que comenzaron su noviazgo— supusieron el golpe final a su relación. “Durante los dos años siguientes nos vimos muy poco. Yo estaba trabajando en la serie De repente, Susan y él estaba jugando en varios torneos. Me ignoraba cuando perdía y cuando ganaba iba directo al siguiente campeonato. Cada vez nos estábamos distanciando más y más”, escribía en sus memorias. A pesar de que Shields fue quien tomó la decisión de aquel divorcio, no fue fácil para la intérprete dar el paso. “Esa fue la primera vez en mi vida en la que dije: ‘No quiero vivir así, esto no me hace feliz. Es una persona genial, pero me marcho”, confesó en una entrevista a SModa en junio de 2022.
“Ya con el divorcio de mi primer marido [Agassi], me di cuenta de que quería que mi vida fuese diferente, pero debo decir que solo en los últimos 10 años he empezado a decir: ‘Bueno, pues esta soy yo y no quiero ser otra cosa”, añadía la actriz en la misma entrevista. Dos años más tarde de la separación, Agassi se casaría con la también tenista Steffi Graf y Shields lo haría con el guionista Chris Henchy. Ambos matrimonios continúan.