Más Madrid acusa a Ayuso de lanzar “un bulo” por decir que “un activista” del partido espió su vivienda

Manuela Bergerot, portavoz de Más Madrid en la Asamblea regional, ha reclamado este jueves a la presidenta autonómica, Isabel Díaz Ayuso (PP), que rectifique y retire por falsa su afirmación de que el partido de izquierdas mandó a un activista de la formación para inspeccionar su vivienda. El piso en el que reside la baronesa junto a su pareja, el empresario Alberto González Amador, inves...

Manuela Bergerot, portavoz de Más Madrid en la Asamblea regional, ha reclamado este jueves a la presidenta autonómica, Isabel Díaz Ayuso (PP), que rectifique y retire por falsa su afirmación de que el partido de izquierdas mandó a un activista de la formación para inspeccionar su vivienda. El piso en el que reside la baronesa junto a su pareja, el empresario Alberto González Amador, investigado por la justicia por sus negocios durante la pandemia, lleva en el centro de la polémica desde hace un año, pues en él se realizó una obra a pesar de dos órdenes de cese inmediato del Ayuntamiento capitalino. Más Madrid califica de “bulo” las palabras de Ayuso, pronunciadas este jueves en el parlamento autonómico.

“Ya me mandó un activista a casa, ¿no le informó de en qué piso vivo?”, le ha dicho Ayuso a Bergerot durante la sesión de control a su Gobierno, en la que también ha defendido al grupo sanitario Quirón, que es a la vez uno de los clientes de su pareja (a través de Quironprevención) y contratista de la administración regional (a través de Quironsalud). “Muy mal se organizan entre ustedes”, ha ironizado. “Ya hablaremos algún día de eso, porque mandaron a un técnico de su partido”, ha añadido. “¿Qué había, una escalera de Hogwarts que subía a un ático secreto?”, ha bromeado.

Esa pregunta retórica esconde una doble referencia a la escalera móvil del colegio en el que transcurre la mayor parte de la trama de las novelas de Harry Potter y a la especulación de que la vivienda en la que reside Ayuso estuviera unida por una escalera interior con la que tiene inmediatamente encima, sin que sea así, según se desprende de una inspección municipal realizada en mayo.

EL PAÍS ha solicitado al equipo directo de Ayuso que aclare a quién se refería la presidenta y que aportara detalles sobre lo supuestamente ocurrido. “No vamos a dar detalles, por una cuestión de seguridad”, ha sido la respuesta, tras lo que la oposición ha estallado en protesta contra lo dicho por la presidenta.

“Hemos visto a la señora Ayuso un poco nerviosa. Ha acusado a Más Madrid de mandar una persona a espiar sus pisos”, ha dicho Bergerot en una rueda de prensa. “No es el primer bulo de este tipo que lanza la presidenta, ya la hemos visto cómo es capaz de lanzar cualquier tipo de bulo sobre periodistas o medios de comunicación”, ha proseguido. “Es muy serio”, se ha quejado. “Le exijo que deje de hacerse la víctima y que, si tiene cualquier tipo de pruebas, las enseñe y se vaya a una comisaría, pero que deje de difamar a Más Madrid y a cualquiera que fiscalice sus chanchullos y los de su novio”.

Además, Más Madrid ha registrado en el Parlamento regional un escrito de queja, con el objetivo de que el presidente de la Cámara, Enrique Ossorio, reclame a Díaz Ayuso que retire sus palabras y se disculpe públicamente por faltar “al respeto, la dignidad y el decoro” del grupo parlamentario de izquierdas.

“La Presidenta de la Comunidad de Madrid acusa sin ninguna prueba (prueba que en ningún caso podría tener ya que dicho evento jamás se produjo) a nuestro Grupo Parlamentario de la comisión, entre otros, de un presunto delito de allanamiento de morada”, se lee en el documento, que difícilmente llegará a buen puerto en una Asamblea en la que el PP goza de mayoría absoluta. “Acusa a este Grupo Parlamentario de haber enviado a una persona que, mediante engaño, se habría personado en su domicilio haciéndose pasar por un técnico de averías”, se añade. “Es por completo inadmisible y podríamos decir que antidemocrático, que la Presidenta de la Comunidad vierta acusaciones tan graves sobre el Grupo Parlamentario líder de la oposición, que representa a seiscientos mil votantes para los que la Presidenta también gobierna”.

La presidenta vive en un piso del distrito madrileño de Chamberí, donde su pareja, el empresario Alberto González Amador, realizó una obra a pesar de dos órdenes de cese inmediato del Ayuntamiento. Rita Maestre, portavoz municipal de Más Madrid, presentó una denuncia en marzo de 2024 por infracción urbanística y, en mayo, una inspectora municipal visitó el piso y comprobó que se había hecho una reforma de entidad, pese a las órdenes de paralización. Según el acta, se había acometido una “redistribución de las habitaciones, renovación de acabados e instalaciones eléctricas y obras exteriores de sustitución, carpintería e instalación de toldos”.

Tras este informe, la Junta de Chamberí emitió una orden de legalización, dándole dos meses a González Amador para obtener la licencia y advirtiéndole de la imposición de una sanción. Sin embargo, la resolución no era aún firme, y en julio, El Debate publicó que un juzgado había admitido un recurso de González Amador.

El 4 de diciembre, José Luis Martínez-Almeida, alcalde de la capital, aseguró que el procedimiento ya “concluyó” y que sus técnicos solo habían detectado la colocación irregular de unos aparatos de aire acondicionado. Aquella misma mañana, Más Madrid presentó en el Ayuntamiento una solicitud de “copia íntegra” del expediente, “donde consten todos los documentos, actuaciones y resoluciones emitidas hasta la fecha de registro” de esa petición.

La copia recibida por Más Madrid constó de 48 páginas. En ellas lo que se intuye, según interpreta el partido, es que el procedimiento quedó paralizado a la espera de que el juzgado competente, el 14 de lo contencioso-administrativo, resuelva su recurso.

El caso de la obra estalló en marzo de 2024, días después de que se conociera otro problema legal que afecta a González Amador: la investigación contra él por la presunta comisión de dos delitos de fraude fiscal y uno de falsedad en documento mercantil. Desde entonces, la Audiencia Provincial ha dado luz verde a la apertura de una segunda pieza, que afecta a los negocios de la consultora de González Amador en 2020 y 2021 con el gigante sanitario Quirón, una empresa que factura anualmente cientos de millones a la Comunidad de Madrid, en este caso centrada en la presunta comisión de los delitos de administración desleal y corrupción en los negocios.