Diez planes para hacer con niños esta Navidad en Madrid
Desde patinar a ir de belenes, disfrutar del circo, ver las luces o hacer talleres en el Planetario o La Casa Encendida
El gran drama del primer mundo no es el ficticio y peliculero apagón mundial ni la muy real falta de suministros, sino qué hacer con los niños en los 18 días de vacaciones que se avecinan como una condena bíblica mientras se trabaja, se echa de menos el comedor escolar y se compran y envuelven a toda prisa sus regalos. Aquí seleccionamos 10 planes navideños para alternar entre abuelos, cuidadores varios, películas, videojuegos y tablets:
Patinar. La capital ...
El gran drama del primer mundo no es el ficticio y peliculero apagón mundial ni la muy real falta de suministros, sino qué hacer con los niños en los 18 días de vacaciones que se avecinan como una condena bíblica mientras se trabaja, se echa de menos el comedor escolar y se compran y envuelven a toda prisa sus regalos. Aquí seleccionamos 10 planes navideños para alternar entre abuelos, cuidadores varios, películas, videojuegos y tablets:
Patinar. La capital abre ocho pistas de hielo, con Matadero y la Galería de Cristal del Palacio de Cibeles a la cabeza y otras seis distribuidas por los distritos de Centro (plaza Juan Goytisolo), Fuencarral-El Pardo (Recinto de Navidad, en la avenida de Monforte de Lemos y parque de La Vaguada), Moncloa-Aravaca (hay dos, en el recinto ferial navideño de plaza de España y en la explanada Puente del Rey), Puente de Vallecas (en la avenida Entrevías, frente al Cercanías Asamblea de Madrid-Entrevías), Salamanca (plaza de Colón) y Usera (recinto ferial navideño, en la avenida Rafaela Ybarra, 41).
La más grande es la de Matadero (hasta el 9 de enero por seis euros en entradas.com), de 600 metros cuadrados, en la que se puede practicar patinaje libre y disfrutar de exhibiciones gratis de la Federación Madrileña de Deportes de Invierno (26 y 30 de diciembre y 2 de enero a las 11.30). La pista del Palacio de Cibeles, de más de 300 metros cuadrados, abre de 11.00 a 21.00 también hasta el 9 de enero.
Ir de belenes. Se crea en algo o no, los belenes, con toda su gracia anacrónica, son una bonita tradición y además muy madrileña, ya que el primer taller de España se creó en 1471 en Alcorcón. Uno de los más interesantes es el de José Luis Mayo Lebrija, que abre hasta el 5 de enero en el Ayuntamiento (CentroCentro, Palacio de Cibeles), gratis previa recogida de invitación en la taquilla de la planta 2 o mediante reserva digital (por 0,5 euros). Compuesto por 200 figuras que acaban de ser restauradas y 20 edificaciones, contiene las siete escenas más típicas y detalles curiosos como el despiojado de un niño.
Otro de los destacados es el belén municipal de la plaza de la Villa (patio de Cisneros, plaza de la Villa 5), con más de 150 figuras y una escenografía inspirada en parques naturales nacionales (entrada libre). El Palacio Real expone su belén napolitano, iniciado por Carlos III para su hijo Carlos IV y con más de 200 figuras, las más antiguas del siglo XVIII.
El Museo de Historia muestra un belén napolitano del siglo XVIII con 50 piezas articuladas (hasta el 30 de enero) y, en el exterior de la sede de la Comunidad de Madrid, en la Puerta del Sol, se pueden ver más de 160 figuras sobre tres islas hechas de rodajas de árboles, que representan los tres continentes conocidos en aquella época. Aquí puede consultar la guía municipal los belenes de la capital, que recoge 31 en iglesias, museos y centros culturales y otras instituciones de 16 distritos. Una alternativa moderna es La Navidad con clicks, con 11 dioramas y mil figuras de Playmobil, gratis en el centro comercial Moda Shopping (avenida del General Perón, 38-40) hasta el 7 de enero.
Ver las luces. La iluminación de la capital puede contemplarse hasta el 6 de enero de 18.00 a 00.00. Hay 25 calles iluminadas y 13 abetos, con uno de 14 metros en la plaza de España. La mejor opción es subir a los niños en el autobús Naviluz, sentados y calentitos con una manta de casa (de domingo a miércoles de 18.00 a 23.00 y de jueves a sábado y festivos, hasta las 00.00, por seis euros en la página web de Alsa).
Por tercer año, vuelven las luces del Botánico con Naturaleza Encendida con Explorium, una exposición de arte digital que ilumina el Botánico hasta el 16 de enero. Son 15 kilómetros de LED azules en los que se recrea un océano habitado por serpientes, tortugas y medusas en un singular homenaje a la expedición de Magallanes y Elcano, que hace 500 años dieron la primera vuelta al mundo (todos los días de 18.00 a 00.00 desde 9,50 euros).
Circo. El Price cierra la trilogía de Cometa con La vuelta al mundo de Cometa, en la que esta superheroína y su troupe luchan por salvar la Navidad de las garras del supervillano Amargador a través de escenarios tan evocadores como Nueva York, Londres, París, Río de Janeiro, El Cairo y, por supuesto, Madrid (las entradas van de 14 a 27 euros y se puede ver hasta el 9 de enero). Otras magníficas opciones son el Madrid Circus Festival 1921, que propone un viaje al pasado a través de un túnel mágico (Espacio Ibercaja Delicias hasta el 9 de enero y a partir de 20 euros) y Circlassica, el sueño de Miliki, en el que Emilio Aragón propone un viaje a la nostalgia.
