“No al pelotazo de la Ermita del Santo”: expulsados unos vecinos que protestaban en el pleno del Ayuntamiento de Madrid

Luz verde al proyecto, que contempla torres de 23 alturas, 548 viviendas y 6.300 metros cuadrados para equipamientos en los barrios de la Puerta del Ángel y Los Cármenes

Nuevo proyecto de la Ermita del Santo.AYUNTAMIENTO DE MADRID

El voto favorable del PP ha permitido aprobar este martes, en el pleno del Ayuntamiento de Madrid, la Modificación Puntual del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para Ermita del Santo, una iniciativa privada considerada “de interés general” que permitirá ganar casi el 70% de una superficie de 44.349 metros cuadrados (m²) que actualmente son de dominio privado para sus vecinos. El PP ha votado a favor, Vox se ha abstenido y Más Madri...

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El voto favorable del PP ha permitido aprobar este martes, en el pleno del Ayuntamiento de Madrid, la Modificación Puntual del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para Ermita del Santo, una iniciativa privada considerada “de interés general” que permitirá ganar casi el 70% de una superficie de 44.349 metros cuadrados (m²) que actualmente son de dominio privado para sus vecinos. El PP ha votado a favor, Vox se ha abstenido y Más Madrid y el PSOE lo han rechazado al considerar que es “un nuevo pelotazo urbanístico”. Durante la intervención del delegado de Urbanismo, Borja Carabante, un grupo de vecinos de No al pelotazo de la Ermita del Santo han sido expulsados del pleno tras repetir, a gritos, el lema que da nombre a su plataforma, lo que ha paralizado la sesión unos minutos. Para estos vecinos, “la altura de las torres proyectadas casi quintuplica la de algunos edificios colindantes, lo que sumirá en una penumbra permanente al vecindario”. “Es una demostración más de que este Consistorio gobierna para especuladores, Socimis y fondos buitres, en vez de para su ciudadanía”.

Sin embargo, Carabante ha resaltado que el proyecto, que en su día rechazó Manuela Carmena, mejora las zonas verdes existentes y reduce la edificabilidad en el entorno, al tiempo que incrementa la oferta de la vivienda y de vivienda protegida, por lo que ha vaticinado que el plan mejorará la calidad de vida de los madrileños.

Los concejales de Más Madrid y el PSOE José Luis Nieto y Pedro Barrero, han pedido la retirada del expediente del orden del día para aplazar la votación ―lo que ha sido rechazado por el PP―, y se han mostrado en contra de lo que definen de “pelotazo” urbanístico, al considerar que el Gobierno municipal pone “el lucro por encima de las necesidades” de los vecinos de Los Cármenes y Puerta del Ángel, en el distrito Latina.

El PSOE ha condenado la “jugada especulativa” y ha afeado a Carabante que lleven los vecinos más de un año esperando una reunión, cuando el concejal ha “preferido recibir al promotor venezolano” que está detrás del plan e “implicado en casos de corrupción como los Paradise Papers o los Pandora Papers, mientras que Más Madrid ha arremetido contra las modificaciones “estéticas” que le hicieron durante el proceso de información pública.

“Una actuación de esta envergadura no se puede hacer de espalda a los vecinos, que son los que van a sufrir el impacto en sus vidas. Ni contestas a las alegaciones de los vecinos, ni a las de este grupo municipal”, ha espetado al delegado. Barrero ve en todo esto “una tomadura de pelo que solo beneficia al capital venezolano, propietario del centro comercial, quintuplicando el valor de sus terrenos”.

El centro comercial fue comprado en 2012 por unos 16 millones de euros por Desarrollos Ermita del Santo, SOCIMI, S.A, compuesta por cinco empresas. La más relevante, con un 30%, es Ibemetex, cuyo propietario es el empresario venezolano Alberto Enrique Finol Galué. El suelo del magnate pasaría de 16 millones a más de 80, según los expertos inmobiliarios consultados por este diario.“Así que déjense de aplicar el rodillo de sus actitudes imperativas y no al pelotazo de la Ermita del Santo”, ha concluido el socialista.

