Alta concentración de viajeros en Cercanías; falta de trenes en Metro y cierre temporal de Bicimad

Renfe dice que la demanda ha caído un 80% mientras Metro la cifra en un 75%; aunque el suburbano afirma que no ha reducido el servicio, no se han cumplido las programaciones de trenes estipuladas

Una persona sale de la estación de Cercanías de Ramon y Cajal con mascarilla.Samuel Sanchez (EL PAÍS)

“Mi empresa decide que tengo que trabajar para llegar aquí [Atocha] e ir peor que en días en que no había pandemia”. Esta era la queja de muchos madrileños esta mañana en Twitter, que lamentaban el hacinamiento en estaciones de Renfe Cercanías en el primer día laborable en estado de alarma por el coronavirus. La causa era ...

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“Mi empresa decide que tengo que trabajar para llegar aquí [Atocha] e ir peor que en días en que no había pandemia”. Esta era la queja de muchos madrileños esta mañana en Twitter, que lamentaban el hacinamiento en estaciones de Renfe Cercanías en el primer día laborable en estado de alarma por el coronavirus. La causa era una avería en la estación de Príncipe Pío, que ha causado demoras en hora punta en las líneas C1, C7 y C10. Tras registrarse estos problemas, Transportes ha anunciado que reforzará algunas líneas, especialmente la C5. Pero la denuncia se extendía también al metro y a la EMT, a pesar de que ninguno de los transportes públicos de Madrid ha reducido sus frecuencias, la demanda es escasa y no se han producido averías en el resto de sistemas. “Al llegar los trenes de Cercanías cargados hasta arriba a un estación de correspondencia de metro, se han originado atascos”, contaba un maquinista del suburbano. Ha habido aglomeraciones leves, pero no las que han circulado por redes: el Gobierno regional ha denunciado que se han distribuido fotos falsas. Según los datos de Metro, en hora punta ha habido un 75,27% menos de viajeros que en un día normal. En Cercanías, la caída ha sido del 80%, mientras que EMT no facilita datos hasta el final del día.

“Puntualmente se han podido producir una alta concentración de viajeros en determinadas estaciones”, ha explicado una portavoz de Cercanías que ha admitido que esa sobrecarga ha ocurrido sobre todo “en Atocha”, donde confluyen todas las líneas que operan en la región. El origen, según han explicado las fuentes de la compañía, ha sido una incidencia en la estación de Príncipe Pío ocurrida a las 7.30 y que tardó media hora en solucionarse. Afectó a un par de trenes de las líneas C1, C7 y C10; se acumularon retrasos de 10 a 12 minutos.

Tras los incidentes matutinos, el Gobierno, de quien depende Cercanías, ha anunciado el refuerzo de algunas líneas de la región, con especial incidencia en la C5, que va de Móstoles a Humanes pasando por Atocha “para evitar aglomeraciones como las detectadas esta mañana”, ha explicado la secretaria general de Transportes, María José Rallo. Los representantes laborales del sindicato UGT han reclamado “limitaciones de aforo en andenes y vagones” para evitar la concentración de personas.

“Exigimos dotaciones de elementos de seguridad y de protección a quienes estamos en la primera línea del frente, afrontando los mayores riesgos”, han reclamado los representantes laborales de CC OO en Metro de Madrid, gestionado por la Comunidad de Madrid. Piden al suburbano que les aporten “guantes, mascarillas, desinfectante”. “Es imperativo; es insostenible trabajar sin que se nos abastezca de elementos de protección”, ha incidido el sindicalista Juan Carlos de la Cruz.

Los viajeros han denunciado durante toda la mañana del primer día laborable en cuarentena que los vagones iban llenos y sin suficiente distancia de protección. Cercanías ha sido el único servicio que ha reducido el número de vehículos. En Metro y EMT (Empresa Municipal de Transporte) se mantiene “todo igual": “Se presta el servicio al 100%”, han asegurado sus respectivos portavoces. Los del suburbano han agregado que “no se están produciendo aglomeraciones, salvo en algún momento y algún punto muy concreto: la demanda ha caído en picado desde el cierre de los colegios en Madrid”. Además de los viajeros, en Metro ha caído el número de trenes. Este lunes, en la hora punta matutina (de 6.00 a 9.00) faltaron una treintena de convoyes, casi un 10% del servicio programado. Faltas que coinciden con los datos de la semana pasada, cuando hubo días en los que se redujo el número de viajeros a la mitad, según los datos de frecuencia de la propia compañía.

