‘Madrid Circus Festival 1921’ celebra el glorioso pasado de los espectáculos circenses
Artistas internacional permiten a los espectadores viajar en el tiempo a través de números increíbles y acrobacias sorprendentes en la carpa del Gran Cabaret del Espacio Ibercaja Delicias
Hace 100 años un director de circo reunió bajo la misma carpa a los talentos más extravagantes de cada rincón del mundo: saltimbanquis ucranianos, contorsionistas orientales, una gran dama rusa del aro aéreo acrobático, un león volador y el torbellino humano desde Cuba. Juntos, ponían en escena el espectáculo circense más grande de la historia. Ahora, sus nietos y bisnietos vuelven a interpretar los mismos números que hicieron célebres a sus abuelos. Este viaje al pasado a través de un túnel mágico es la fantasía que inspira ...
Hace 100 años un director de circo reunió bajo la misma carpa a los talentos más extravagantes de cada rincón del mundo: saltimbanquis ucranianos, contorsionistas orientales, una gran dama rusa del aro aéreo acrobático, un león volador y el torbellino humano desde Cuba. Juntos, ponían en escena el espectáculo circense más grande de la historia. Ahora, sus nietos y bisnietos vuelven a interpretar los mismos números que hicieron célebres a sus abuelos. Este viaje al pasado a través de un túnel mágico es la fantasía que inspira Madrid Circus Festival 1921, el espectáculo familiar de la Navidad que se puede disfrutar en el Gran Cabaret del Espacio Ibercaja Delicias hasta el 9 de enero.
Bajo la dirección de Gabriel Chamé y con las coreografías de Maite Marcos, Madrid Circus Festival 1921 nace con la ambición de que cada año se pueda presentar el mismo formato, pero basado en diferentes épocas de la historia del circo, incluso viajando al futuro. “Hay algo de esperanza en esta idea, una especie de confianza y aliento a seguir jugando y creer en el arte. No es solamente entretenimiento”, subraya Chamé.
Todos los artistas que participan en el festival son profesionales del arte circense y traen sus propios números al espectáculo, adaptándose al guion de Alex O’Dogherty. Así, Madame Trompa, la increíble mujer pompa, es interpretada por la estrella del cabaret granadina Vinila Von Bismark, que como dice su nombre escénico consigue hacer la pompa más grande del mundo. Los equilibristas transalpinos Gominolo y Golosino, dos hermanos que no se pueden soportar, son en realidad los miembros del Dúo Forza, finalista de España Got Talent 2019.
Todo en Madrid Circus Festival es un sueño pensado para el divertimento de los más pequeños. Gracias a la magia de la Navidad, una poderosa máquina del tiempo logra traer de vuelta a esos temerarios escapistas, intrépidos trapecistas y personajes variopintos que disfrutaban poniendo en juego su vida en 1921. Hay una sola regla para dar comienzo a la magia, que anuncian al comienzo de la función Bruno Candado, el payaso empanado, y Tino, Tonto y Tanti Tende, los sirvientes impertinentes: “Los ojos abiertos, la risa jaja, las manos aplauso, los pies pataleo, de pie y a bailar”.
Como cualquier espectáculo circense que se respete, no puede faltar un jefe de pista. Vestido con la clásica chaqueta de frac roja con ribete dorado, sombrero de copa y megáfono en mano, el actor David Moreno da la bienvenida al público con la tradicional línea de apertura: “Señoras y señores, niños, niñas y niñes de todas las edades”. El logroñés —muy conocido entre los pequeños, ya que presenta La casa de los retos en Boing, el único programa de niños en la televisión española con un presentador— vuelve al teatro con Circus Festival después de 14 años de los musicales Grease y High School Musical.
Dramaturgia circense
“Más que un circo, es una dramaturgia de circo. Tiene coreografías, números de payasos, acrobacias y trucos de magia. Todas las actuaciones son un homenaje a los artistas del circo antiguo, pero con un claro toque de modernidad”, comenta O’Dogherty, autor del texto. Cada personaje tiene una historia original que los espectadores descubren a lo largo de la función gracias a la presentación del maestro de ceremonia.
Entre los números más clásicos destaca la actuación de Madame Trompa, que se enfrenta con éxito a uno de los más antiguos trucos de ilusionismo de la historia, cortar a una persona en una caja con una sierra y recomponerla. Más moderna es la actuación de Nicanor, el león volador, que baila por el escenario en patines al ritmo del látigo de su domadora, hasta despegar del suelo y danzar sobre las cabezas del público.
El festival, sin embargo, no se limita al espectáculo que toma vida en el escenario. Fuera de la gran carpa la ilusión continúa con una feria antigua de estilo circense con maquillajes de cara para los niños, juegos y animaciones, para que el público pueda vivir una experiencia que va más allá del espectáculo.
Suscríbete aquí a nuestra newsletter diaria sobre Madrid.