Teatro y espectáculos. En los Luchana han preparado una programación con 17 espectáculos desde las 10.30 hasta las 20.00, con cuentos clásicos revisados, musicales y teatro para bebés; en la Cuarta Pared hay, además de los espectáculos, actividades gratuitas para crear y representar en familia vuestro propio cuento de Navidad. Una propuesta muy de estas fechas es ver Cuento de navidad, que se convierte en comedia en el Nuevo Teatro Alcalá (desde 18 euros) y también lo representan en la sala Tarambana (desde 7 euros) y en el teatro Sanpol (14,50). En la Escalera de Jacob destacan Diario secreto de los hermanos Grimm y el musical Ana y el Jazz. El Fernán Gómez ha preparado 52 representaciones de música, títeres, narración oral, danza, teatro y otras disciplinas para todos los públicos hasta el 17 de enero.
Mágicas Navidades. Tras el parón del año pasado, vuelve el gran parque temático de la Navidad, aunque este año más pequeño y solo en el recinto ferial. Otra novedad es que los no empadronados deben pagar entrada (uno o dos euros) con el fin de controlar el aforo. No hay casita de papá Noel, pero sí tobogán y roscos de hielo, noria y otras muchas atracciones, con una nueva torre de sillas voladoras de 60 metros.
Ir de pueblos. Hay vida más allá de la M-30 (y de la M-40 y de la M-50). Uno de los mejores destinos es Alcalá de Henares, con un programa de 200 propuestas, un gran túnel de luz, un árbol de 26 metros y una noria de más de 40. San Lorenzo de El Escorial celebra el 25 aniversario de su belén monumental, con 500 figuras a tamaño real hechas por los vecinos.
El más famoso de los belenes vivientes, el de Buitrago del Lozoya, ha sido cancelado por segundo año consecutivo, pero sí habrá en El Molar, Manzanares el Real, Colmenar Viejo y Arroyomolinos. En Boadilla del Monte montan una carpa con talleres, castillos hinchables para los peques y consolas y juegos tradicionales para los mayores; en Arganda hay un mercadillo romano, trenes turísticos y atracciones de feria; en Getafe, una feria con 50 puestos, una noria, una montaña rusa, 20 atracciones infantiles, pista de hielo y zona de restauración; en Tres Cantos, una gran noria abre la Avenida de la Ilusión, con atracciones, tren y la casita de Papá Nöel, una pista de quads, camas elásticas, un tobogán de trineos, una noria infantil, dos tiovivos, un scalextric, pista de hielo y cuatro castillos hinchables; en Fuenlabrada, una pista de hielo....
Talleres y actividades. En La Casa Encendida han preparado una variada y original programación En Familia para Navidad con cine, conciertos como el de la banda Tigres Leones y sus cuentos cantados, un karaoke que invita a vivir dentro de un videoclip o una pista de patinaje con DJ (desde 3 euros). En Caixaforum Madrid pueden hacer el guion de un corto, grabarlo y editarlo, entre otros interesantes talleres, mientras que en el Planetario pueden ser detectives de constelaciones o conocer los planetas del Sistema Solar y saber qué hay detrás de la estrella de Belén (y gratis).
Cortylandia. Aunque muchos no le vean gracia ninguna a los niños pasen una hora de pie en una calle estrechísima petada de gente hasta las farolas esperando a que se active el mecanismo para un espectáculo que dura 15 minutos y que apenas se puede ver entre cabezas, globos, gorros de Pokemon y demás parafernalia, esta cita tradicional de la Navidad madrileña sigue teniendo su público. Tras suspenderse el año pasado por la pandemia, vuelve con los cascanueces alemanes como tema, un escenario de 40 metros y un corto de animación proyectado en la pantalla (en la fachada del Corte Inglés de la calle Maestro Victoria, hasta el 5 de enero con pases cada hora de lunes a viernes de 12.00 a 14.00 y de 18.00 a 21.00. Los sábados, domingos y festivos, los pases de tarde arrancan a las 17.00).
Ser solidarios. En estas fechas más que nunca, hay que enseñar a los niños la realidad, por ejemplo eligiendo con ellos los juguetes que van a donar a las campañas de Cáritas Madrid, Cruz Roja, Reyes Magos de Verdad, Juegaterapia, Ningún niño sin sonrisa o Fundación Valora, participando en eventos como el Roscón Solidario de Aldeas Infantiles o apuntando toda la familia como voluntarios en iniciativas como Nadie Sin Cenar en Nochebuena, que entregará 500 cenas este 24 de diciembre. “El año pasado participamos la mañana del 24 con nuestros hijos de 9, 11 y 13 años. Fuimos a uno de los restaurantes del hostelero Jorge García Trilla, descargamos los productos y nos organizamos en una cadena de montaje para hacer las cajas de alimentos, que volvimos a cargar en la furgoneta”, describe Carlos Garijo, para quien fue “una experiencia brutal, maravillosa”. “A los niños les encantó porque es dar su trabajo para ayudar a los demás, al tiempo que se dan cuenta de que no todo el mundo tiene un plato caliente y valoran más su situación privilegiada”, añade.