El Gobierno ejecuta el desalojo del nuevo edificio de La Ingobernable, vacío durante el estado de alarma

El Ejecutivo decidirá en las próximas semanas qué hará con el edificio, okupado a principios de marzo

Entrada del edificio ocupado por La Ingobernable, desalojado este jueves. / LUCÍA FRANCOLucía Franco

El Ministerio de Justicia, propietario del inmueble okupado por el colectivo La Ingobernable en las proximidades del Museo del Prado, en el centro de Madrid, ha ejecutado el desalojo del edificio, que llevaba vacío desde que se decretó el estado de alarma. La antigua sede del Archivo General de Protocolos, situado en el número 4 de la calle de Alberto Bosch, había sido okupada el 4 de marzo.

Fuentes del Ministerio de Justicia señalan que “no se ha desalojado nada porque no había nadie. Se ha recuperado la posesión del edificio”, el miércoles, después de “seguir un proceso administrativo...

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El Ministerio de Justicia, propietario del inmueble okupado por el colectivo La Ingobernable en las proximidades del Museo del Prado, en el centro de Madrid, ha ejecutado el desalojo del edificio, que llevaba vacío desde que se decretó el estado de alarma. La antigua sede del Archivo General de Protocolos, situado en el número 4 de la calle de Alberto Bosch, había sido okupada el 4 de marzo.

Fuentes del Ministerio de Justicia señalan que “no se ha desalojado nada porque no había nadie. Se ha recuperado la posesión del edificio”, el miércoles, después de “seguir un proceso administrativo”. El martes 14 de abril, el Boletín Oficial del Estado publicó que el Ministerio de Justicia iba a proceder al desalojo del espacio en 48 horas. El Gobierno decidirá en las próximas semanas que hará con el edificio recuperado, con más de 2.000 metros cuadrados y ubicado en una de las zonas residenciales más caras de la capital.

Este viernes a mediodía había cinco trabajadores de una empresa de seguridad en la entrada del edificio. No había presencial policial. Tampoco está la pancarta con la que el colectivo declaraba su nueva okupación: “Seguimos en el corazón de Madrid”.

El edificio que ocupaba el centro social La Ingobernable, la mañana de este viernes. / LUCÍA FRANCO

Este es el segundo desalojo que sufre el colectivo en menos de seis meses. El 13 de noviembre de 2019, la policía desalojó el centro social La Ingobernable de su sede en la calle del Gobernador que había sido ocupado desde mayo de 2017, tras una manifestación con el lema “Madrid no se vende”.

Los miembros de la Asamblea del centro social solo han podido manifestarse en redes sociales (con el hashag #DesalojanWTF) debido al confinamiento decretado por el estado de alarma en toda España durante la crisis de la covid-19. Según cuenta uno de los portavoces, la noticia del desalojo les ha llegado a través de los vecinos de la zona. “Este miércoles nos mandaron fotos con cambios en la cerradura. Y este jueves, en las imágenes se veían policías y la puerta abierta, como si ya estuvieran dentro”, señala este portavoz.

El colectivo considera en un comunicado que el Ministerio de Justicia ha vulnerado activamente el derecho fundamental a la defensa, "cuando se reanudó el proceso de desalojo, contábamos con un plazo para presentar alegaciones que fueron emitidas por un vecino el pasado 27 de marzo. Al Ministerio estas alegaciones no le constan. El resultado, un nuevo desalojo para el colectivo”.

La Ingobernable el 4 de marzo, cuando el colectivo hizo público la nueva okupación del inmueble de la calle Alberto Bosch

Los miembros de la Ingobernable, que se están organizando en videollamadas de 50 y 60 personas, afirman que volverán a ocupar otro edificio abandonado en la capital cuando se levante la obligación de permanecer en casa. “Es iluso por pensar el desalojo de ahora desarticule lo que es La Ingobernable”, explica uno de los miembros del colectivo. “La Ingobernable es un proyecto que va más allá de un espacio, y la okupación es una práctica legítima que continuaremos llevando a cabo mientras este sistema sea así de injusto”, afirman en un comunicado.

“Es tan decepcionante como vergonzoso que, tras el anuncio de la amenaza de desalojo la semana pasada, aquellos políticos “del cambio” que habían manifestado su apoyo a los centros sociales y al proyecto de la Ingobernable en particular, hayan mantenido un silencio cómplice e insensible a una infraestructura básica para nuestras redes comunitarias”, señala un portavoz de la Ingobernable.

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