No hay estrellas en Rumanía
No hay estrellas en un combinado que empieza en Tatarusanu, el solvente portero de la Fiorentina, y podría acabar en Florin Andone, el delantero del Córdoba, que criado en España se ha ganado un puesto desde el hándicap del desconocimiento que tenían sobre sus condiciones en su país natal, Chiriches, suplente en el Nápoles, lidera la defensa junto a Grigore, que disputa la liga catarí. Sapunaru y Razvan Rat, laterales conocidos en España, pasan de largo de la treintena y también lo hacen cuatro de los centrocampistas seleccionados por Iordanescu. Los rumanos aguardan lo mejor de Nicolae Stanciu, un mediapunta del Steaua que está muy lejos de glorias pasadas que ejercieron el mismo rol con la camiseta tricolor. Otro viejo conocido de la Liga, el centrocamoista Gabriel Torje, que jugó éste último año en el Osmanlispor turco, tampoco faltará en el regreso de los rumanos a los focos.