Los túneles de la M-30 ya no serán territorio sin conexión gracias a la instalación de 2.700 balizas
El ayuntamiento de Madrid pasará de 48 a 65 kilómetros de vía con mejor accesibilidad gracias a estos dispositivos a final de este año
Entrar a uno de los túneles de la M-30 y dejar de tener conexión a internet o señal en el móvil es, o era, casi una misma cosa. Sin embargo, este problema será cosa del ayer gracias a las 1.600 balizas “anti pérdida” que el Ayuntamiento de Madrid ha instalado en la vía y las 1.110 más que instalará a finales de este año con las que mejorar la conexión de los usuarios. La inversión hasta el momento ha sido de 141.000 euros, según ha anunciado el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, para 48 kilómetros de estos túneles cubiertos con los dispositivos ya instalados, distancia que se ampliará hasta los 65 kilómetros con los restantes. También ha detallado que otros 38 túneles urbanos están siendo actualizados con este sistema.
Esta mañana, Almeida ha presentado el nuevo proyecto para hacer más accesible la M-30 que construyó Alberto Ruiz-Gallardón, pensando también en que se beneficien los viajeros que atraviesen el futuro soterramiento de la A-5. Según el alcalde, de ahora en adelante Madrid será “la primera ciudad, no ya de Europa, sino del mundo, en conectividad dentro de los túneles”, ya que se trata de la instalación “más amplia” que hay en el continente europeo, y la segunda a nivel internacional, solo por detrás de Tokio. El regidor también ha señalado el impacto de estas mejoras sobre la calidad de vida de los que cada día pasan por “la vía más transitada de España, que es la Calle 30”.
Las balizas provienen de las empresas Waze y Google, como las que ya están instaladas. Se trata de dispositivos de bajo consumo que funcionan con pilas y emiten una señal bluetooth constante y unidireccional, lo que permite que los conductores reciban en sus móviles o GPS la información sobre su ubicación exacta. Las balizas están diseñadas en base “al respeto de la privacidad” y, aunque son de código abierto, no rastrean ni guardan datos de los usuarios.
El sistema de conexión es colaborativo, por lo que cada conductor tiene la posibilidad de interactuar y cooperar con el resto de los usuarios de la vía, para compartir el estado del tráfico, accidentes, o cualquier otra contingencia que pueda ser de interés.
Para beneficiarse de esta conectividad, los usuarios solo tienen que descargar la aplicación de Waze o de Google Maps. En el caso de Waze, se tendrá que habilitar el bluetooth, y en Google Maps, además de esto, habrá que activar la opción “balizas de túnel bluetooth” en los ajustes de la aplicación móvil.
El alcalde ha reconocido que este paso “puede parecer pequeño” y que la gente “puede pensar que cómo es posible que no pudiéramos tenerlo anteriormente”, pero ha señalado que “es un paso complejo”. El director de Políticas Públicas y Relaciones Institucionales de Google España y Portugal, Miguel Escassi, ha subrayado que este es uno de los sistemas “más sofisticados” que hay, por lo que lo considera un proyecto “muy ambicioso” también para ese gigante estadounidense de la tecnología. “Ahora podremos simplemente continuar nuestro trayecto y disfrutar de la conducción, disponiendo de toda la información necesaria, porque una vez más la tecnología demuestra que está aquí para apoyarnos, para ayudarnos en nuestro día a día, para permitirnos centrarnos en lo más importante”, ha dicho Escassi.