Metro ha contabilizado apenas 118.121 viajeros en la hora punta del lunes, una caída del 75,27% con respecto al mismo día de la semana anterior. El domingo 15 de marzo se registraron durante todo el día 125.477 viajeros, un 88% menos que el mismo día de la semana anterior. Un portavoz de la Comunidad ha alertado de la difusión de “fotografías falsas de Metro donde aparecen aglomeraciones”. "No se corresponden con la realidad: la red ha presentado una afluencia testimonial de viajeros, con andenes y trenes prácticamente vacíos”, asegura. Afirmación que Metro ha reforzado con la publicación de imágenes de la red vacía a las 7.50.

En cuanto a los autobuses urbanos de la EMT, una portavoz municipal ha informado de que “los servicios están al 100%”, con los mismos horarios y frecuencias, a pesar de que su uso no para de caer". El número de viajeros descendió este domingo un 87% respecto al mismo día de la semana anterior. Un descenso que esperan que se repita hoy aunque los datos oficiales no se ofrecen hasta el cierre de la jornada. El Ayuntamiento sí que cerró temporalmente el servicio de bicicletas públicas Bicimad. Medida que aplicaron también Bilbao o Barcelona. “Las manos van directas al manillar, no podemos garantizar la correcta higiene de las bicicletas”, ha asegurado la responsable municipal de sanidad de Barcelona, informa Clara Blanchar. “Es un error suspender Bicimad”, han declarado los representantes de Más Madrid, “se deben desinfectar diariamente las bicicletas y establecer protocolos adecuados". “En la ciudad china de Wuhan se han mantenido abiertos [los sistemas de bici pública]: permiten una movilidad más segura”, han agregado.

En Wuhan, donde surgió el primer brote del virus, la bicicleta pública no solo no se cerró, sino que se fomentó su uso frente a transportes colectivos. Bogotá, por su parte, ha cedido a los ciclistas uno de los carriles dedicados a los coches para fomentar el transporte sobre dos ruedas. "La bicicleta es el medio de transporte más seguro porque reduce notablemente los contagios”, ha explicado Miguel de Andrés de Pedalibre que ha remarcado que el decreto de alarma permite su uso “como transporte alternativo” y al igual que el resto de vehículos “única y exclusivamente para los casos establecidos por el decreto, no para ocio o deporte”.

El Ayuntamiento de la capital ha suspendido también las autorizaciones de patinetes mientras que las empresas de sharing (tanto de moto como de coche, como Zity, Car2Go, Emov...) están dejando de operar. Además, se ha reducido el servicio del taxi a la mitad. El tráfico rodado ha registrado mínimos con descensos del 38,5% en la almendra central y de un 57,1% en el exterior de la M-30. Este lunes, la hora punta en la capital de España ha sido inexistente.




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Así quedan los transportes tras el estado de alarma

El ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Abalos, afirmó el domingo que el servicio de Cercanías que Renfe presta en Madrid y en una decena más de capitales mantiene el 100% de la oferta para garantizar el transporte de los que tengan que acudir a sus puestos de trabajo o a determinados servicios básicos. No obstante, prometió que en los próximos días se estudiaría si es preciso “ajustarlo” siempre con el fin de evitar “masificaciones”.

La oferta de billetes para viajar en trenes AVE, Larga Distancia, Avant y Media Distancia (regionales) sí que se ha recudido hasta un 85% ―circulan el 50% de los convoyes y se venden el 30% del total de billetes para que haya el espacio entre viajeros―. En el caso de los autobuses interurbanos de línea, Abalos recordó que, tal como establece el decreto, también recortan su oferta a la mitad y deben asimismo garantizar que las plazas vendidas mantengan las correspondientes distancias. En cuanto los transportes de competencia autonómica, como Metro de Madrid, el titular de Transportes indicó que daría instrucciones a las autoridades regionales y locales para que establezcan la reducción que vean conveniente.

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