Ir al contenido

El Ayuntamiento de Almeida quiere obligar a Más Madrid a retirar sus pancartas en contra del genocidio en Gaza: “Aumentan la crispación”

El partido de izquierdas, que colgó los carteles del edificio municipal de grupos, tiene tres días para alegar y está dispuesto a llegar a los tribunales

El Ayuntamiento de Madrid, que dirige José Luis Martínez-Almeida (PP), ha dado el primer paso para obligar a Más Madrid a retirar de la fachada del edificio municipal de grupos dos pancartas colgadas desde el 11 de septiembre en apoyo a Palestina: “Sí, es un genocidio” y “Stop al genocidio en Gaza. Palestina libre”. Así consta en una resolución de la presidencia del pleno adelantada por la cadena Ser y a la que accedió EL PAÍS, en la que se argumenta que su exhibición “no se ajustan a la legalidad aplicable” pues, se dice, tiene “un carácter partidista”, lo que “podría propugnar el enfrentamiento”, y, se añade, “aumentar la crispación que existe en este asunto”. El partido que lidera la oposición no quiere retirar las pancartas y está dispuesto a llegar a los tribunales.

“Almeida no se atrevió a tocar las pancartas antes de La Vuelta ciclista, no se atrevió a hacerlo tampoco antes de la manifestación multitudinaria del pasado sábado, y no lo ha hecho hasta ahora porque es consciente de que es tremendamente impopular su negacionismo del genocidio en Gaza y que hacerlo hubiera dado más motivos todavía a la gente para salir a las calles”, señala Eduardo Rubiño, concejal de Más Madrid, sobre la movilización ciudadana en apoyo a Palestina y en contra de la invasión israelí.

Según el portavoz del partido de oposición, esta disputa de las pancartas y banderas en la fachada del edificio de grupos municipales no es nueva. “En 2022 Vox nos denunció por colgar la bandera LGBTIQ+ por el Orgullo y finalmente la justicia nos ha dado la razón, años después y tras varios recursos”, añade, aventurando que ahora volverá a pasar lo mismo.

La resolución del secretario general del pleno, que preside Borja Fanjul (PP), manifiesta que “el conflicto entre Israel y Palestina, y la existencia o no de genocidio en Gaza, genera una fuerte disputa política y social, toda vez que es un asunto sobre el que la sociedad está muy sensibilizada”. Además, señala que la última etapa de la Vuelta a España, celebrada en Madrid, tuvo que ser suspendida por “por graves incidentes y altercados” por la presencia en la carrera ciclista del equipo Israel-Premier Tech. “La colocación de pancartas, visibles en el transcurso de la misma [en referencia a la etapa], evidenciaron la confrontación y crispación existente”, añade sobre el gesto de Más Madrid. Finalmente, en la resolución se argumenta que el edificio de grupos representa a la institución del Ayuntamiento en su conjunto y, por tanto, no puede ser utilizado de manera partidista.

En contraste, desde Más Madrid se señala que el edificio donde se han colocado las pancartas y las banderas, situado en la céntrica calle Mayor, 71, no alberga oficinas administrativas ni sirve para prestar servicios a la ciudadanía, sino que está “exclusivamente destinado a la actividad política del grupo municipal Más Madrid [y del resto de grupos políticos]”. La oposición a Almeida señala que están en su derecho de “expresar su posicionamiento a favor de los derechos de las personas mediante símbolos y a pronunciarse sobre cualquier asunto”.

A las preguntas de este diario sobre las motivaciones y la base jurídica para abrir el expediente, el Ayuntamiento se ha remitido a las palabras de la vicealcaldesa de Madrid, Inma Sanz, en declaraciones a los medios esta mañana: “Aquí no hay una normativa para los ciudadanos y otra para la izquierda o para los grupos de la izquierda”. Sanz ha señalado que “corresponde al presidente del Pleno adoptar esas medidas, pero indudablemente [hay que] obligarles a cumplir la ley como haríamos con cualquier ciudadano”.

“Parece que el Partido Popular vuelve a sacar su mordaza y pretende callar a la oposición, esta vez amenazando con retirar las pancartas en solidaridad con Palestina de los balcones del grupo municipal de Más Madrid”, se queja el concejal Rubiño, que cree que el presidente del pleno actúa como un “comisario político” de los populares. “Se trata de un atentado a la libertad de expresión y, peor aún, un intento de callar a la oposición democrática, en un tema además en el que el Gobierno municipal está cada vez más solo”, apunta.

Más Madrid tiene planeado presentar sus alegaciones en el plazo de tres días, a contar desde que recibieron la noticia de la apertura del expediente la tarde de este lunes. El partido de oposición reta ahora al alcalde, como señala Rubiño: “Si Almeida quiere retirar esas pancartas y la bandera palestina de los balcones del grupo municipal de Más Madrid va a tener que venir a hacerlo él directamente con sus propias manos y atenerse a las consecuencias porque, de la misma manera que la justicia ya nos dio la razón con la bandera del Orgullo no tenemos ninguna duda de que volverá a hacerlo”.

Más información

Archivado En