Pasajeros afectados por la cancelación de los vuelos a Venezuela siguen varados en Barajas cuatro días después
Trabajadores del aeropuerto cifran en medio centenar las personas que continuaban allí en las primeras horas del viernes, mientras que los afectados denuncian que ya no les permiten pernoctar en las instalaciones
La cancelación de los vuelos con destino a Venezuela continúa afectando a un buen número de pasajeros que acudieron este lunes al Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas con la esperanza de partir rumbo a Caracas, pero que permanecen sin solución cuatro días después. Trabajadores de las instalaciones contactados por este periódico aseguran que alrededor de medio centenar de personas seguían en dicha situación en la mañana de este viernes, pero que han sido reubicados en vuelos de Avianca y Air Europa con destino a Medellín y Bogotá. Afirman que, tras estos cambios, alrededor de una decena de viajeros siguen en Barajas sin solución alguna y reconocen que esta noche ya no podrán pernoctar allí después de que se les haya comunicado la imposibilidad de ocupar las instalaciones si no cuentan con un título de transporte. Los afectados denuncian que la cifra de reubicados es mucho menor y critican la falta de alternativas e información.
José Enrique García, de 37 años, tenía previsto volar el lunes con destino a Caracas en un vuelo operado por la venezolana Estelar. Lleva desde entonces reclamando una solución que no llega y señalan la falta de comunicación por parte de la aerolínea. Una situación que, afirma, está afectando incluso a su salud. “Después de tantos días durmiendo en el suelo y pasando frío, tengo fiebre. Esta noche ni siquiera sabemos dónde vamos a dormir porque nos han dicho que ya no podemos permanecer en el aeropuerto”, narra con preocupación.
Respecto a las reubicaciones, afirma que tan solo se han aplicado a una treintena de los 350 pasajeros que tenían billete para este lunes con Estelar, además de recordar que la aerolínea también se vio obligada a cancelar los vuelos previstos para el pasado miércoles y este mismo viernes. “Esta mañana han puesto una ventanilla improvisada y han montado en un vuelo de Air Europa, con destino a Medellín, a unos 30 de nosotros, pero a los demás no nos han dado respuesta”, detalla García.
Denuncia que la aerolínea lo ha hecho de manera “furtiva” sin ningún tipo de aviso previo y que tampoco ha habido unos criterios claros para reubicar a unos pasajeros u otros. “Nos han vuelto a dejar tirados sin ningún tipo de notificación ni nada, es muy injusto”, reitera antes de afirmar que les tocará buscar algún hostal económico para pasar la noche.
La cancelación de los vuelos entre Madrid y Caracas comenzó a gestarse el pasado sábado después de que Iberia comunicará la congelación del servicio, atendiendo a las recomendaciones emitidas por la Autoridad Federal de Aviación Civil de EE UU (FAA, por sus siglas en inglés). Estas alertaban del alto riesgo de sobrevolar la zona e hicieron que la aerolínea española dejara aviones en tierra desde el lunes. La decisión no sentó bien en Caracas, que acusó a las compañías de “sumarse a las acciones de terrorismo de Estado promovido por el Gobierno de Estados Unidos, suspendiendo unilateralmente las operaciones aerocomerciales hacia y desde la República Bolivariana de Venezuela”.
Por ello, en la noche del miércoles el Gobierno de Nicolás Maduro revocó los derechos de tráfico aéreo a Iberia, TAP, Avianca, Latam Colombia, Turkish Airlines y Gol. Sin embargo, la decisión no afectó a otras como Air Europa o Plus Ultra, dado que estas cancelaron sus vuelos un día después, el pasado martes, siguiendo el consejo ofrecido por la Agencia Española de Seguridad Aérea (Aesa). Un matiz que ha resultado clave en la decisión del régimen venezolano.