Almeida rechaza colocar la bandera del Orgullo en la fachada del Ayuntamiento
La insignia desapareció del edificio municipal cuando Manuela Carmena dejó el cargo y el alcalde popular se niega a recuperarla, aunque ha accedido a iluminar el edificio y la Cibeles con sus colores
Si antes la colocación de la bandera del Orgullo dividía al gobierno de Madrid, ahora no hay apenas discusión. La mayoría absoluta que le dieron las urnas a José Luis Martínez-Almeida el 28-M le permite reducir el debate a una cuestión de forma: bandera, no; iluminación, sí. Y punto. También a que “si ese es el problema que hay, es que entonces no hay ningún problema”, ha remarcado el alcalde para zanjar el asunto de si al ayuntamiento le importa o no la visib...
Si antes la colocación de la bandera del Orgullo dividía al gobierno de Madrid, ahora no hay apenas discusión. La mayoría absoluta que le dieron las urnas a José Luis Martínez-Almeida el 28-M le permite reducir el debate a una cuestión de forma: bandera, no; iluminación, sí. Y punto. También a que “si ese es el problema que hay, es que entonces no hay ningún problema”, ha remarcado el alcalde para zanjar el asunto de si al ayuntamiento le importa o no la visibilidad de la lucha por los derechos del colectivo LGBTI, más allá de que le interese que se celebren en la capital unas fiestas que atraen a miles de turistas y de dinero y que arrancan el próximo viernes, 23 de junio. La fachada y la fuente de la Cibeles estarán iluminadas con los colores de la bandera, pero no habrá bandera, ha asegurado Almeida. No hay más confrontación. A la izquierda, mermada en número de concejales, solo le queda el reproche.
“A todos aquellos que discuten si se cuelga o no se cuelga la bandera del movimiento LGTBI, con todos mis respetos hacia esa bandera, les diré que si ese es el problema que hay, entonces es que no hay ningún problema con el Orgullo en la ciudad de Madrid”, ha trasladado a los periodistas a su llegada a la sede de la patronal madrileña, CEIM. Ha insistido, no obstante, en que “la fachada de Cibeles, de 2.800 metros cuadrados, y la fuente de Cibeles van a reflejar la bandera del movimiento LGTBI, por tanto, el Orgullo se va a celebrar exactamente en las mismas condiciones en las que se ha venido celebrando desde que lo trajo José María Álvarez del Manzano”. “Nosotros siempre hemos defendido, porque es uno de los grandes eventos que se celebran al año en Madrid, que transmite una imagen de Madrid como una ciudad libre, abierta, tolerante y diversa, y, por tanto, que tiene el apoyo del Ayuntamiento”, ha insistido.
Lejos han quedado las viejas peleas con su anterior socio de gobierno, Ciudadanos, hoy sin representación alguna en el ayuntamiento. En la anterior legislatura, se amparó en una sentencia del Supremo que prohibía colocar banderas no oficiales en edificios públicos. Aunque esto le costó un conflicto interno con su vicealcaldesa, Begoña Villacís (de Ciudadanos), que proponía desplegar la bandera en otro punto que no implicara un edificio institucional y que aseguraba que a ella “le encantaría” verla frente a la fachada del consistorio.
En la primera celebración del Orgullo de Almeida, en 2019, la bandera sí se colocó, aunque también con polémica. Vox, que sostenía el acuerdo de Ciudadanos y populares en el Ayuntamiento en la anterior legislatura, se negó a apoyarla. Almeida ordenó entonces que se colocara en un lateral de la fachada del Palacio de Cibeles, en lugar de en el centro, donde siempre. La primera vez que se colgó la bandera arcoiris del Ayuntamiento fue en 2015, con Manuela Carmena como alcaldesa.
El portavoz adjunto de Más Madrid en el Ayuntamiento, Eduardo Fernández Rubiño, y la portavoz socialista, Reyes Maroto, han arremetido en una tertulia en la cadena SER contra “el sectarismo ideológico del PP”. Y han cuestionado si el alcalde acudirá esta vez a algún acto oficial de la Marcha del Orgullo de Madrid (MADO). Por su parte, el nuevo delegado de Políticas Sociales, Familia e Igualdad, José Fernández, que ha asistido a la presentación del programa, ha condenado que se “deshumanice” a las personas LGTBI que no son de izquierdas, según ha recogido Europa Press.
La Marcha del Orgullo recorrerá las calles de Madrid este 1 de julio, aunque sus fiestas arrancan este viernes. El MADO de este año será el primero en la historia que se celebra en campaña electoral. “No hay contenedor suficientemente grande como para que quepa la bandera arcoíris. No van a conseguir tirarnos a la basura por una cuestión muy sencilla: tenemos derecho a ser quienes somos”, ha subrayado este martes por la mañana su coordinador, Juan Carlos Alonso, durante la rueda de prensa de presentación del Orgullo Estatal 2023 en el Museo Nacional Thyssen-Bornemisza.
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