Nieto ha coincidido que esta modificación del planeamiento “tiene como único fin el anteponer el interés de un particular al interés general, situar el beneficio privado, el lucro, por encima de las necesidades de las vecinas y los vecinos de los barrios de la Puerta del Ángel y Los Cármenes”. El edil de Más Madrid ha destacado las “carencias importantes de instalaciones deportivas, de escuelas infantiles, instituto, de centros de mayores, de biblioteca y centro cultural, de oficina de atención al ciudadano pero, lo peor, es que pretenden aprobar estas recalificaciones sin haberse sentado siquiera a hablar con los vecinos afectados para conocer qué les parece lo que proponen”.

El concejal de Vox Ignacio Ansaldo ha pedido que el proyecto incluya una edificación en homenaje a Francisco de Goya, como estaba previsto anteriormente, ya que en el ámbito que abarca el plan está ubicaba la Quinta del Sordo, la finca en la que vivió el pintor. El Ayuntamiento considera que la transformación de este ámbito en desuso del distrito de Latina supondrá “el renacer” de Ermita del Santo con “un urbanismo eficiente, con más vivienda, zonas verdes y equipamientos ahora inexistentes”.

En una nota que recoge los detalles del proyecto, el Ayuntamiento explica que permitirá obtener casi un 70% de suelo público “en favor de los ciudadanos” para crear 548 viviendas en Los Cármenes, espacios de convivencia, 16.814 m² de zonas verdes y 6.380 m² de equipamientos. El modelo residencial es el de “vivienda protegida de precio básico, para gente con menos recursos, que será la mayoritaria de la vivienda de protección”: la vivienda protegida alcanzará el 29% de la edificabilidad residencial, la mayor parte, con precio limitado, explica el Consistorio. De los 15.880 m² destinados a vivienda protegida, el 40% se dedicará a pisos de precio básico y el 60% a vivienda con precio limitado. Las edificaciones en altura se situarán en posición norte-sur para garantizar con la “arquitectura bioclimática” una ganancia solar óptima en las viviendas durante los meses fríos y está previsto que haya cubiertas vegetales en las azoteas.

El parque de La Ermita del Santo será conectado con el de Caramuel con un paseo de 60 metros de ancho y habrá un ámbito donde se fomentará la movilidad sostenible, zonas estanciales, servicios para los vecinos y la implantación de una gran “plaza mayor” con locales comerciales, restauración, de ocio y recreo ―el Teatro Goya se reubicará―. Será crearán calles peatonales de conexión entre las zonas verdes, el paseo de la Ermita y Madrid Río y se configurará un ámbito donde se fomente la movilidad peatonal y sostenible.

Por otra parte, dice el Ayuntamiento, la transformación del ámbito convertirá un complejo comercial y deportivo en declive desde hace más de tres lustros en los alrededores de Madrid Río, entre los centros comerciales Plaza Río II y Príncipe Pío, en un centro urbano que “resolverá los problemas que la situación actual ocasiona y otros déficits del barrio”, con nuevas zonas verdes en 16.814 m², espacios libres de convivencia y nuevos equipamientos en 6.380 m². El plan prevé la continuidad de las instalaciones deportivas en la avenida de Los Caprichos, para permitir su ampliación en una zona deportiva anexa a la instalación municipal de estas características que ya existe, y con la ejecución de una piscina pública cubierta junto a las salas de gimnasio y fitness.

Pancartas en contra del proyecto, en octubre de 2022. KIKE PARA

El Ayuntamiento recuerda que el 1 de septiembre de 2022 fue sometido a información pública un proyecto previo de Modificación del PGOU para esta área de planeamiento, para el que se recogieron un millar de alegaciones. La propuesta nueva, agrega, atiende las demandas recogidas de reducción de edificabilidad, de 73.200 metros cuadrados a 67.000, o la rebaja de la altura de las torres de un máximo de 28 a 23 alturas.

Tras la aprobación de este martes en el pleno, el expediente será remitido a la Comunidad de Madrid para su aprobación definitiva con un plazo de cuatro meses, a partir de la cual comenzará el desarrollo del polémico proyecto por parte de los propietarios del suelo antes de que acabe 2024, espera el Ayuntamiento. “Ya veremos si la Comunidad de Madrid, una vez más, no les vuelva a pedir cambios porque evidencian irregularidades”, ha advertido Barrero.

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